Joaquín Castiella, CEO de Lexa Go: «Nuestra IA laboralista resuelve el 80% de las consultas con un 98% de acierto»
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12/9/2024 05:35
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Actualizado: 12/9/2024 10:15
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El Grupo Lexa fue uno de los pioneros en España en poner en marcha un portal «online» de consultas en materia laboral que da servicio a asesorías de toda España.
Durante sus 20 años de vida, desde Pamplona, donde tiene su sede, han ido acumulando una información y una experiencia que ahora ha visto la luz transformada en algo muy nuevo: Lexa Go, una inteligencia artificial generativa especializada en la jurisdicción laboral y en recursos humanos.
Joaquín Castiella Sánchez-Ostiz, CEO de Grupo Lexa, explica en esta entrevista cómo opera esta nueva IA, que será presentada en sociedad el próximo 17 de septiembre, y qué innovadores servicios presta.
¿En qué consiste Lexa Go, esta Inteligencia Artificial que han desarrollado específicamente para el ámbito laboral? ¿Cómo surgió la idea?
Lexa Go nace de nuestra experiencia como despacho de abogados especializado en derecho laboral. Llevamos más de 20 años en Pamplona, y con el tiempo fuimos desarrollando soluciones tecnológicas para mejorar nuestros servicios.
Actualmente somos un equipo de 26 personas, entre abogados laboralistas y graduados sociales, y ya desde los inicios del despacho vimos la necesidad de crear una herramienta que nos permitiera dar respuesta rápida y eficaz a las consultas diarias de nuestros clientes.
Lo que hicimos fue crear un portal «online» donde asesorías de toda España pudieran consultarnos dudas sobre cuestiones laborales, como permisos, calendarios, excedencias, y todo tipo de situaciones del día a día que surgen en el ámbito laboral.
Esas consultas se fueron acumulando y, con el tiempo, llegamos a tener una base de datos con más de 15.000 preguntas y respuestas. Nos dimos cuenta de que muchas consultas se repetían, y empezamos a contestar preguntas de hoy con respuestas que ya habíamos dado en el pasado.
Eso nos llevó a pensar: ¿Y si pudiéramos automatizar este proceso?
Hace unos cinco años decidimos dar el salto a la Inteligencia Artificial y nos asociamos con la Universidad Politécnica de Valencia y el Instituto Tecnológico Informático para crear un primer modelo de IA.
Aunque ese modelo ha quedado un poco desfasado, nos sirvió como base para lo que es hoy Lexa Go, una IA generativa mucho más avanzada que hemos desarrollado en esta segunda fase. Es una solución diseñada específicamente para resolver consultas laborales de manera rápida y precisa.
¿En qué consiste exactamente este modelo de inteligencia artificial generativa que mencionas?
Es un producto muy chulo. Lexa Go es un modelo de inteligencia artificial que nosotros llamamos colmenar. Lo hemos desarrollado a partir de módulos de información muy específicos.
A diferencia de otras IAs como ChatGPT, que obtienen su información de todo Internet, nuestra IA solo consulta nuestra propia base de datos, que hemos creado cuidadosamente a lo largo de los años a partir de las consultas reales que hemos recibido.
Imagine que un usuario pregunta, por ejemplo, por un permiso de hospitalización. La IA va directamente al módulo correspondiente, que hemos desarrollado basándonos en las consultas previas, y encuentra la respuesta. Lo interesante es que hemos diseccionado el derecho laboral en grupos de consultas prácticas.
No vamos a la teoría, sino a la práctica, porque es ahí donde realmente está el valor. Al final, lo que hicimos fue organizar esas 15.000 consultas en diferentes módulos de grupos de consultas, como excedencias, permisos, calendarios, etc., para que la IA pudiera responder de manera mucho más eficiente.
El resultado es impresionante. Ahora mismo, de cada diez consultas que recibimos, la IA responde el 80% con una precisión del 98%.
En el 20% restante excede el alcance. Es decir, son consultas más complejas que la IA no puede resolver por sí sola y que requieren la intervención de un abogado.
Nuestra IA contesta bien. No hace como ChatGPT que se inventa las respuestas o que te da diferentes contestaciones según si es la mañana o la tarde. Nuestra IA es segura y cerrada.
Entonces, ¿cómo se compara su IA con otras como la de Lefebvre o VLX, que también tienen IAs cerradas?
Sí, hay otras IAs cerradas en el mercado, pero creo que la principal diferencia radica en la forma en que hemos estructurado nuestra base de datos y el enfoque que le hemos dado a la IA.
Nuestra IA es diferente porque ha sido creada específicamente para trabajar con módulos de información estructurados. No es una base de datos gigantesca en la que la IA navega sin rumbo, sino una estructura pensada para ofrecer respuestas precisas y consistentes.
Hemos desarrollado una base de datos modular que permite a la IA ofrecer una respuesta clara, basada en la práctica y no en la teoría, lo que hace que sea mucho más eficiente y útil para nuestros clientes.
¿Cuánto tiempo llevan trabajando en este proyecto?
Llevamos cinco años trabajando en este proyecto. Durante los tres primeros años nos dedicamos a construir la base de datos modular que mencioné antes. Sabíamos que la inteligencia artificial iba a ser clave en el futuro, así que quisimos estar preparados para cuando llegara la tecnología adecuada.
Hace dos años, cuando OpenAI lanzó su modelo de IA generativa, ya teníamos gran parte del trabajo hecho, lo que nos permitió adaptarnos rápidamente.
Al principio, cuando llegó la IA generativa de OpenAI, nos asustamos un poco. Pensamos que podría desestabilizar nuestro modelo, pero en realidad fue todo lo contrario.
Lo que hemos visto es que, aunque ChatGPT es una herramienta impresionante, tiene muchas limitaciones en el ámbito jurídico, porque tiende a generar respuestas que no siempre son fiables o precisas.
En nuestro caso, gracias a los cinco años de trabajo que llevamos, hemos conseguido que nuestra IA sea mucho más segura y precisa. Cuando no sabe la respuesta, lo reconoce y deriva la consulta a un abogado, algo que ChatGPT no hace.
¿Ha mencionado que son 26 personas? ¿Qué perfiles forman parte del equipo?
Sí, somos 26 personas, y tenemos un equipo muy diverso. La mayoría somos abogados laboralistas, porque al final nuestro foco está en el derecho laboral, pero también contamos con ingenieros informáticos que están especializados en Inteligencia Artificial y bases de datos.
La tecnología es una parte clave de nuestro proyecto, así que necesitábamos un equipo técnico fuerte para poder desarrollar Lexa Go. A medida que el proyecto ha crecido, también hemos incorporado perfiles más especializados en tecnología para asegurarnos de que la IA funciona de manera óptima.
Próximamente, el 17 de septiembre, van a presentar a Lexa Go en sociedad después de una fase beta que duró casi tres meses.
Los resultados que hemos obtenido han sido muy buenos, de ahí nuestra decisión de salir al mercado.
Hemos afinado algunos detalles, sobre todo en lo que respecta a la usabilidad y la experiencia del cliente, para asegurarnos de que todo funciona perfectamente.
Nos tomamos muy en serio el «feedback» de nuestros clientes y hemos aprovechando esa fase beta para ajustar todos los detalles necesarios. Nos hemos asegurado que el servicio sea lo más intuitivo posible, y que la transición entre la respuesta de la IA y la intervención humana sea completamente fluida.
Al final, la clave es que nuestros clientes se sientan seguros utilizando Lexa Go, sabiendo que, si la IA no puede resolver una consulta, un abogado lo hará en cuestión de horas.
Cuando habla de un modelo híbrido, ¿a qué se refieres exactamente?
El modelo híbrido significa que combinamos lo mejor de ambos mundos: la eficiencia de la inteligencia artificial y la experiencia de nuestros abogados. La IA es fantástica para responder a consultas recurrentes y sencillas, pero hay casos más complejos que necesitan la intervención de un profesional.
Nuestro compromiso es responder todas las consultas en un máximo de 12 horas. Si la IA no tiene la respuesta, un abogado de nuestro equipo interviene para dar una solución rápida y eficaz.
Creemos que este enfoque es el ideal, porque permite a las asesorías y empresas ahorrar tiempo en consultas rutinarias sin perder el valor añadido de contar con el respaldo de un abogado cuando es necesario.
La IA es una herramienta que facilita el trabajo, pero no puede ni debe sustituir completamente el juicio y la experiencia humana, especialmente en cuestiones legales complejas.
¿Quiénes son sus principales clientes?
Nuestro mercado principal son las asesorías, que representan aproximadamente el 70% de nuestra clientela. Son asesorías pequeñas, de 4 o 5 personas, que tienen un volumen considerable de clientes y necesitan resolver dudas legales rápidamente para poder centrarse en otras tareas.
También trabajamos con empresas que gestionan internamente sus nóminas y que tienen departamentos de recursos humanos más estructurados.
El tipo de consultas que resuelven no suelen ser complejas, pero les quitan tiempo. Por ejemplo, si un trabajador solicita una prórroga de su excedencia, o si hay que revisar una sentencia específica, son cuestiones que no aportan mucho valor al día a día de la asesoría, pero que sí requieren atención. Ahí es donde entra Lexa Go, ayudando a ahorrar tiempo y recursos.
Aunque están en Pamplona, ¿tienen clientes en otras ciudades de España?
Sí, la mayoría de nuestros clientes están en Madrid y Barcelona. A medida que nuestro servicio ha crecido, hemos ido ganando clientes en toda España. Hoy tenemos unos 350 clientes.
También trabajamos con grupos de asesorías que gestionan consultas para otras muchas asesorías, lo que ha hecho que nuestra expansión sea bastante rápida.
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