La gerontofilia, la atracción sexual por una persona anciana, no está tipificada penalmente; lo que sí tiene castigo es cruzar la línea roja, como parece ser el caso que se dilucidará el próximo martes en la Audiencia Provincial de Palma de Mallorca.
Un cuidador de una residencia se enfrenta a 10 años de prisión por abusar sexualmente de una anciana de 95 años con demencia senil
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29/5/2022 06:48
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Actualizado: 29/5/2022 02:21
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El sujeto es un auxiliar de enfermería de una residencia de personas mayores que presenta una parafilia, un trastorno sexual denominado gerontofilia, por el que al sujeto le excita sexualmente mantener relaciones con personas ancianas, según descripción del Manual de diagnóstico y estadística de los desórdenes mentales (en inglés Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders o DSM 5) de la Asociación Psiquiátrica de los Estados Unidos.
Entre las funciones del hombre que padece esta parafilia se encontraban las labores diarias de higiene de las personas mayores.
Según el escrito de acusación, los hechos juzgados tuvieron lugar el 31 de agosto de 2019, cuando el hombre se dirigió a la habitación de la víctima, de 95 años en aquel momento y que estaba postrada debido a su incapacidad por demencia.
El cuidador, aprovechando que tenía llevar a cabo las labores diarias de higiene, como el cambio del pañal, se bajó los pantalones y le introdujo el pene por la vagina hasta que fue sorprendido por una compañera.
El Fiscal pide para el hombre diez años de prisión por un delito de abuso sexual, inhabilitación absoluta para el ejercicio de la profesión, orden de alejamiento, así como una indemnización de 30.000 euros de la que deberá responder la aseguradora o, subsidiariamente, el Instituto Mallorquín de Asuntos Sociales (IMAS), responsable de la residencia.
El juicio comienza pasado mañana martes a las 9.45 de la mañana en la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Palma de Mallorca.
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