La ministra de Justicia, Pilar Llop, recogió ayer el XII Premio Gumersindo de Azcárate, que el Colegio de Registradores de la Propiedad, Mercantiles y Bienes Muebles de España y el Decanato Autonómico de los Registradores de Madrid concedieron al Ministerio de Justicia, en reconocimiento a su función «como pilar del Estado de derecho».
Llop dio las gracias a los registradores y, en especial, a su decana, María Emilia Adán, y a la decana autonómica de los Registradores de Madrid, María Belén Merino, por este galardón.
“Debemos preservar estos valores, que ya forman parte de nuestro sistema, y defenderlos de cualquier amenaza”, afirmó.
Llop subrayó en la idea de que “la Justicia es un pilar básico del Estado social y democrático de derecho” y subrayó “la necesidad de consolidar y defender nuestra democracia”.
La ministra destacó que su Ministerio está “trabajando para que nuestra Justicia avance y evolucione al mismo tiempo que lo hace la sociedad española”.
Se refirió a las tres piezas clave en las que se basa su Ministerio: la Ley de Eficiencia Organizativa, la Ley de Eficiencia Procesal y la Ley de Eficiencia Digital.
También hizo enumeró algunas de las medidas que contemplan estas leyes para aumentar la eficiencia y celeridad en la tramitación de procedimientos judiciales, como la incorporación de los medios adecuados de solución de controversias, o la regulación de la transformación digital.
La ministra estuvo acompañada en la entrega del premio por el secretario de Estado de Justicia, Tontxu Rodríguez; la subsecretaria de Justicia, Ana Sánchez; el secretario general para la Innovación y Calidad del Servicio Público de Justicia, Manuel Olmedo; y la directora general de Seguridad Jurídica y Fe Pública, Sofía Puente, entre otros.