
En una votación unánime a viva voz, la Cámara de Delegados de la ABA aprobó una resolución en la que "urge a la Corte Suprema de los Estados Unidos a modificar el código de ética que adoptó en 2023 y a establecer un código de ética vinculante para la Corte,
La ABA insta a la Corte Suprema de EE.UU. a establecer un mecanismo de aplicación para su código de conducta
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La Asociación de Abogados de Estados Unidos (ABA, por sus siglas en inglés) ha instado a la Corte Suprema de EE.UU. a crear un «mecanismo de aplicación» para el código de conducta que ya adoptó en 2023.
Con esta petición, la ABA se une a un número creciente de organizaciones que consideran que dicho código, firmado por los nueve magistrados en otoño de 2023, carece de carácter vinculante al no incluir un proceso para hacerles responsables en caso de incumplimiento.
En una votación unánime a viva voz, la Cámara de Delegados de la ABA aprobó una resolución en la que «urge a la Corte Suprema de los Estados Unidos a modificar el código de ética que adoptó en 2023 y a establecer un código de ética vinculante para la Corte, que sea tan estricto como el Código de Conducta para los Jueces de Estados Unidos, adoptado por la Conferencia Judicial de los Estados Unidos, e incluya un mecanismo de aplicación adecuado.»
La resolución fue propuesta por el Colegio de Abogados de la Ciudad de Nueva York y aprobada durante la reunión de la Cámara de Delegados de la ABA en Phoenix.
Un código sin mecanismo de aplicación
La Corte anunció la adopción de su código ético en noviembre de 2023, tras meses de críticas por la conducta extrajudicial de algunos de sus miembros, incluida la controversia generada por reportajes periodísticos sobre décadas de viajes de lujo no declarados financiados por el multimillonario donante republicano Harlan Crow a favor del juez Clarence Thomas.
Al adoptar el código, el Tribunal argumentó que lo hacía para disipar la «idea errónea de que los jueces de esta Corte, a diferencia de todos los demás magistrados del país, se consideran exentos de cualquier norma ética».
Según la Corte, los principios recogidos en los cinco cánones del código «no son nuevos» y su contenido «es, en gran medida, una codificación de principios que durante mucho tiempo hemos considerado que rigen nuestra conducta».
Sin embargo, el código no establece ningún procedimiento para supervisar la conducta de los jueces ni para investigar posibles denuncias de mala praxis. A diferencia de otros jueces federales, que están sujetos a un sistema de control regulado por ley federal y normas judiciales, los miembros del Supremo siguen sin estar sujetos a un mecanismo de rendición de cuentas.
La ABA pide una mayor regulación
A pesar de sus deficiencias, la ABA calificó la adopción del código como un «primer paso positivo hacia la transparencia ética en el tribunal más alto del país». No obstante, más de un año después, diversos grupos externos exigen más avances.
En un informe que acompaña la resolución, la ABA señala que el código aprobado por los magistrados en noviembre de 2023 «se queda corto» y es «menos estricto que el que rige a los jueces federales de tribunales inferiores». Según la asociación, su redacción es «aspiracional en lugar de obligatoria» y «carece de un mecanismo de aplicación».
El informe recomienda que la Corte Suprema establezca un nuevo sistema en el que un «Panel de Investigación Judicial» compuesto por cinco jueces federales examine las denuncias éticas y las remita a una «Oficina del Inspector General» para su investigación.
«Esto no es una propuesta radical», afirmó Paula T. Edgar, secretaria de la Asociación de Abogados de la Ciudad de Nueva York, durante la discusión de la resolución en la reunión de la ABA.
«Todos los jueces federales de nuestro país, desde los tribunales de distrito hasta las cortes de apelaciones, están sujetos a un código de conducta diseñado para promover la integridad, la imparcialidad y la confianza pública. Y, sin embargo, el tribunal más alto de nuestra nación, el árbitro final de la justicia, sigue estando exento de cualquier marco ético vinculante».
El profesor de la Facultad de Derecho de la Universidad George Washington, Stephen Saltzburg, miembro de la Sección de Justicia Penal de la ABA, recordó que ela Corte Suprema no ha cumplido con el llamamiento que la ABA hizo en 2023 para la adopción de un código de ética con fuerza obligatoria.
«Todos creíamos que iban a adoptar un código de ética real», señaló Saltzburg. «Lo que hicieron fue aprobar un código sin dientes, sin mecanismo de aplicación y sin abordar algunos de los problemas que más nos preocupan».
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