El Juzgado Contencioso Administrativo 7 de Barcelona ha condenado a la UAB por vulnerar derechos fundamentales de los estudiantes de ‘Jóvenes de Societat Civil Catalana’, al excluir a esta agrupación del directorio de colectivos del centro.
La Autónoma de Barcelona, condenada por vulnerar 4 derechos fundamentales de estudiantes no independentistas
LA PLATAFORMA 'JÓVENES DE SOCIETAT CIVIL CATALANA' RELATA EL 'CALVARIO' QUE SUFRE EN ESE CENTRO
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25/7/2018 13:12
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Actualizado: 25/7/2018 13:40
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En mayo de 2015, un grupo de universitarios catalanes dio un paso al frente para dejar claro que muchos jóvenes no están por la independencia. Fundaron la plataforma de ‘Jóvenes de Societat Civil Catalana’ “para dar voz a los catalanes que no se sienten nacionalistas”.
Forman un grupo robusto presente en todas las provincias catalanas y en varios campus universitarios, la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), la Universidad de Barcelona (UA), la Pompeu Fabra (UPF), y la Politécnica de Cataluña (UPC).
En la Universidad Autónoma de Barcelona un grupo de radicales nacionalistas los tiene en el punto de mira, según informa la plataforma. “En ocasiones nos insultan, nos escupen y nos dan codazos. Ese es el precio por defender a España en la universidad”, relata a Confilegal Josep Lago, coordinador de Jóvenes de SCC, y estudiante de ese centro.
Además, esta plataforma denuncia que se sienten “desamparados por la pasividad de la rectoría de la universidad”. Lago explica que “muchos alumnos” padecen esta situación, pero “desde la Autónoma no se toman medidas, sino al contrario”. Denuncia que hay “un colectivo creado en exclusiva para expulsarlos del campus”, al que el centro les cede material y mesas para que hagan estas actividades contra ellos.
‘CENSURA CLAMOROSAMENTE ILEGAL’
El Juzgado Contencioso Administrativo 7 de Barcelona, del que es titular Mª Isabel López Montañez, acaba de condenar a la Universidad Autónoma de Barcelona por vulnerar 4 derechos fundamentales de los estudiantes de ‘Jóvenes de Societat Civil Catalana’, al excluir a esta agrupación del directorio de colectivos del centro.
En concreto, el de no discriminación por razón de opinión (artículo 14), libertad ideológica (artículo 16), libertad de expresión (artículo 20.1.a) y el derecho a la educación (artículo 27).
La sentencia, a la que ha tenido acceso Confilegal, condena a la universidad al pago de las costas procesales, hasta un máximo de 600 euros, y la obliga a inscribir a esta agrupación en el directorio de colectivos del Campus de Bellaterra, ratificando la medida cautelar adoptada por el mismo Juzgado el pasado abril.
La UAB aseguró que esta plataforma juvenil no cumplía los requisitos establecidos por la normativa. Alegó que le faltaba “el requisito de respeto institucional al centro por comentarios en contra vertidos en redes sociales”.
La sentencia reproduce la postura de la Fiscalía, según la cual «resulta imposible no vincular la expulsión del directorio con el posicionamiento de Joves SCC-UAB contra las tesis independentistas y la actitud contemporizadora del consejo de gobierno de la Universidad con ellas».
El tribunal añade que, según la Fiscalía, la pretensión del rectorado de la UAB de condicionar la inclusión del colectivo en el directorio a que los estudiantes de esta entidad rectificaran su política de comunicación debía ser calificada como «censura clamorosamente ilegal» al buscar en realidad que rectificaran “opiniones y manifiestos incómodos para el equipo de gobierno de la universidad”.
‘PERSECUCIÓN IDEOLÓGICA’
Desde Jóvenes de Societat Civil destacan que esta condena «evidencia la persecución ideológica que sufren los estudiantes constitucionalistas en la universidad catalana».
«Viene a ratificar los graves déficits democráticos que existen en Cataluña y que se traducen en continuas vulneraciones de los derechos fundamentales de los ciudadanos constitucionalistas que alzan la voz contra los abusos de los nacionalistas en las instituciones y en el espacio público», explica Josep Lago.
Josep Lago, coordinador de Jóvenes de Societat Civil, está en sexto del doble grado de ADE y Derecho.
La plataforma exige que se acabe con «el clima de intimidación» que sufren por expresar sus ideas en el campus, y reclama al equipo de gobierno de la universidad y a las instituciones en general que “defiendan y garanticen con firmeza la libertad de expresión y el pluralismo ideológico”.
“Es incompatible con los principios democráticos abstenerse o colaborar con grupos movidos por el odio a lo español que tratan de expulsar a los colectivos constitucionalistas de las universidades”, denuncia Lago.
No es la primera vez que acuden a la Justicia. También denuncio ante la Fiscalía «las agresiones que sufrieron miembros de esta entidad en una carpa en la UAB, en la que radicales destrozaron el expositor y quemaron una bandera española». Según explica el coordinador de la plataforma, “el fiscal Miguel Ángel Aguilar ha imputado ya a 12 antifascistas por coacciones, aunque ellos dicen que es por rajar una bandera”.
12 estudiants imputats per lluitar contra el feixisme. @UABBarcelona voleu uns altres @Som27iMes ??#CaçaDeBrúixes pic.twitter.com/KsEQjxhcde
— Antifeixistes UAB (@UABantifa) 21 de julio de 2017
‘LOS RADICALES QUIEREN CALLARNOS PARA QUE PAREZCA QUE LOS ALUMNOS SOMOS SEPARATISTAS’
Relata que los radicales se organizan bajo las siglas SEPC, que es el sindicato de estudiantes de los denominados ‘países catalanes’. “Es un entramado muy grande y se van poniendo diferentes caretas. En ocasiones utilizan otros nombres, como Plataforma Antifascista, que es «el grupo que crearon con el objetivo de expulsarnos de la UAB; o Autónoma Rebel, que es el movimiento que cuando hay huelga corta las carreteras”, explica.
El nacionalismo se cree el centro del mundo: 15 personas cortando autopistas e impidiendo la normal circulación a la gente que se levanta pronto para ir a trabajar. pic.twitter.com/VicHk6Efb4
— Josep Lago (@JosepLago) 7 de noviembre de 2017
Cuenta que la autodenominada Plataforma Antifascista “es un grupo de extrema izquierda, nacionalista, compuesto por unos 150” individuos, que “busca crear un clima de hostilidad”. “El objetivo es que desistamos de nuestra labor y callemos, para generar una sensación de homogeneidad y que parezca que todos somos independentistas”, afirma.
Por otra parte, informa de que en la Autónoma de Barcelona hubo huelgas organizadas por el SEPC contra la aplicación del 155 y el encarcelamientos de los exconsejeros de Puigdemont y ‘Los Jordis’, y que “la universidad se sumó a un ‘parón de país’ asumiendo las tesis independentistas”.
Josep Lago detalla que cuando hay huelgas ponen piquetes violentos en las entradas de las facultades, que hacen barreras con contenedores, sillas y mesas para impedir el paso. Cuenta que “van encapuchados, muchas veces con palos y así tratan de intimidar”.
Un par de ejemplos de cómo tratan de impedirles el paso a la facultad y boicotearles las clases:
Así impiden los piquetes en la Universidad de Barcelona la entrada a los que no quieren secundar la huelga. ¿Democracia? pic.twitter.com/V8GqGVAoSJ
— Santiago Raposo (@SantiagoRaposo) 26 de octubre de 2017
PINTADAS CONTRA LA PLATAFORMA EN LA UNIVERSIDAD
Josep Lago también denuncia que la Autónoma de Barcelona está «repleta grafitis» contra ‘Jóvenes de Societat Civil Catalana’, a favor del separatismo y del comunismo. Dice que han pedido a la universidad que se quiten ya que les hace “mucho daño como plataforma”, porque “quién va a querer pertenecer a un colectivo de estudiantes contra el que ponen pintadas en la universidad”.
En la universidad les han dicho que limpiarán las pintadas dos veces al año, normalmente coincidiendo con las vacaciones de Navidad y de verano.
Así luce a día de hoy:
Estas son otras pancartas y pintadas que hubo en el centro:
Desde la Universidad Autónoma de Barcelona manifiestan que han mostrado siempre su rechazo radical a cualquier tipo de violencia y a favor de la libre expresión de ideas.
Por su parte, el coordinador de esta plataforma indica que aunque desde el centro dicen públicamente que ellos han trabajado para mejorar la convivencia, nunca explican cómo.
ALGUNOS PROFESORES TAMBIÉN HAN PERDIDO EL MIEDO
Hay profesores que han perdido el miedo y están denunciando este ‘acoso’. Por ejemplo, la profesora titular de medios de comunicación, Isabel Fernández Alonso, que envió una carta a la rectora, Margarida Arboix, en la que le recordaba que una universidad debe ser neutral y fomentar el debate político desde la serenidad en lugar de azuzar a los alumnos.
Fernández también ha denunciado la “pasividad” de la universidad ante “las acciones violentas de algunos estudiantes que agreden a otros solo por pensar de manera distinta”.
Otros que han alzado la voz son Rafael Arenas, de la facultad de derecho, que es expresidente de ‘Societat Civil Catalana’; y el profesor de ciencias políticas Gabriel Colomé, que, entre otros, firmaron en marzo de 2017 un manifiesto contra la violencia radical en el campus.
No obstante, el coordinador de ‘Jóvenes de Societat Civil’ indica que «en general los docentes tienen miedo porque muchos no tienen plaza fija y cuesta mucho que se pronuncien».
Los jóvenes no se acobardan. En este vídeo denuncian el «calvario» que padecen y «reclaman una universidad de todos»:
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