Uno de los grandes retos pendientes es la expansión internacional.
2017 será un año de retos para la abogacía de los negocios
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01/1/2017 05:58
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Actualizado: 02/1/2017 10:58
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El año que hoy arrancamos traerá muchos alicientes a la abogacía de los negocios que han visto como en 2016 mejoraban sus resultados. La recuperación de sectores como real estate o inmobiliario y el arranque de la actividad fintech en el sector bancario auguran un 2017 más consolidado.
Por otro lado, vuelven las operaciones corporativas de M&A, tras la incertidumbre generada por la falta de Gobierno estable, ahora solventada. Se esperan para el año que viene nuevas salidas a bolsa y otras fusiones y adquisiciones porque el denominador común en todos los sectores es la concentración de firmas.
La venta de Quirón Salud, el grupo hospitalario más importante de España, a la compañía alemana Fresenius Helios por 5.760 millones de euros se ha convertido en la mayor transacción realizada en España este año y una de las más grandes en M&A (fusiones y adquisiciones por sus siglas en inglés) y «private equity» en Europa.
En esta operación el despacho internacional DLA Piper ha asesorado a CVC Capital Partners, uno de los mayores fondos de private equity, en la venta de Quirón, que fue asesorado por Garrigues a Fresenius Helios, el mayor grupo sanitario europeo, fundado en el año 1912. Operaciones de este tipo y algo más pequeñas serán habituales en la actividad de los despachos a lo largo de este próximo año.
Los despachos celebran sus onomásticas en plena madurez
2016 fue el año de los aniversarios; de la consolidación de nuestra abogacía como referente a nivel mundial. Firmas de primer nivel como Garrigues que cumplió setenta y cinco años; Uría Menéndez, otros setenta y Cuatrecasas a punto de conmemorar en el 2017 los cien, siguen marcando la pauta.
Frente a ellas otras firmas que celebraron su onomástica, Roca Junyent recordó su veinte aniversario de un despacho que se creó casi a la vez entre Barcelona y Madrid, el bufete Broseta conmemoró su cuarenta cumpleaños con un cambio de dirección en la firma donde Rosa Vidal relevaba a Luis Trigo en la cabeza de la firma.
Por su parte, Olleros Abogados sigue creciendo y a sus treinta años que festejó este 2016 Jaime Olleros nos contaba el crecimiento de la firma y su apuesta por Madrid como eje de su despacho. En estos momentos estudia su integración como firma ibérica de la mano de su socio portugúes Nobre Guedes.
Este mismo 2016 Ashurst en España celebraba su quince aniversario consolidándose como despacho en nuestro país bajo la nueva dirección de María José Menéndez relevo de Gonzalo Jiménez Blanco, uno de los artífices de la expansión de la firma y que por problemas de salud ha tenido que dejar esta responsabilidad.
Junto a la abogacía tradicional, las auditoras han apostado este año fuerte por la abogacía.
Es el caso de EY Abogados, cuya política de fichajes ha logrado atraer a grandes abogados de bufetes punteros, Deloitte Abogados que cambió de imagen corporativa a Deloitte Legal.
Por su parte, KPMG Abogados que creó una bicefalia en su cúpula directiva, como tienen la mayor parte de los despachos de abogados actuales mientras que Pwc también tuvo crecimiento importante en esta pata legal.
Junto a ellas, en otra dimensión firmas como BDO, Grant Thornton, que cambió de presidente a final de año, y Auren ha buscado en la práctica legal un refuerzo a su trabajo en la auditoría.
A los despachos de abogados tradicionales, sin lugar a dudas, les ha salido un competidor importante que aprovechando su red internacional puede dar el mismo servicio legal que cualquier bufete internacional. Seguiremos en el 2017 viendo movimientos de profesionales hacia esta parte del sector interesantes.
Iberoamérica, escenario para crecer
Otro de los contextos clave para las firmas de abogados fue en el 2016 su expansión internacional que seguirá consolidándose en este nuevo año.
A este respecto, la mayor parte de los bufetes de abogados han elegido Iberoamérica como eje de sus actividades y Colombia, un país ahora más estable tras el alto el fuego entre la guerrilla y el Gobierno como eje de operaciones en este continente iberoamericano como explicamos en el reportaje que publicamos tras el verano.
¿Hay mercado para todos?
Eso solo el tiempo lo dirá.
Frente a las grandes firmas que buscan posicionamiento más estables, a través de oficinas propias como el caso de Garrigues y participando y creando una firma regional en la zona como es el caso de Uría Menéndez, el resto de los bufetes han buscado una estrategia de internacionalización adecuada a sus intereses.
Curiosamente una firma como ONTIER que ha optado por un modelo híbrido de participación del despacho matriz en sociedades locales es el despacho español con mayor presencia en Iberoamérica.
Hace casi un mes, Adolfo Suárez Illana, su presidente ejecutivo, nos explicaba las claves del éxito de este despacho que en cuatro años ha superado todas las expectativas.
Salir fuera de un país supone planificación, recursos económicos y humanos y la mayor parte de las veces socios locales que te ayuden a posicionarte. Junto con las firmas españolas otras de carácter internacional como Baker & Mckenzie, DLA Piper o Dentons apuestan por una mayor presencia en esa zona de Iberoamérica.
En muchos de esos casos se trata de fusionarse con despachos locales para desde ahí atraer negocio y clientes.
Iberoamérica se ha convertido en uno de los escenarios internacionales de los despachos de abogados; firmas españolas, anglosajonas y locales luchan por posicionarse al otro lado del Atlántico aunque es pronto saber si habrá negocio para todos
Tiempos de cambio en la abogacía
En este 2017 los despachos de abogados tendrán que seguir adaptándose a los retos de la globalización, en un entorno en el que no hay fronteras y el cliente manda más que nunca. La irrupción de las nuevas generaciones llamadas millenials y la irrupción de la inteligencia artificial puede modificar muchas cosas en las firmas legales.
Al igual que nos comentaba Juan Picón, co-presidente mundial de DLA PIPER, a principios del mes de junio goo.gl/kWzHWx la profesión de abogados vive sujeta a grandes cambios. La llegada de la tecnología está mejorando la gestión de los bufetes y eliminando diferencias entre grandes y pequeñas firmas pero el reto está en la inteligencia artificial.
Despachos como Dentons con su alianza con IBM y la creación de Ross Inteligencia y Allen & Overy con la puesta en marcha de Margin Matriz tras su acuerdo con Deloitte para crear una herramienta que ayude a gestionar los miles de contratos de la banca, son solo la punta de iceberg que amenaza con llegar.
El debate quedará abierto sobre cuál será el trabajo futuro de los despachos si se implementan esas soluciones tan específicas. En un contexto en el que las empresas tienen más cultura jurídica y buscan al despacho de abogado más competitivo, en esa relación precio-servicio, es bastante posible que a medio plazo determinadas cuestiones como revisión de contratos o due dilligences de poco trámite algunas, lo hagan estas aplicaciones y el abogado se centre en cuestiones más de valor añadido.
Quiero tener mi vida propia
El lado positivo de la tecnología radica en lograr que los despachos, empresas de servicios jurídicos, sean más eficientes y ahorren tiempo y costes para otras cuestiones de más nivel. En este entorno de cambio la propia profesión de abogado aparece amenazada en su esencia de disponibilidad total.
Despachos como Cuatrecasas, en su sede de Barcelona y EY Abogados en Madrid no solo han hecho un cambio de oficinas aparente, sino que han arrancado una forma diferente de ver la profesión. Espacios compartidos, sin separaciones donde todo el mundo habla con todo el mundo, pretenden romper la visión jerarquizada de una profesión dura y vocacional obsesionada por satisfacer al cliente.
La llegada de las nuevas generaciones a los despachos, millenials, nativos digitales, con otras inquietudes profesionales y personales puede ser el elemento que sirva de cambio en la abogacía de los negocios a medio plazo. Son profesionales que tienen otros valores, ven el compromiso con el despacho de otra manera y curiosamente su objetivo prioritario no es ser socio del despacho en cuestión, sino tener una carrera profesional coherente con su forma de ver la vida.
En un reportaje que publicamos hace apenas dos semanas y que tuvo un gran tirón mediático goo.gl/mKMu04 detectamos como los propios despachos están haciendo lo posible porque el abogado olvide esas jornadas maratonianas de trabajo de antaño y pueda hacer su vida como cualquier profesional. Men sana in corpore sano, como decía aquel refrán. Tener un buen trabajo y lo que es más importante, un profesional equilibrado, que sabe lo que tiene entre manos es fundamental y no parece sencillo en una sociedad que cambia a nivel de vértigo.
La hora del especialista
A la hora de cerrar este rápido resumen del año en curso y señalar las previsiones para el 2017 no podríamos dejar de olvidarnos de los emprendedores jurídicos. Frente a las estructuras consolidadas, muchas de ellas citadas en esta crónica de urgencia, ha aparecido con fuerza los despachos muy profesionalizados y especializados. Son estructuras pequeñas, centradas en prácticas muy concretas pero tan viables como los bufetes antes mencionados.
La presión en los despachos hacia los socios, donde todos los años pasan un examen en cada firma legal sobre su rentabilidad como profesionales y la dificultad en algunos despachos de llegar a esa condición, ha generado en los últimos cinco años en la abogacía de los negocios este movimiento de expertos que han preferido encabezar un proyecto personal propio que seguir en una situación poco conforme.
Especialidades como el derecho deportivo; la gestión de los ayuntamientos públicos; la privacidad y la protección de datos, el derecho aeronáutico o el arbitraje han sido algunos de los nichos de mercado que estas pequeñas estructuras, calificadas por algunos expertos como boutiques legales, han aflorado al mercado nacional. Sus claves del éxito: tener profesionales seniors muy cualificados y mucha empatía con determinadas empresas, clientes que les siguen en su nuevo reto profesional.
Otra forma de hacer abogacía
Junto a ellos, firmas emergentes que entienden la abogacía de otra forma. Es el caso de Arriaga Asociados o Legálitas que han demostrado que sus modelos de negocio son igual de rentables que los tradicionales si se tiene una estrategia clara definida.
El apoyo publicitario y su especialización en nichos como reclamaciones de hipotecas y demás productos complejos que ha colocado la banca han generado una serie de competidores que han intentado seguir su estela con éxito desigual.
Nadie duda que el derecho de consumo volverá con fuerza a los despachos siguiendo las cláusulas suelo y otras situaciones donde se requiera un asesoramiento jurídico claro. El consumidor ya no se cruza de brazos, reclama y puede ser otro nicho de mercado para muchos despachos que puedan dar este servicio.
2017 será un año intenso para la abogacía de los negocios. En un mercado con tantas firmas legales asistiremos a más integraciones entre los despachos de abogados lo que hará el sector más competitivo. También, como ha pasado en este año que hemos dejado atrás, el talento buscará su mejor acomodo y los despachos combinarán los fichajes de relieve con la promoción profesional interna.
Junto a los pleitos de empresa de toda la vida, los despachos ven como emerge el derecho del consumidor en múltiples cuestiones relacionadas con su vida. Otro nicho de mercado a tener en cuenta
Los abogados estarán pendientes del legislador y esperan menos y mejores leyes para poder ofrecer a sus clientes la seguridad jurídica que éstos buscan en su actividad empresarial. Desde CONFILEGAL les seguiremos contando la actividad de los despachos y cómo se adaptan a estas nuevas situaciones. FELIZ 2017.
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