El jurado declara culpable a Rodrigo Lanza de un delito de lesiones imprudentes con resultado de muerte
Hoy se ha celebrado la última sesión del juicio a Lanza en la Audiencia Provincial de Zaragoza por el denominado “caso de los tirantes”; la sentencia podría estar dictada en el plazo de una semana. Foto: EP

El jurado declara culpable a Rodrigo Lanza de un delito de lesiones imprudentes con resultado de muerte

No considera probado que el acusado actuara movido por el ánimo de causarle la muerte a Victorino Laínez
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15/11/2019 12:38
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Actualizado: 15/11/2019 18:31
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El jurado popular ha declarado hoy culpable al antisistema Rodrigo Lanza de haber causado intencionadamente lesiones a Victorino Laínez con resultado no buscado de muerte.

En la última sesión del juicio por el denominado “caso de los tirantes”, celebrada esta mañana en la Audiencia Provincial de Zaragoza, el jurado popular, formado por cinco mujeres y cuatro hombres, ha emitido su verectido.

Los hechos tuvieron lugar durante la madrugada del 8 de diciembre de 2017, en el bar ‘Tocadiscos’ de Zaragoza.

Los miembros del jurado no consideran probado que el acusado actuara movido por el ánimo de causarle la muerte ni que las marcas que éste tenía en el pecho fueran compatibles con las patadas que Lanza le dio.

Tampoco consideran probado que las marcas en las manos de Lanza fueran compatibles con las lesiones que Laínez presentaba en su cara.

El jurado sí considera probado, por unanimidad, que en la conversación que mantuvieron en el bar, Lanza llamó facha y fascista a Laínez y que le dijo que ese era un barrio antifascista y que no querían nazis en él, pero no considera acreditado que Lanza hiciera alusión a los tirantes con la bandera de España que llevaba Victorino.

Considera probado, por unanimidad, que Lanza y sus amigos se dirigieron a la puerta de salida, con la intención de marcharse siendo seguidos por Laínez sin que se dijeran palabra alguna.

Tampoco considera acreditado que, en la puerta del bar, ambos mantuvieran un enfrentamiento verbal, pero sí que Victorino Laínez entró de nuevo en el local y que Rodrigo Lanza volvió a entrar rápidamente
de nuevo en el interior y que le asestara un golpe seco por detrás en la cabeza.

Por unanimidad los miembros del jurado consideran probado que como consecuencia del golpe recibido Victorino Laínez cayó al suelo desplomado, quedando inconsciente, y una vez en el suelo Rodrigo Lanza le dio una patada en la cara y le propinó puñetazos en la cabeza y múltiples golpes, tras lo cual salió del local y se marchó.

Unánimemente consideran que cuando Victorino estaba en el suelo, aún vivo e inmóvil, Rodrigo le propinó innecesariamente golpes que aumentaron, deliberada e inhumanamente su dolor, pero no consideran probado que los golpes sufridos por Victorino contribuyesen a su muerte cuatro días después.

Asimismo, el jurado considera unánimemente que las distintas bebidas alcohólicas que Rodrigo Lanza había consumido no le afectaron a su capacidad de darse cuenta de lo que hacía y de querer hacerlo y que no sufrió estado de pánico.

Entienden también los nueve miembros que existió provocación por ambas partes.

Por otra parte, el jurado considera que no debe concederse a Rodrigo Lanza el beneficio de suspensión condicional de la condena y que no debe proponerse al Gobierno el indulto total o parcial de la pena que se le imponga.

El juicio comenzó el pasado 4 de noviembre con las intervenciones de la fiscal, los abogados de la acusación y la defensa, así como el acusado, quien respondió únicamente a las preguntas de su abogado.

En su declaración, Lanza aseguró que «en ningún momento» vio los tirantes con la bandera de España que llevaba la víctima, a la que golpeó «de frente» porque le salió «con un cuchillo», por lo que solo actuó para defenderse.

En la vista, que se prolongó hasta el pasado martes, han compareciendo 16 peritos y 34 testigos.

Tanto la Fiscalía, como la acusación particular, y la popular, ejercida por VOX, han manifestado que no comparten el veredicto y que mantienen las calificaciones que elevaron a definitivas, com peticiones de 12 años de prisión.

Por su parte, la defensa, Endika Zulueta, ha reclamado la inmediata puesta en libertad del acusado, a lo que se han opuesto las acusaciones.

El presidente del tribunal del jurado, el magistrado José Ruiz Ramo, ha anunciado que la sentencia podría estar dictada en el plazo de una semana.

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