Pedro Sánchez anuncia el impulso de canales de denuncia anónima para luchar contra la corrupción
Gran expectación ante la entrega del ‘Premio Manuel Olivencia al Buen Gobierno Corporativo’ que se celebró la noche de este martes en la Bolsa de Madrid ante la comunidad financiera y empresarial.
En esta primera edición el galardón fue a parar a International Airlines Group (IAG). El objetivo del Premio, creado por la Fundación Cuatrecasas, es reconocer la labor de las empresas que fomentan y mejoran el gobierno corporativo en España.
El acto contó con la participación de Pedro Sánchez, presidente del Gobierno y Sebastián Albella, presidente de la CNMV. Rafael Fontana, presidente de Cuatrecasas y vicepresidente de la Fundación, y Juan Aguayo, socio de la firma y director del Premio Manuel Olivencia, fueron los encargados de conducir una ceremonia a la que asistieron 200 invitados, con una buena representación de compañías cotizadas, autoridades, académicas y jurídicas.
El presidente del Gobierno anunció en su intervención un mayor control y transparencia de los organismos reguladores, así como el impulso de canales de denuncia anónima por parte de los empleados que detecten algún tipo de conducta no ética o ilegal en su compañía.
En su intervención aseguró que el Gobierno reforzará el papel de los organismos reguladores y supervisores de los mercados como la CNMC, la CNMV y el Banco de España para que cumplan su función de la forma más eficiente posible.
Para él, es fundamental la autonomía e independencia de estos organismos, una independencia que «debe empezar por la elección de los miembros del consejo de los reguladores», dijo.
«El Gobierno quiere avanzar en el procedimiento de designación de sus miembros incrementando la transparencia y también la publicidad de acuerdo con las mejores prácticas de los países del entorno de España», añadió.
El presidente resaltó que España ha vivido momentos muy difíciles por culpa de la corrupción o la falta de ejemplaridad con delitos cometidos muchas veces al amparo de la opacidad que han puesto en riesgo el vínculo esencial entre ciudadanía e instituciones que sostienen la democracia.
Por ello, insistió en que se necesita reforzar la transparencia de todos los organismos públicos y es esencial que los reguladores rindan cuentas y sean transparentes ante el Ejecutivo, el legislativo y las entidades reguladas. Sin embargo, el Consejo de transparencia y Buen Gobierno lleva casi un año sin director, tras fallecer Esther Arizmendi y se ha recortado su presupuesto.
El jefe del Ejecutivo se refirió, en otro momento de su intervención, también a la necesidad de seguir dando pasos para eliminar la discriminación laboral de la mujer, y en ese contexto subrayó que el Gobierno tiene la intención de acelerar la aprobación de la ley de igualdad laboral que se encuentra en trámite parlamentario
Olivencia, un jurista irrepetible
Por su parte, Rafael Fontana, presidente de Cuatrecasas aprovecho su intervención para recordar a Manuel Olivencia, fallecido el pasado 1 de enero, catedrático de Derecho Mercantil de la Universidad de Sevilla, vicepresidente de la firma Cuatrecasas y presidente de la comisión que redactó el primer código español de Buen Gobierno en 1998.
En sus palabras: “tenemos la ilusión de quien comienza algo nuevo convencido de su relevancia y de lo beneficioso que será para nuestras empresas y en general, para la sociedad española, a la que queremos servir. Y también estamos convencidos de que el año que viene, el Premio Manuel Olivencia al Buen Gobierno Corporativo será un galardón todavía más querido”.
Un premio merecido
El fallo del jurado, presidido por Manuel Pizarro, académico de número de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación, ha tenido en cuenta, para la concesión del premio, distintos aspectos reseñables de las prácticas de gobierno corporativo de IAG.
Juan Aguayo destacó los aspectos valorados por el jurado.
“Por un lado, la composición de su consejo de administración cuenta con una amplia mayoría de consejeros independientes, incluido su presidente. Además, ha valorado su política de relación con los inversores, la duración del mandato de los consejeros, que se someten cada año al referendo de su junta de accionistas, y los procesos de selección y formación de los consejeros. Asimismo, IAG destaca por su transparencia tanto en materia de gobierno corporativo como en materia de retribución de sus consejeros.”
Antonio Vázquez, presidente de IAG, recogió el galardón y destacó: “Nuestro agradecimiento a la Fundación Cuatrecasas y al jurado del Premio Olivencia por este reconocimiento que IAG, como compañía española, recoge con especial orgullo. Esta distinción refuerza nuestro compromiso con el buen gobierno corporativo, en el genuino convencimiento del valor que aporta a la gestión empresarial desde la perspectiva del ‘cumplir o explicar’, que tan oportunamente consagró en España el Código Olivencia.”
Por último, Sebastián Albella, presidente de la CNMV, cerró el acto de entrega del Premio y elogió la figura y legado de Manuel Olivencia, destacando la altísima calidad del Informe y Código de Gobierno corporativo que elaboró la comisión que impulsó. Albella lo calificó como “el hito fundamental de la gran evolución positiva de las prácticas de buen gobierno de las sociedades cotizadas españolas de los últimos 20 años, con la aportación destacada de la figura del consejero dominical”.
El Comité de Dirección del Premio Manuel Olivencia y la Fundación Cuatrecasas, aprovecharon la ceremonia para anunciar la continuidad del premio con una segunda edición prevista para 2019.
