El profesor Luis Enrique de la Villa, premio Aptíssimi 2017 por su trayectoria
Luis Enrique de la Villa Gil, catedrático de Derecho del Trabajo y maestro de abogados.

El profesor Luis Enrique de la Villa, premio Aptíssimi 2017 por su trayectoria

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06/6/2017 04:58
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Actualizado: 05/6/2017 19:52
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Este jueves Luis Enrique de la Villa Gil, catedrático de Derecho del Trabajo y maestro de abogados  en derecho laboral recogerá en Barcelona el Premio Aptíssimi de ESADE a toda una carrera profesional volcada en las relaciones laborales. También lo harán el resto de premiados en distintas categorías.

Luis Enrique de la Villa Gil, nacido en Madrid el 3 de junio 1935; casado y padre de seis hijos y catorce nietos ha compaginado siempre la docencia con su actividad como abogado en estos últimos cincuenta años.

CONFILEGAL ha pedido a muchos de sus ilustres compañeros una valoración de la carrera de este todoterreno del derecho laboral. Todos coinciden en lo merecido de este homenaje y en el gran compañerismo del propio experto en derecho laboral, al que contemplan más de cinco décadas de ejercicio profesional como abogado laboralista, amén de su faceta investigadora y docente en diferentes universidades como Catedrático del Derecho del Trabajo que es.

Luis Enrique de la Villa, el laboralista total

Para Martín Godino, socio director de Sagardoy Abogados “Luis Enrique de la Villa, el laboralista total. Su aportación al Derecho del Trabajo ha sido y es extraordinaria.  En el mundo académico y desde que obtuvo su Cátedra en Derecho del Trabajo a principios de los años 80, el Profesor de la Villa ha sido una referencia ineludible en todos los grandes temas que conformas nuestra disciplina, siempre presidido por su enciclopédico conocimiento y su rigor en el uso de los conceptos jurídicos”.

“Además, ha creado una escuela inigualable en España de magníficos discípulos, cuya nómina es inabarcable y sin la que hoy el Derecho del Trabajo sería distinto. Permítaseme, porque son amigos y grandes juristas, citar a Ignacio García-Perrote o Jesús Mercader como ejemplos de esa capacidad de trasmitir escuela que ha tenido el Profesor de la Villa”.

Para Godino, su segunda faceta es naturalmente el ejercicio profesional de la abogacía. Seguramente junto con el Profesor Sagardoy, han sido los laboralistas que con más éxito y constancia han sabido hacer compatibles el estudio y la enseñanza con la defensa de los intereses de quienes como abogados se lo han demandado”.

Es referencia ineludible en el Derecho del Trabajo, siempre presidido por su enciclopédico conocimiento y su rigor en el uso de los conceptos jurídicos

El socio director de Sagardoy revela que “la personalidad renacentista de Luis Enrique de la Villa nos regala un tesoro más. Su amor a la poesía y su conocimiento profundísimo de nuestros poetas nos permiten disfrutar de una oratoria luminosa, no sólo en el foro y en el ejercicio de la abogacía, sino en cualquier acto en el que tengamos la suerte de escuchar sus palabras, siempre dichas con la cadencia justa y el contenido preciso”.

Maestro de muchas generaciones

Otra opinión autorizada es la de Luis Enrique de la Villa de la Serna, uno de sus seis hijos y socio director del área laboral de  Hogan Lovells en España, quien explica la trayectoria de su padre, a modo de biógrafo improvisado “Luis Enrique de la Villa Gil se licenció en la Universidad Complutense en 1957. Ese mismo año entró en la Cátedra de Derecho del Trabajo del profesor Gaspar Bayón como Ayudante de Clases Prácticas de la que salió en 1969 al obtener la Cátedra de Derecho del Trabajo en la Universidad de Valencia”.

De la Villa hijo recuerda que “Hasta su jubilación en la Universidad Autónoma en 2005 –de la que fue Decano durante tres cursos- y finalizar el nombramiento de Emérito dos años después, ha enseñado la asignatura durante 50 años seguidos, siendo reconocido como maestro por muchas generaciones de profesionales, particularmente profesores universitarios, entre ellos doce catedráticos de Universidad”.

También nos indica que “el Profesor de la Villa Gil fue nombrado Rector para la puesta en funcionamiento de la Universidad a Distancia de Madrid (UDIMA), a cuyo frente permaneció tres cursos a partir de 2006. Ha sido presidente de la Asociación Española de Derecho del Trabajo y Seguridad Social, actualmente con carácter honorario”.

El profesor De la Villa lleva ejerciendo desde 1961 como abogado laboralista, primero en su despacho propio, ahora en Roca Junyent donde es socio y ejerce tareas de Of Counsel

A nivel investigador destaca que “el profesor de la Villa Gil tiene publicados alrededor de 750 trabajos de la especialidad, entre ellos numerosos Manuales de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social, Monografías y artículos y ensayos, así como recopilaciones de legislación, jurisprudencia y casos prácticos. Ha editado unos 50 libros colectivos dirigiendo a los componentes de los equipos de investigación que ha pilotado a lo largo de su vida, el último de los cuales se publicará en este año 2017”.

Y sobre su faceta de abogado que arranca el año 1961 “Luis Enrique de la Villa Gil figura colegiado como Abogado Ejerciente, profesión que lleva practicando, por tanto, 56 años seguidos, primero como Director del Bufete Laboral y del Bufete de la Villa, y desde 2012 como Socio del Despacho Roca Junyent, en el que continúa desempeñando actualmente funciones de Of Counsel”.

Jurado del Premio de la Asociación ASNALA de Abogados Laboralistas. El segundo con la izquierda, es el profesor Luis Enrique de la Villa. A su lado, Pilar Cavero de Cuatrecasas y Juan Antonio Sagardoy, junto con otros juristas. También aparece Martin Godino, segundo por la derecha, que han dejado su testimonio en este reportaje.

Creador Escuela de Laboralistas más importante del país

Para Juan Antonio Sagardoy, hombre que conoce muy bien al profesor De la Villa del que por inquietudes y edad ha llegado a ser un buen amigo, destaca que “en sus 50 años de profesor de la asignatura -40 de ellos como Catedrático-, ha conseguido formar una de las escuelas de laboralistas más importantes de España, a la que pertenecen numerosos profesores titulares y doce de los Catedráticos de la disciplina del mayor prestigio, todos reconocen su magisterio”.

Estamos ante uno de los autores más prolíficos de la doctrina laboralista de todos los tiempos, con la redacción y firma de más de 700 trabajos de la especialidad

Sobre las relaciones laborales indica que “este prestigioso jurista redactó de su mano la Exposición de Motivos de la Ley de Bases de la Seguridad Social de 1963, considerado un documento imprescindible para la inteligencia del tránsito que plasmó esa norma superando el anterior sistema de seguros sociales y de mutualismo laboral. A su cargo corrió también la redacción de los borradores de las relaciones especiales de los empleados del hogar y de los abogados al servicio de bufetes de abogados”.

A nivel de investigación, Sagardoy destaca que estamos ante uno de los autores “más prolíficos de la doctrina laboralista de todos los tiempos, con la redacción y firma de más de 700 trabajos de la especialidad.  Es autor del libro más importante sobre el contrato de trabajo a domicilio  -que marca la verdadera frontera entre las relaciones por cuenta ajena y por cuenta propia- y del más reconocido Manual de Seguridad Social, en colaboración con el magistrado del área social Aurelio Desdentado”.

En el plano del ejercicio profesional “es uno de los abogados laboralistas de mayor prestigio tras 56 años ininterrumpidos de práctica, primero en sus dos sucesivas boutiques (Bufete Laboral y Bufete de la Villa) y desde hace cinco años en el Despacho Roca Junyent. Por eso recibió en el año 2008 mejor abogado laboralista español por la Asociación Nacional de Abogados Laboralistas y así lo recomiendan los anuarios anglosajones de la abogacía”.

 

Una obra brillante e intensa

Rafael Giménez-Arnau es el presidente del Foro Español de Abogados Laboralistas (FORELAB) y socio del área laboral de Garrigues, otro profesional que valora positivamente ese premio Aptimíssimi que el profesor De la Villa Gil recibirá este jueves “me alegra especialmente dicho galardón por el propio reconocimiento del premiado, por la visibilidad que significa para la profesión y para el derecho laboral, y por qué no decirlo, porque en esta entidad tenemos el privilegio de contar con Luis Enrique de la Villa como uno de los 17 socios que fundaron nuestra asociación”.

Sobre su insigne figura de jurista de las últimas décadas destaca que “Luis Enrique de la Villa ha desarrollado su actividad en un doble plano: de una parte se ha dedicado al mundo universitario, habiendo sido durante más de cuarenta años catedrático de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social, y de otra parte ha ejercido la abogacía en la rama del derecho laboral”.

Rafael Giménez-Arnau: Ha contribuido decisivamente a la plenitud del Derecho del Trabajo como área jurídica diferenciada

Ahí radica, en la opinión del presidente de FORELAB «una de las claves de la riqueza de las aportaciones de Luis Enrique de la Villa, al haber incorporado a su obra científica y a la investigación y desarrollo del Derecho del Trabajo, guiado por el realismo jurídico, toda la experiencia práctica adquirida en su ejercicio profesional como laboralista”.

Otros elementos que nuestro interlocutor destaca es su capacidad intelectual y su energía, entre otras virtudes, nos encontramos con una obra brillante y muy extensa y con una escuela de discípulos, que han influido significativamente en el desarrollo y sistematización del Derecho del Trabajo como disciplina jurídica”.

Para finalizar, Giménez-Arnau concluye señalando que “el premiado ha contribuido decisivamente a la plenitud del Derecho del Trabajo como área jurídica diferenciada. Por ello Luis Enrique todos los compañeros que nos dedicamos al mundo del derecho laboral te estamos agradecidos”. 

El Derecho del Trabajo no se entendería sin el profesor de la Villa

Para Ignacio García-Perrote, Catedrático de Derecho del Trabajo y socio director del área laboral de Uría Menéndez La aportación de Luis Enrique de la Villa Gil al Derecho del Trabajo es verdaderamente excepcional. No es fácil sintetizarla pero lo intentaré. Su obra científica es de una calidad, originalidad y extensión fuera de lo común, tanto desde la perspectiva de sus trabajos individuales, como desde su condición de generoso impulsor de libros y proyectos colectivos”.

Cabe decir, en este sentido, que el Derecho del Trabajo español es incomprensible sin las aportaciones del profesor de la Villa, quien ha participado en su construcción y desarrollo desde hace varias décadas. Y lo sigue haciendo de forma extraordinariamente vigorosa, como lo acredita su relativamente reciente estudio “El Derecho del Trabajo a mis ochenta años” y, entre otras muchas publicaciones, su generosísima contribución a todos los libros homenajes habidos y por haber”.

Es la cabeza de una de las más importantes escuelas académicas de Derecho del Trabajo, formada por más de una decena de catedráticos de varias Universidades

A juicio de García-Perrote su figura ha sido la de “maestro indiscutible, y admirado y reconocido. Fue presidente de la Asociación Española de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social, director de numerosas tesis doctorales que han abierto nuevas líneas de investigación y de dos revistas científicas. Además es cabeza de una de las más importantes escuelas académicas de Derecho del Trabajo, formada, entre otros muchos profesores, por más de una decena de catedráticos de varias Universidades”.

Sobre su presencia en la abogacía destaca que “hablamos de un maestro indiscutido y venerado de la abogacía con más de cincuenta años de ejercicio profesional a sus espaldas y todavía hoy en plena actividad en todas las instancias y sedes jurisdiccionales. La capacidad de trabajo de Luis Enrique de la Villa es legendaria, siendo un permanente ejemplo de rigor, dedicación, exigencia, entusiasmo, cuidado máximo del lenguaje escrito y oral, compañerismo y –no es casual que reitere esta palabra- extrema generosidad”.

Una referencia del derecho laboral de nuestro país

En opinión de Fernando Vizcaíno de Sas, socio responsable del área de relaciones laborales del despacho Jiménez de Parga la imagen de este jurista homenajeado es clara para muchos abogados que vinieron tras él. “Conocí al profesor De la Villa cuando defendía a un sindicato. Me llamó la atención la profundidad de sus conocimientos, lo exhaustivo del planteamiento de la defensa y, sobre todo, la vehemencia con la que se dirigía al tribunal”.

Es un referente indudable para quien quiera conocer lo que es el Derecho del Trabajo 

De este experto en derecho laboral destaca “su vehemencia erudita, sosegada pese a la rotundidad de su discurso, con una exposición rotunda y en un tono moderado pero seguro en todas sus intervenciones”. Vizcaíno de Sas reconoce que “no tuve la suerte de estudiar con él pero después de aquello intimé algo, desde el respeto de mí, entonces, juventud, y leía sus artículos y libros.

A juicio de este experto en relaciones laborales “Luis Enrique De La Villa es historia del derecho laboral en nuestro país y un referente indudable en quienes se acerquen a esta disciplina. Los nuevos alumnos de derecho social deberían leerlo y asistir, como yo hice, a sus conferencias y sus defensas procesales”.

Y subraya que “todo premio es merecido cuando, quien lo recibe, lleva a sus espaldas una carrera brillante y fructífera como el profesor De La Villa enseñando a cuantos le escuchan y defendiendo a sus clientes eficaz y profesionalmente.

El Profesor De la Villa fue el primer rector de la UDIMA. Aquí con Roque de las Heras, presidente de esta Universidad en un evento.

Un profesional brillante en sus ideas

Para Pilar Cavero, socia de laboral de Cuatrecasas, primera presidente que tuvo la asociación  FORELAB y primera socia mujer que tuvo Cuatrecasas en su historia “El profesor De la Villa  ha sido maestro de maestros del derecho del trabajo, todos los que hemos dedicado nuestra vida profesional a esta especialidad hemos tenido el privilegio de aprender permanente de este jurista excepcional, un auténtico lujo”.

 El profesor De la Villa ha hecho avanzar el Derecho del Trabajo en nuestro país

Desde su punto de vista “siempre fue brillante en sus ideas, progresista en sus planteamientos, atrevido y pionero en sus pensamientos y en la defensa de sus argumentos, en mi opinión ha hecho avanzar de forma definitiva el Derecho del trabajo de este país”.

Para Cavero lo que más valora en este sentido como aportación de este jurista volcado desde muy joven al  Derecho del Trabajo del es “ su liderazgo en la forma  de interpretar y aplicar el derecho del trabajo en defensa de los derechos de los trabajadores , sin olvidar en sus planteamientos el necesario equilibrio que debe existir con los derechos de las Empresas”.

Un estudioso del iuslaboralismo

Carlos Javier Galán pertenece a otra generación de abogados más jóvenes. Pero por eso su testimonio es importante. Dirige Alberche Abogados donde la práctica laboral es notable y es el actual presidente de la sección laboral del Colegio de Abogados de Madrid. Todo un estudioso del derecho del trabajo. Así ve la figura del profesor De la Villa.

Leer y escuchar a De la Villa me parece más que recomendable para seguir aprendiendo cada día

“Si me pidieran citar a grandes maestros del iuslaboralismo español contando con los dedos de sola una mano, uno de los nombres que a mí saldrían es el de Luis Enrique de la Villa Gil. El Derecho laboral español se ha ido configurando, hasta llegar a nuestros días, por las decisiones del legislador, interpretadas por la jurisprudencia, pero creo que no se entiende sin algunos eminentes estudiosos que han ido desentrañando instituciones y conceptos y haciendo notables aportaciones”.

Para este experto en derecho del trabajo “Para las generaciones que hemos llegado al ejercicio cuando él ya llevaba décadas fecundas de estudio y de producción doctrinal, constituye una referencia insoslayable. Leer y escuchar a De la Villa me parece más que recomendable para seguir aprendiendo cada día. El premio es de indiscutible merecimiento y le envío mi más sincera y afectuosa felicitación”.

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