La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, explicó ayer las líneas básicas de su política de vivienda.
Una de las principales necesidades planteadas es la ampliación del parque público de vivienda para poder alcanzar los estándares europeos de un 20-25% de vivienda pública sobre el total del parque residencial.
A su juicio el Real Decreto Ley aprobado por el Gobierno va en la buena dirección pero hay que dar más pasos
A este respecto, recordó que para trabajar en defensa del derecho a la vivienda es necesaria la implicación de todas las Administraciones públicas con el objeto de modificar la legislación vigente, especialmente la Ley del Suelo, y de aprobar una Ley de Vivienda Regional que permita a los Ayuntamientos impedir subidas desmedidas de los alquileres.
“Madrid es una de las cinco Comunidades Autónomas que no tiene Ley de Vivienda”, advirtió.
En este encuentro informativo, Carmena estuvo acompañada de la delegada de Equidad, Asuntos Sociales y Empleo y primera teniente de Alcalde, Marta Higueras, y del delegado de Desarrollo Urbano Sostenible, José Manuel Calvo, que presentaron diez líneas de actuación que ayudarán a garantizar el derecho a la vivienda en la ciudad de Madrid.
A este respecto recordó que gracias a la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU), hay un resquicio legal para que el Consistorio madrileño ayude a los inquilinos con problemas económicos en el pago de su alquiler.
Carmena destacó que su corporación había pagado 3.829.000 euros con los que se habrían evitado 8.000 desahucios. Y subrayó su papel de ayuda a los ciudadanos con problemas económicos.
La regidora madrileña se mostró partidaria de crear una oficina «para asesorar a todas aquellas personas que tuvieran el primer aviso de que podrían sufrir un desahucio«.
A su juicio esa medida sería «útil cuando en el Real Decreto Ley aprobado por el Gobierno se señala paralizar todos los lanzamientos cuando haya personas dentro vulnerables», destacó Carmena.
Sobre las medidas para impulsar la vivienda fue Marta Higueras, primera teniente alcalde quien las explicó con ayuda del delegado de urbanismo José Manuel Calvo:
Desde el Ayuntamiento se insiste en que es necesaria la adecuación de la construcción de la vivienda pública a las necesidades reales actuales que ahora es solo del 0,48 % del total y, en este sentido, el Ayuntamiento de Madrid destinará un 30% de la vivienda pública para familias jóvenes.
Al mismo tiempo se debe tener en cuenta la evolución de la composición de los hogares, en el que cada vez existe un mayor número de viviendas habitadas por 1 o 2 personas, a la hora de adaptar los parámetros de construcción para las nuevas viviendas y para la adaptación de las existentes.
Impulsar la modificación del marco legislativo estatal y autonómico, con el objetivo de fomentar el alquiler asequible y de calidad es necesario para establecer limitaciones a los precios de alquiler, a través del establecimiento de índices de referencia en los precios, en función de parámetros objetivos como la localización, dimensión, estado de conservación o acceso al transporte público.
Además, se considera necesario impulsar cambios legislativos a nivel autonómico y estatal, en aquellas materias relacionadas con suelo municipal: nueva Ley del Suelo, así como aprobar una Ley integral de Vivienda y un Planteamiento Regional.
Es necesario aumentar el parque de vivienda pública municipal, que actualmente se sitúa en un 0,48% del total, para alcanzar el 20-25% de vivienda pública sobre el total del parque como marcan los estándares europeos de referencia.
Para ello, entre otras medidas, se propone la transformación de suelo industrial en desuso para dar cabida a actividad económica vinculada a la innovación, la tecnología y la sostenibilidad, así como al alojamiento de nuevos vecinos. Gracias a esta transformación, el ayuntamiento obtendrá edificios de vivienda completos y listos para utilizar.
El Plan Especial de Implantación de Uso de Hospedaje puesto en marcha por el Ayuntamiento de Madrid, ha supuesto la protección del uso residencial de manera especial frente a la presión turística, pero también frente al aumento de locales de ocio y oficinas.
Con la aprobación definitiva de este plan, se busca contener los efectos adversos de la presión de los alojamientos turísticos, equilibrando los usos y evitando la monofuncionalidad y la pérdida del tejido de vivienda.
La rehabilitación del parque de viviendas existente en la ciudad de Madrid es una parte fundamental para la mejora de la calidad del mismo, atendiendo a criterios de accesibilidad y eficiencia energética, y de forma especial para reducir la desigualdad y promover el equilibrio territorial.
En este sentido el Ayuntamiento de Madrid ha desarrollado el Plan Madrid Recupera (Plan MAD-RE,) que durante los años 2016, 2017 y 2018, ha recibido solicitudes de un total de 63.687 familias de la ciudad de Madrid con una inversión, por parte del ayuntamiento, de 123,7 millones de euros para ello.
Para poder dar respuesta de forma inmediata a las crisis habitacionales que numerosas familias han venido sufriendo durante los últimos años, se ha impulsado un sistema de alojamiento colectivo y temporal, destinado a personas con emergencia social y una necesidad urgente de una solución habitacional.
Para ello se han buscado todas las posibilidades para adquirir viviendas destinadas a un parque municipal diferenciado dedicado exclusivamente a atender este problema. En estos casos, se incorpora el acompañamiento social, formación e inserción laboral para favorecer la transición a una vivienda permanente.
El ayuntamiento tiene la capacidad de intervenir en el mercado inmobiliario de forma significativa. Para ello, se articulan medidas concretas como la compra directa de inmuebles, establecer bonificaciones fiscales para favorecer que las viviendas vacías salgan al mercado, o incentivar que se edifiquen los solares vacantes destinados a vivienda.
Con el objetivo de incrementar al máximo el suelo de titularidad municipal, se promoverá que todas las cesiones que reciba el Ayuntamiento de Madrid se efectúen en forma de suelo, en lugar de monetizarlas, especialmente aquellas procedentes de los nuevos planeamientos como Madrid Nuevo Norte, Campamento o Berrocales.
Se cuenta con la participación del sector privado, por ejemplo, mediante la adjudicación de suelo para la construcción directa de vivienda por cooperativas u otras entidades, en un régimen de cesión de uso, en el que el Ayuntamiento mantiene la titularidad del suelo.
Calvo recordó que la capacidad del Ayuntamiento era de crear entre 800 y 1000 viviendas pero no sería suficiente. De manera adicional, se pretende que las viviendas se adecúen al nivel de renta y se incorpora la gestión y promoción de parte del parque de viviendas a agentes de la economía social.
Las medidas de acción también recogen la cesión de uso de viviendas con carencias por parte de particulares a cambio de la rehabilitación de las mismas.
Se promueven acuerdos con entidades públicas y privadas, incluso con pequeños propietarios, que entre otras medidas, regulan que el Ayuntamiento pueda gestionar y dedicar al alquiler viviendas ajenas, durante un tiempo determinado.