CARA Y CRUZ en el caso Adou, el «niño de la maleta»
Mientras el pequeño Adou, el niño 8 años que fue introducido ilegalmente en una maleta, consigue la residencia temporal en España, su padre, Alí Ouattara, no ha corrido la misma suerte y, de momento, no logrará la libertad al desestimar una juez su petición.
Esta mañana la Delegación del Gobierno, la Secretaria General de Inmigración y Emigración del Ministerio de Empleo ha concedido una autorización individual por el plazo de un año de residencia temporal por circunstancias excepcionales para el pequeño Adou.
La concesión se ha producido como consecuencia de la aplicación del reglamento de la Ley Orgánica 4/2000 de 11 de enero sobre derechos y libertades de los extranjeros en España y su integración social.
Esta notificación oficial ha sido trasladada a la Oficina de Extranjería de Ceuta que, a su vez, ha enviado la misma al director del centro de acogida del Mediterráneo donde permanece el menor.
Esta autorización permitirá al niño reunirse con su madre, si bien esta situación no se producirá hasta que las pruebas de ADN que se han practicado tanto al padre como a la madre y que han sido remitidas a un laboratorio especializado en Madrid confirmen que se trata de sus progenitores.
Esta prueba de ADN fue pedida por el Ministerio Fiscal para descartar que se estuviera ante un posible caso de trata de menores.
NO HABRÁ LIBERTAD PARA EL PADRE
La titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Ceuta ha desestimado la petición de libertad de Alí Ouattara, el padre de Adou, en prisión provisional acusado de intentar ocultar al niño dentro de una maleta para cruzar la frontera del Tarajal.
La decisión judicial se ha producido al entender la juez que instruye el caso que las circunstancias «no han variado» desde el momento en que se acordó la prisión provisional de Alí Ouattara, según las fuentes.
La jueza estima que la prisión se acordó basándose en dos hechos, uno la posible existencia de un riesgo de fuga al contar con bienes patrimoniales en el extranjero y en segundo lugar la presunta responsabilidad en el «grave peligro» para la vida del menor y su integridad física, posible delito en el que se incurrió con el intento de que el niño cruzara la línea fronteriza con Marruecos.
Alí Ouattara permanece en prisión preventiva en la cárcel de Los Rosales de Ceuta desde que fue detenido el pasado 7 de mayo en el paso fronterizo y tras reconocer que era el padre del niño que una hora y media antes había sido interceptado en la misma frontera en una maleta.
Ouattara, así como la marroquí que portaba la maleta, está acusado de un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros, que supone penas de entre cuatro y ochos años de prisión.