De izquierda a derecha: Francisco Oliver, moderador, Mariano Rajoy, Francisco Oliver, José Luis Corcuera y Edmundo Bal. Foto: Pedro Nicolás
Rajoy, Bal y Corcuera, tres visiones políticas diferentes con un punto en común: la ley de amnistía es un fraude
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19/1/2024 01:14
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Actualizado: 23/1/2024 10:34
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Hasta la bandera. Así estuvo ayer el Nuevo Teatro Municipal Princesa Doña Leonor de Boadilla del Monte, localidad situada a 24 km al oeste de la Comunidad de Madrid, para recibir a tres pesos pesados de la política española.
Los más de 200 asistentes pudieron escuchar a Mariano Rajoy, presidente del Gobierno por el PP de 2011 a 2018, José Luis Corcuera, ministro del Interior por el PSOE de 1988 a 1993 y Edmundo Bal, diputado de Ciudadanos entre 2017-2023, abordando el asunto que más está preocupando ahora a los españoles.
Y aunque parezca mentira, porque cada uno de ellos tiene un punto de vista ideológico diferente, comparten algo en común: están en contra de la ley de amnistía que el PSOE impulsa en el Congreso de los Diputados con el apoyo de los partidos separatistas catalanes. Porque consideran que es un fraude y un engaño a todos los españoles.
Lo han hecho en el segundo debate dentro del ciclo “Reflexiones sobre el Futuro: consecuencias de la Ley de Amnistía”, coorganizado por Confilegal y por Consistorio de la localidad.
Debate que llevó por título “Ley de Amnistía: ¿hacia dónde nos puede llevar?”, moderado por el magistrado Francisco Oliver y que mantuvo en vilo a todo el público durante la hora y media que duró.
MARIANO RAJOY: GARANTIZA LA IMPUNIDAD A LOS QUE VIOLARON LA CONSTITUCIÓN
El expresidente decidió levantarse de su asiento situado en el escenario para dirigirse hacia el atril y pronunciar así su discurso. No sin antes hacer un par de muecas a sus compañeros de cartel, a quienes calificó de dos personas muy importantes en la vida pública.
Para Rajoy, España está en una situación en la que acaba de digerir un escándalo cuando empieza otro. Desde la desaparición del delito de sedición hasta la ley de amnistía, la cual considera que pretende dos cosas.
Por un lado, garantizar la impunidad de quienes violaron la Constitución, las leyes, atentaron contra la democracia, fueron condenados o se dieron a la fuga.
Y, por otro, condenar a quienes defendieron la Constitución, a jueces, fiscales, Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y el Gobierno de España, que paró el golpe aplicando el artículo 155.
«La amnistía es un fraude porque un candidato del PSOE dijo que no se aprobaría nunca, además, aniquila un principio básico de la Constitución, que es el de igualdad. Es asumir que determinados políticos pueden delinquir mientras que el resto de los ciudadanos están sometidos a la ley».
«Convierte a golpistas en honrados ciudadanos», afirmó.
Asimismo, criticó que la división de poderes y la independencia de la Justicia se dejase «a los políticos de turno» dando pie a que las sentencias de los tribunales no sirvan para nada.
Rajoy criticó que se dijese que la amnistía se hace por interés general y para una buena convivencia. Pero «lo que ayudó a la unidad de los españoles fue la puesta en marcha del 155 y la aplicación de la ley por parte del Poder Judicial».
¿Y ahora qué?, se preguntó el expresidente. «No creo que haya soluciones mágicas, pero diré que los políticos que están de acuerdo en esto dicen que es un disparate. Veo inviable que se declare constitucional».
JOSÉ LUIS CORCUERA, SÁNCHEZ ES UN MENTIROSO
Desde su asiento, Corcuera comenzó su discurso haciendo referencia a una frase del político indio Mahatma Gandhi: «más vale ser vencido diciendo la verdad que triunfar por la mentira».
Y esto, según el socialista, lo que ahora está en juego en España.
«Hoy hace 25 años una personalidad muy importante española, Antonio Maura, vaticinó que el pronunciamiento que dio origen a la dictadura de Primo de Rivera produciría el fin de la monarquía, una república, luego el caos y luego los militares. Y eso es lo que no nos tiene que volver a pasar».
Recordó las palabras de Ramón Rubial, que fue quien le dio el ingreso en el PSOE hace ya 50 años. «Sólo hablaba de que la sociedad española tenía que trabajar para construir una democracia entre todos».
También echó la vista atrás, recordó la transición, a la que calificó de «una de las herramientas más importantes que ha hecho el pueblo español». Y atacó a Sánchez.
«El presidente dijo que la amnistía era inconstitucional y ahora resulta que han cambiado de opinión. No estamos dispuestos a que nos engañen gratuitamente, hay que votar», apuntó.
«No es la primera vez que el independentismo catalán trata la amnistía en España. Lluis Companys, de Esquerra Republicana de Cataluña, dio un golpe de estado en 1934 con muertos y fue amnistiado después de las elecciones de 1936. Y el problema no se arregló”.
De modo que animó a hacer «la función que tiene una sociedad y que permite la Constitución, que es la contestación democrática a decisiones que son injustas y que traerán gravísimos problemas de convivencia. No es verdad que se haya pacificado el conflicto de Cataluña. Si ha sido así fue por la intervención de la Justicia».
Para concluir, Corcuera destacó dos canciones que le recuerdan a la situación actual. La de Pink Floyd, llamada «The Wall» (el muro) porque «al fin y al cabo, sólo eres un ladrillo en la pared» y otra de Mercedes Sosa, «Sólo le pido a Dios».
Esta última por su estrofa «sólo le pido a dios que el engaño no me sea indiferente, si un traidor engaña a unos cuantos, que estos cuantos no lo olviden fácilmente».
EDMUNDO BAL: SE HACE PRESIDENTE A UNA PERSONA SIN ESCRÚPULOS
Bal, que optó por dar también su discurso desde el atril, advirtió entre risas que él iba a hablar de Derecho porque, de política, sabía bien poco.
Y fue claro y contundente respecto a la ley de amnistía. «No hay que ser adivino para saber que no pinta bien, nos va a ir mal a todos los españoles. Estamos de rodillas ante unos prófugos de la Justicia».
Animó a no caer en la trampa de la maquinaria publicitaria de Moncloa y en discutir si la amnistía es, o no, constitucional.
«Me da igual si este Tribunal Constitucional dice que la amnistía cabe en la Constitución Española, es inmoral y es injusta. Se delinque gratis por siete malditos votos, se ha hecho presidente a una persona sin escrúpulos».
El exdiputado aprovechó su intervención para recordar al que fue magistrado del Constitucional de 2004 a 2013 elegido por el PSOE, Manuel Aragón. «Incluso él dice que no cabe en la Constitución».
Por otro lado, hizo referencia a la «rebelión de los letrados del Congreso» sobre la constitucionalidad de la ley de amnistía y su encaje en el derecho de la UE. «Nunca he visto que después de ser admitido un proyecto por el letrado mayor, sea contradicho». Es lo que ha ocurrido.
Aún así, insistió en que es «patológicamente optimista» y tiene «la esperanza en que la amnistía no va a llegar a buen puerto».
Pero eso sí, quiso dejar constancia que Junts tiene «magníficos juristas» y que no se puede «caer en el error de despreciar la capacidad del adversario».
Bal tiene las esperanzas puestas en Europa, y lanzó una baza. «En España tenemos la costumbre de no tomarnos en serio las elecciones al Parlamento Europeo porque creemos que es algo que está lejos, y se está diciendo que va a haber un 50% de abstención, hay que ir a votar, es la última posibilidad de que esta tropelía no se cometa por el gobierno».
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