La industria farmacéutica apuesta por la seguridad ante el aumento de medicamentos ilegales
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30/9/2017 05:58
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Actualizado: 29/9/2017 20:40
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La operación “Pangea X” ha ido contra la venta, publicidad y suministro ilegal de medicamentos, productos médicos y productos sanitarios que no cumplen con los requisitos en la Unión Europea y España, falsificados o no sujetos a licencias a través de Internet. Se ha procedido a la detención o investigación de 22 personas en un total de 23 operaciones, de las que 20 continúan activas.
La Guardia Civil, en una actuación de alta intensidad contra el tráfico ilícito de medicamentos coordinada por INTERPOL a nivel mundial, ha intervenido cerca 4.507.050 dosis de medicamentos falsificados, entre los que destacan potenciadores de la función sexual y de masa muscular
En esa intervención se han requisado 56.185 Potenciadores de la función sexual. 4.205.491 Potenciadores de la masa muscular. 55.428 Psico estimulantes. 8.248 Suplementos/complementos- vitamínicos. – 136.116 Analgésicos-antibióticos. 86.970 Adelgazantes. 45.582 Otros medicamentos pendientes de clasificar.
Fuentes de la Guardia civil señalan que a operación se ha saldado con la detención de 62 personas y la investigación de otras 22, en un total de 23 operaciones de las que 20 continúan aún activas.
Se han realizado 1.442 inspecciones en distintos establecimientos como herbolarios, gimnasios, sex-shops, parafarmacias y venta de alimentos de dietética, en las que se han formulado 545 infracciones administrativas y detectado 2 infracciones penales.
De la misma manera, se ha actuado contra la distribución de medicamentos falsificados e ilegales en Internet, intensificándose las inspecciones administrativas en puntos no autorizados de distribución de los mismos.
La industria farmacéutica apuesta por la seguridad
Para Gemma Colomer, asociada senior en el Departamento de Life Sciences del despacho Jausas, la operación desarticulada por la Guardia Civil es de gran calado “En Europa el problema preocupa, desde la UE hay una directiva del 2010 con obligaciones claras para luchar contra esta lacra que como se puede ver en este asunto es una cadena de distribución muy organizada”.
Esta jurista destaca las implicaciones administrativas y penales del asunto “Admistrativas porque la Ley de Garantías del Medicamento ya establece sanciones por este tipo de prácticas. Sanciones graves de 600.000 a 1.000.000 de euros con la posibilidad de que la multa quintuplicase el valor de los productos confiscados”.
Al mismo tiempo señala que hay otra vertiente penal “donde pueden establecerse muy posiblemente delitos contra la salud pública, delito que se incluyó recientemente en el Código Penal, con penas que podrían oscilar entre 6 meses a tres años de cárcel dependiendo del riesgo a que sea sometido a la persona”. Esta conducta penal se aplica a los fabricantes y cualquier otro agente que intervenga en esta cadena de distribución.
Sobre la venta a través de Internet, Colomer recuerda que en España está prohibida, como en muchos países, esta venta de productos con receta y, sin embargo permitida, para los productos llamados OTC, donde se pueden incluir productos de autocuidado como cosmética y dermofarmacia, complementos alimenticios, plantas, productos sanitarios de autocuidado y de higiene “Se trabaja para que en el 2019 se implementen los dispositivos de seguridad en todos los medicamentos. Sin lugar a duda va a ser un cambio clave para la industria”.
Con esos dispositivos de seguridad se obliga a una fabricación específica “y que toda la cadena de los agentes que intervengan verifiquen que se encuentran esos dispositivos no alterados. Eso ayudará a saber que no habrá falsificación del producto ni a corto ni a largo plazo”. Para Colomer, la alerta ya ha sonado en Europa y la UE y todas las Agencias del Medicamento, como la española, trabajan en esa dirección.
La apuesta de la seguridad de la industria farmacéutica está generando inversiones importantes para prevenir el delito y al mismo tiempo, obligada por la legislación penal española, de puesta en marcha de áreas de cumplimiento normativo que ayuden a detectar los riesgos de cada empresa y prevenir el delito
Una operación para combatir la publicidad y venta de medicamentos
La Guardia Civil ha desarrollado esta operación con un enfoque integral de sus capacidades así como con una orientación multidisciplinar mediante la colaboración con diferentes entidades y organismos del ámbito público y privado tanto a nivel nacional como autonómico.
De esta forma han mantenido colaboración con la Administración de Aduanas, el Ministerio de Sanidad, la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), la Agencia Española de Protección de la Salud en el Deporte (AEPSAD) y las Consejerías de Sanidad e Inspecciones de Farmacia de todo el territorio.
Para Colomer “el objetivo principal de esta operación es el de combatir el fenómeno de la publicidad, venta y suministro ilegal de medicamentos, productos sanitarios y dispositivos médicos, en particular los falsificados o no sujetos a licencia a través de Internet”. Y advierte que es un riesgo para la salud de muchos ciudadanos estas prácticas impulsadas desde la delincuencia organizada.
Las principales conductas asociadas a estos ilícitos son: elaboración clandestina, importación ilegal, desvío de medicamentos de los canales regulares de distribución, falsificación de medicamentos y distribución irregular de estos productos.
Todas estas conductas están tipificadas como delitos tanto en el Código Penal español como en la Ley de Contrabando, así como infracciones administrativas contempladas en la Ley de garantías y uso racional de los medicamentos y productos sanitarios y en la normativa complementaria.
Distribución de medicamentos falsificados o ilegales en Internet
De la misma manera se ha comunicado a INTERPOL un total de 88 direcciones de páginas web y anuncios desde donde se publicitan, ofertan o distribuyen ilegalmente medicamentos. Al mismo tiempo se han realizado un total de 15.929 inspecciones en aeropuertos o puertos, como Madrid Barajas, El Prat de Barcelona, Alicante, Bilbao y Puerto de Algeciras
En este marco se han intervenido un total de 70.873 comprimidos, 76 ampollas y 394 sobras de medicamentos falsificados o importados de manera ilícita. Sobre el origen de los envíos se sabe que , Asia es la principal zona de origen de los envíos. Entre los países más destacados figuran China (54,64%), India (40,17%), Tailandia (1’09%), y otros países con porcentajes menores como la Republica Dominicana (0’94%), Argentina, el Principado de Andorra, Panamá, Argelia y Turquía.
A juicio de nuestra jurista, experta en derecho farmacéutico “esta noticia hay que valorarla muy positivamente. Se ha evitado introducir en el mercado de consumo medicamentos falsificados que no suelen estar en buen estado o tener deficiencias respecto de los habituales. Cada vez será más complicado hacerlo porque la industria farmacéutica viene invirtiendo mucho dinero en políticas de prevención”.
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