Hoy se cumplen dos años del fallecimiento de Gonzalo Jiménez Blanco.
El recuerdo de Gonzalo Jiménez Blanco muy presente en el vigésimo aniversario de Arhurst en España
Este despacho internacional ha elegido al actual socio director en nuestro país, Jorge Vázquez, como codirector de la práctica mundial de M&A
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27/7/2021 06:48
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Actualizado: 27/7/2021 06:48
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Dos décadas han pasado desde que Ashurst decidiera impulsar su marca en nuestro país. De la mano de Duncan Stiles, socio de la oficina de Londres que abrió el despacho en Madrid.
Stiles contrató como primer socio a Jesús Almoguera para ‘Corporate’, junto a él a Gonzalo Jiménez-Blanco, experto en finanzas, a Cristina Calvo como socia del área inmobiliaria y a Eduardo Gracia, como socio del área fiscal.
Tras el arranque gestionado por Steven Fox que estuvo cuatro años como socio director, fue el propio Gonzalo Jiménez-Blanco quien asumiría esa responsabilidad hasta agosto de 2016.
En los últimos meses compartió este papel con Eduardo Gracia, fiscalista. Su papel fue clave en la expansión de la firma. Sin embargo, una enfermedad degenerativa retiró a este abogado del Estado en excedencia, que fue relevado por María José Menéndez.
Eso hizo que tuviera diferentes reconocimientos públicos a su gestión. Confilegal a título póstumo, junto a Juan Picón, otro abogado de relieve fallecido, le otorgó entonces su premio más destacado.
Hoy se cumplen dos años de su fallecimiento.
Tras Jiménez-Blanco, la dirección de Ashurst estuvo en manos de María José Menendez, hasta el 2019 a la que sucedió Jorge Vázquez, socio director actual del despacho internacional en nuestro país.
El despacho no se ha olvidado nunca de uno sus impulsores y Ashurst en colaboración con ICADE Comillas, universidad en la que este jurista estudio impulsaron el Observatorio Gonzalo Jiménez-Blanco Ashurst – ICADE.
En la actualidad la oficina de Ashurst en Madrid cuenta con más de 70 abogados, de los cuales 15 son socios. Desde su fundación en 2001 ha asesorado a clientes nacionales e internacionales de los principales sectores económicos en numerosas operaciones empresariales y financieras. En el 2019 se produjo el último relevo en la dirección de la firma.
María José Menéndez, agotó su mandato de tres años y cedió el puesto a Jorge Vázquez quien sigue al frente de la firma. Vázquez, desde noviembre de 2020, pertenece al Comité Ejecutivo de la firma y es codirector a nivel mundial de la práctica de Corporate-mercantil desde hace unos días.
Este jurista experto en reestructuraciones dejó DLA Piper en 2005 para incorporarse, por consejo de un ‘headhunter’, a Ashurst. En aquella entrevista de trabajo Steven Fox, Jesús Almoguera y Gonzalo Jiménez-Blanco con los que congenió y vio en este bufete el hueco que buscaba.
Vázquez recuerda que “en aquel momento el despacho contaba con una treintena de profesionales pero estaba siempre en las operaciones principales que se gestionaban en nuestro país. En aquel momento ya era llamativo el buen ambiente de trabajo pese a lo intenso de la actividad”.
Revisando las cifras de este último ejercicio, el despacho a nivel internacional crece por quinto años consecutivo con unos ingresos de 711 millones de libras, un 10% más que en el ejercicio anterior (644 millones de libras –753.930.800 de euros– en 2020).
Jorge Vázquez, socio director de la oficina de Ashurst en Madrid.
Eso supone que el crecimiento del 40 % de los ingresos en un periodo de cinco años, con una tasa media de crecimiento anual superior al 7 %.
Mientras que el beneficio por socio de ‘equity’ de 1.038.000 libras –1.215.186 de euros– un 15 % más que en el ejercicio anterior (903.000 libras en 2020).
Vázquez cree que la firma dirigida a nivel mundial por Paul Jenkins ha dado la vuelta a la situación complicada ante de ese quinquenio de crecimiento, “El despacho ha dado una vuelta complicada. Y este año pese al coronavirus, los resultados demuestran que lo hemos hecho bien, dentro del Plan Estratégico para el 2023”.
Esto supone que la estrategia de la firma que se centrara en sectores concretos ha funcionado. “En el caso de Madrid, el último año de María José fue nuestro pico absoluto y desde entonces hemos tenido dos años con menos volumen de ingresos. Aspiramos ahora a seguir creciendo”.
CLAVES DE LA CONSOLIDACIÓN
Sobre las claves de la consolidación de la firma a lo largo de estos veinte años, Vázquez explica que “ha habido una apuesta decidida por estar en Europa y también en Asia”.
“En las plazas en las que estamos presentes en Europa somos conscientes de que nuestra red internacional es un factor diferencial de muchas otras firmas. Somos una sociatura y se nota a todos los niveles, tanto a nivel interno como los propios clientes que ven como siempre les atiende el socio y el equipo adecuado a sus necesidades”.
También señala que el despacho se ha posicionado en distintas áreas estratégicas, “hay una amplia donde se incluyen inmobiliario y proyectos, donde también tendría cabida infraestructuras y energía, que funcionan bien”.
Respecto al despacho de Madrid, Vázquez aclara que el área de reestructuraciones y refinanciaciones ha tenido menos actividad de la pensaba.
“Se pensaba que el año pasado iba a ver mucha actividad a nivel de refinanciaciones pero no ha sido tanto así. Es posible que en este ejercicio haya otro tipo de grupos sabiendo que la moratoria concursal acaba en diciembre”.
Sin embargo, “a nivel inmobiliario la actividad es notable ya desde el pasado año. Los equipos están ocupados y hay mucho apetito inversor. Durante la pandemia hicimos muchas operaciones a nivel logístico y en los últimos tiempos relacionados con el sector hotelero”.
A nivel de financiación, “lo que nos llega de clientes de ‘private equity’ [capital privado] es que los bancos españoles han sido flexibles y han estado dispuestos a ayudar a sus compañías de cartera. Han afrontado otros problemas. Ligado al inmobiliario ha aparecido de más fondos de deudas dispuestos a hacer préstamos que los bancos no podrían asumir”.
“Ligado al inmobiliario más fondos de deudas dispuestos a prestar, asumiendo los bancos que no están dispuestos a asumir esos costes”, destaca. Y mucha operación de M&A [fusiones y adquisiciones ] en el ámbito de la energía en el sentido más amplio, tanto renovables como otros proyectos de promotores celebrando contratos de ‘joint venture’ [empresa mixta] con fondos, entre otras iniciativas.
Por último, Vázquez indica que “hemos visto también bastantes temas en el ámbito de instituciones financieras. Las fusiones de los distintos bancos hacen que se revisen los negocios que ya existían con la entidad fusionada y los que quizás no existían, pero con ocasión de la fusión para el banco no son importantes llegan a venderse o se reestructuran”.
LA IMPORTANCIA DEL M&A
María José Menéndez, directora de operaciones corporativas de Ashurst en Europa Continental, Oriente Medio y África (CEMEA) y directora del departamento de Derecho mercantil del despacho en España. Lleva dieciséis años en esta firma legal.
“Es evidente que el despacho ha evolucionado mucho y tiene una posición más consolidada que se ve en el tipo de asuntos y de clientes que gestionamos los socios españoles”. Entre 2016 a 2019 fue socia directora del despacho. Esta abogada mercantilista afirma que
“Gonzalo Jiménez-Blanco fue una persona importante para la firma y su evolución posterior. Su capacidad de hacer y de relacionarse nos ayudó mucho al crecimiento de la firma. Hacia una función importante en el despacho y su trayectoria de Abogado del Estado sirvió para darnos mas visibilidad”.
“Creo que acertamos en la forma de dar visibilidad al despacho a nivel local, todos los socios colaborábamos con nuestra mejor voluntad. Fuimos poco a poco calando en el mercado. Eso ha dado lugar que al contrario que otras firmas internacionales, nosotros generamos localmente un gran volumen de trabajo en lugar de asuntos referidos. Con el tiempo hemos pasado a ser exportadores de asuntos”.
Desde esta perspectiva, “esta forma de trabajar ha ayudado a muchos clientes multinacionales españoles a ayudarles en proyectos fuera, es el caso de grandes empresas de infraestructuras que se fueron a Australia a hacer determinadas operaciones, entre otros asuntos. En estos casos el papel del socio español es que la firma tenga el mejor servicio legal desde nuestra red internacional”.
Esta jurista es la responsable del área de M&A a nivel europeo, tras dejar la dirección de la firma española, “es una labor de coordinación donde buscamos los puntos de interés común de fuerza conjunta entre los equipos de M&A de las distintas oficinas”.
“Hay que darse cuenta de que los mercados son diferentes, el de Oriente Medio está más en petróleo e infraestructuras, pero el de Luxemburgo es constitución de fondos o e estructuras de inversión financiera. Se trata al final de tener un equipo potente internacional de cara a los clientes que operan en diferentes países. Eso ha hecho que haya mucha comunicación interna entre las distintas oficinas de la firma en esta práctica”.
Menéndez explica que este es un negocio muy simple, “te ganas la confianza de los clientes, al contar con profesionales que hacen su trabajo legal de manera notable, eso implica que el despacho cuide a esos profesionales. Al final éxito viene detrás, todo depende de que consigas atraer esa confianza de las empresas”.
EL MOTOR INMOBILIARIO SIGUE PUJANTE
Por su parte, Cristina Calvo, socia del área inmobiliaria de Ashurst, ha tenido diferentes responsabilidades a nivel mundial en este despacho.
Pasó de estar en el Consejo Mundial del despacho, como primera mujer que llegaba a ese puesto a dirigir la firma en Europa. Calvo dejó 1215186para unirse al proyecto de Ashurst, despacho emergente, “al final creo que tanto Stiles como Fox supieron elegir los socios para impulsar la firma en España”.
“Profesionales cualificados pero muy complementarios entre ellos. Eso ayudó a que el despacho fuera despegando progresivamente. La marca la impulsamos entre todos en estos primeros años”.
Para Calvo, “junto con ‘Corporate’ y ‘finance’, inmobiliaria es una de las áreas principales del despacho. Al mismo tiempo generamos negocio para otras áreas, incluyendo Corporate, financiero y fiscal. Todos los temas inmobiliarios tienen una parte fiscal importante. Este año de pandemia ha sido uno de los motores de la firma”.
Respecto a Jiménez-Blanco, “trabajé con él desde el principio, nos hicimos muy amigos. Le echamos mucho de menos desde que ya no está con nosotros. Es evidente que ha dejado un vacío importante como ser humano y profesional cualificado”.
Esta experta señala que “tuvo la suerte de liderar el despacho en una época de expansión. Por su forma de ser se llevaba bien todo el mundo. Externamente conocía a todo el mundo. Nos puso en el mapa y ayudó mucho a la firma a nivel de relaciones. A nivel interno, también nos apoyaba mucho a todos. Motivaba mucho. Un líder positivo que supo sacar lo máximo de cada uno. Este martes recordamos su pérdida”.
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