El presidente del conjunto parisino Nasser Al-Khelaifi ha sido imputado por corrupción por el Tribunal de París acusado de intentar comprar los Mundiales de Atletismo de 2017 para que se celebraran en Doha y no en Londres, donde finalmente se disputaron.
Renaud Van Ruymbeke, juez de instrucción del área de delitos económicos del Tribunal de París, acusa a Al-Khelaifi de un «soborno activo».
El juez considera que autorizó un pago de 3,5 millones de dólares (3,1 millones de euros) a favor de Lamine Diack, expresidente de la Federación Internacional de Atletismo, para que los Mundiales de 2017 se celebraran en Doha, según ‘Le Parisien’.
Además, estudian la obtención de votos de miembros de la IAAF en favor de Catar para el Mundial.
No es la primera vez que Al Khelaifi es acusado por supuestos sobornos.
En 2017, el presidente del PSG fue investigado en su condición de director del grupo BeIN Media por «corrupción privada» hacia Jérôme Valcke, el ex secretario general de la FIFA, para asegurarse los derechos de televisión de los Mundiales de 2026 y 2030.