Uno de los pilares fundamentales del movimiento "woke" es la idea de que las desigualdades no son meros accidentes ni se limitan a actos individuales de discriminación, sino que están profundamente arraigadas en estructuras sociales, económicas y políticas. Ilustración: Confilegal.
Qué es y en qué consiste la «Agenda Woke»
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08/9/2024 00:45
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Actualizado: 08/9/2024 02:00
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En los últimos años, el término «woke» ha irrumpido con fuerza en los debates políticos, sociales y culturales, sobre todo en los países occidentales.
La «Agenda Woke» hace referencia a un conjunto de ideas y propuestas centradas en la justicia social, la igualdad de género, los derechos LGBTQ+, la equidad racial y la protección medioambiental.
Aunque su origen está en los movimientos antirracistas en Estados Unidos, este concepto ha evolucionado y se ha expandido por el mundo, encontrando eco en partidos y movimientos progresistas en España y otros países europeos.
Origen del término «woke»
La palabra «woke» proviene del inglés coloquial y significa «despierto» o «consciente». Se deriva de la expresión inglesa vernácula afroamericana «stay awake«. En las décadas de 1960 y 1970 se utilizaba para referirse a la necesidad de estar alerta frente al racismo y la opresión.
El primer uso moderno del término aparece en la canción «Master Teacher» del álbum New Amerykah Part One (4ª Guerra Mundial) (2008) del cantante de soul Erykah Badu.
En la canción, Badu canta la frase: «Me quedo despierta» (I stay woke). Aunque la frase todavía no tenía ninguna conexión con los temas de justicia, se le atribuye a la canción de Badu la conexión posterior con estos temas.
Este término resurgió con fuerza en la década de 2010, especialmente con el movimiento Black Lives Matter (BLM), que surgió como respuesta a la violencia policial contra la población negra en Estados Unidos.
Con el tiempo, el concepto de estar «woke» ha trascendido el ámbito racial, y ahora incluye una conciencia más amplia sobre las diversas formas de opresión e injusticia.
En este sentido, la «Agenda Woke» ya no se refiere únicamente a la lucha contra el racismo, sino también a cuestiones de género, derechos LGBTQ+, cambio climático y desigualdades económicas. Es un concepto integral que defiende una mayor equidad en todos los ámbitos de la vida.
Sus principios fundamentales
Uno de los pilares fundamentales del movimiento «woke» es la idea de que las desigualdades no son meros accidentes ni se limitan a actos individuales de discriminación, sino que están profundamente arraigadas en estructuras sociales, económicas y políticas.
Estas estructuras perpetúan la opresión de ciertos grupos a lo largo del tiempo.
El racismo, el sexismo, la homofobia y la transfobia, por ejemplo, no son solo problemas de actitudes individuales, sino que están institucionalizados en leyes, políticas y prácticas sociales que marginan a ciertos colectivos.
Aunque no existe un único manifiesto que defina la «Agenda Woke», sus pilares centrales son claros y se centran en cinco ejes:
Igualdad de género
El feminismo ha sido uno de los principales aliados de la «Agenda Woke», defendiendo la igualdad entre hombres y mujeres en todas las esferas de la vida, la lucha por los derechos de las mujeres y las personas no binarias, buscando la equidad en todos los ámbitos, desde el laboral hasta el reproductivo hasta la eliminación de la violencia de género y la equidad laboral.
En España, movimientos como el 8M han desempeñado un papel crucial en este sentido.
Derechos LGBTQ+
La defensa de los derechos de las personas LGBTQ+ es otra pieza fundamental. En este ámbito, se busca garantizar la igualdad legal y social de las personas trans, bisexuales, lesbianas y gays, así como erradicar la discriminación en todos sus aspectos.
Personalidades como el desaparecido militante del PSOE, Pedro Zerolo, uno de los primeros políticos españoles en abogar por los derechos LGBTQ+, son ejemplos del impacto que estas ideas han tenido en el progresismo español.
Cambio climático
La «Agenda Woke» también aboga por una acción urgente frente al cambio climático. Grupos como Extinction Rebellion y figuras como Greta Thunberg han impulsado un discurso que exige a los gobiernos medidas drásticas para frenar el deterioro ambiental y garantizar la sostenibilidad.
La crisis climática es vista, desde la perspectiva «woke», como una cuestión de justicia social.
El movimiento argumenta que el cambio climático afecta de manera desproporcionada a las comunidades más vulnerables, como los países en desarrollo y los grupos empobrecidos, que suelen tener menos responsabilidad en la crisis pero sufren sus efectos más graves.
Los activistas «woke» abogan por políticas sostenibles y equitativas que prioricen tanto la preservación del medio ambiente como la justicia para las comunidades afectadas.
Justicia racial
El antirracismo es uno de los núcleos de esta agenda. Movimientos como Black Lives Matter han visibilizado la discriminación racial estructural que persiste en muchas sociedades occidentales.
Aunque comenzó en Estados Unidos, su impacto se ha extendido a otros países, incluyendo España, donde se ha denunciado la discriminación hacia comunidades migrantes y minorías étnicas.
Equidad económica
La redistribución de la riqueza y la lucha contra las desigualdades económicas son otros puntos clave. Se busca un sistema más equitativo donde los recursos sean distribuidos de manera más justa, y donde los más desfavorecidos no sean relegados.
En España, esta lucha ha sido parte de los programas políticos de partidos como Podemos y Más País, liderado por Íñigo Errejón, quien antes fue uno de los líderes de Podemos.
Movimientos y partidos vinculados a la «Agenda Woke»
En Europa, y específicamente en España, la «Agenda Woke» ha sido adoptada por varios partidos y movimientos de izquierda y centroizquierda.
El progresismo español ha integrado muchas de estas propuestas, siendo los principales defensores partidos como Podemos y Más País.
Estos partidos han abogado por políticas feministas, la protección del medio ambiente, la igualdad LGBTQ+ y la justicia social en sus programas.
También se observa una fuerte influencia «woke» en el PSOE, que, aunque más moderado, ha impulsado leyes como la Ley de Igualdad y la Ley de Memoria Democrática.
En el ámbito internacional, partidos como el Partido Verde en Alemania o el Partido Laborista en Reino Unido, especialmente bajo el anterior liderazgo de Jeremy Corbyn, también han integrado la «Agenda woke» en sus plataformas.
En Estados Unidos, el ala más progresista del Partido Demócrata, representada por figuras como Alexandria Ocasio-Cortez y Bernie Sanders, ha promovido estas ideas, buscando reformas radicales para combatir las desigualdades estructurales en su país.
Personalidades destacadas del movimiento woke
A nivel global, figuras como Greta Thunberg (activista climática), Patrisse Cullors (cofundadora de Black Lives Matter) y Alexandria Ocasio-Cortez (congresista estadounidense) son ejemplos claros de cómo la «Agenda Woke» ha sido llevada al escenario público y político.
En España, personalidades como la exministra de Igualdad por Podemos (ahora eurodiputada), Irene Montero, o Ada Colau, alcaldesa de Barcelona, han sido voces prominentes en la defensa de los principios «woke», desde el feminismo hasta la lucha contra la desigualdad.
Críticas y oposición
La «Agenda Woke» no está exenta de críticas. En muchos casos, se acusa a sus defensores de promover una «corrección política» excesiva que restringe la libertad de expresión.
Los sectores conservadores critican que, en nombre de la justicia social, se estén imponiendo normas culturales que dividen a la sociedad.
En España, figuras como Santiago Abascal, líder de Vox, y el propio partido han sido muy críticos con lo que llaman la «dictadura woke», que según ellos busca imponer una agenda ideológica en todos los ámbitos, desde la educación hasta la cultura.
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