El eurodiputado del Partido Popular Esteban González Pons ha pedido en una carta al presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, que impulse en lo que resta de su mandato una reforma del sistema de órdenes europeas de detención y entrega para incluir la rebelión en la lista de 32 delitos graves por los que se debe proceder a la entrega automática.
Lo hace después de que el Tribunal Regional de Schleswig-Holstein aceptase la entrega del expresidente catalán Carles Puigdemont a España por malversación, pero rechazara el cargo de rebelión.
Por eso, Pons pide revisar esta lista que lleva a aceptar la entrega sin tener que comprobar la doble incriminación con el objetivo de «incluir una nueva categoría de delitos de rebelión, acciones contra la integridad territorial y el marco constitucional de un Estado miembro».
«Creo en la importancia de las euroórdenes porque han demostrado ser útiles en muchas ocasiones. Pero esta vez nos ha fallado, ha fallado a una nación que se defendió y todavía se defiende de aquellos que están intentando romperla en pedazos. Y al final ha socavado nuestra confianza en el sistema», lamenta Pons en la carta.
El eurodiputado muestra su «profundo desacuerdo» con la decisión del tribunal alemán, que a su juicio supone una «preocupación grave» sobre el funcionamiento general del sistema de euroórdenes.
Recuerda que el anterior Ejecutivo comunitario también expresó ciertas «preocupaciones» sobre el funcionamiento tal como quedó patente en un informe elaborado en noviembre de 2011 y el Parlamento Europeo hizo lo mismo cuando aprobó en febrero de 2014 recomendaciones para revisar el mecanismo.
«Las euroórdenes funcionan sobre la base del principio de reconocimiento mutuo dentro de un espacio común de libertad, seguridad y justicia. El pronunciamiento del Estado miembro emisor debe ser reconocido sin más formalidades y únicamente sobre la base de criterios judiciales», ha remarcado Pons.
También se ha referido a que «vivimos en tiempos extraños» en referencia a que un tribunal «regional» pueda «desafiar» en 60 días una investigación «exhaustiva» llevada a cabo por un Tribunal Supremo durante un periodo de más de 9 meses «con el más alto nivel de profesionalidad y sobre la base de pruebas legalmente demostrables».
El decano de los abogados madrileños, José María Alonso, calificó ayer de “impresentable” la decisión de la justicia alemana relativa a la extradición de Carles Puigdemont.
Para el decano, se trataba de un asunto tan sencillo como comparar si un determinado delito en un territorio de la Unión es delito en otro territorio de la Unión, por tanto la justicia alemana no tenía por qué haber entrado a analizar lo que el Tribunal Supremo, “la máxima autoridad judicial de este país”, había juzgado.
Respecto al acercamiento a Cataluña de los políticos presos, Alonso se mostró conforme. “Después de la muerte de un familiar cercano o de una enfermedad grave, la estancia en prisión es la peor situación que puede pasar un ser humano”, señaló Alonso. Por tanto, cuanto más llevadera sea esa situación cuanto más cerca de su familia y de sus abogados estén, mejor tanto para el derecho de defensa como para los derechos de la persona que está en prisión.
Por último, el decano se refirió a las comisiones mixtas de trabajo que se han creado con sus homólogos de Barcelona con el objetivo de tender puentes que contribuyan a solucionar la situación actual en Cataluña.