Ada Colau, alcaldesa de Barcelona, firmó este decreto el pasado martes. EP.
Colau deja a los barceloneses sin poder ver el España-Rusia en pantalla gigante
PESE A QUE NO COSTABA NI UN EURO AL CONSISTORIO
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28/6/2018 19:06
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Actualizado: 28/6/2018 19:06
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El Ayuntamiento de Barcelona, en manos de Ada Colau (Catalunya en Comú), ha denegado la licencia para retransmitir en pantallas gigantes el duelo entre España y Rusia de octavos de final, que se disputará el próximo domingo, a las cuatro de la tarde.
Y lo ha «prohibido» pese a que la organización de este evento no le costaba ni un euro y se celebraba en un espacio de gestión privada.
Así lo ha denunciado este jueves ‘Barcelona con la Selección’. Esta plataforma lleva batallando algo más de dos años para que ‘La Roja’ vuelva a jugar un partido oficial en Cataluña y los duelos del mundial se vean en pantallas gigantes en la Ciudad Condal.
El España-Rusia iban a retransmitirlo en el campo de L‘Àliga, como hicieron con el partido contra Portugal, que se jugó el pasado día 15.
Una imagen de ese día:
Manel Hernández, secretario general de ‘Barcelona con la Selección’, relata a Confilegal que ayer al mediodía recibieron un correo electrónico del gerente del distrito de Gracia, Pere Camps, comunicándole la fatal decisión.
Además, explica que Colau “ha faltado a su palabra”, porque les “prometió no poner impedimentos para instalar las pantallas, siempre que fuese en espacio de gestión privada y sin coste para el Ayuntamiento”.
Indica que tras el duelo España-Portugal había conversado con el director de Promoción y Eventos Deportivos del Institut Barcelona Esports, Gabriel Arranz, sobre cómo gestionar y organizar el partido de octavos.
“Todo para que a última hora nos den el portazo en la cara desestimando la petición de licencia”, señala indignado.
¿Y qué explicación ha dado la alcaldesa? “Ninguna”, contesta este joven.
Destaca que el Consistorio “intenta jugar permanentemente con la ambigüedad política y por esa razón, lejos de dar una respuesta valiente ante la opinión pública, se las ha ingeniado para dejarnos en fuera de juego en el último momento”.
Considera que tras el éxito de la retransmisión del España-Portugal, que llegó a congregar a 4.000 personas, “una alarma se activó en el Ayuntamiento dirigido por Colau: “El temor a que se vea una Barcelona diferente a la que desde el Ayuntamiento desean vender”.
“Y la reacción ha sido prohibir este encuentro”, afirma.
¿Y cuál es la imagen que se quiere evitar a toda costa? “La de miles de jóvenes paseándose con la enseña nacional por Barcelona mientras ella sea la alcaldesa. Tenemos un Consistorio sectario que gobierna sólo para una parte de la población, que, aunque lo niegue o intente ocultarlo, le repele y chirría todo lo relacionado con la palabra España y los colores de nuestra bandera”, manifiesta Manel Hernández.
Además, confiesa apesadumbrado que en la plataforma están “hartos” de las “vejaciones del Ayuntamiento”. Cita, por ejemplo, que hace dos años, “cuando agredieron a dos de sus colaboradoras por promocionar a la selección en la Ciudad Condal, el Ayuntamiento no se personó como acusación particular».
«Y para colmo el teniente de alcalde, Jaume Asens, declaró que no hubieron agresiones, aunque las imágenes grabadas hablan por sí solas”, destaca.
“Los separatistas se acercaron al stand al grito de «putas españolas, fuera de aquí, os vamos a matar», y las agredieron”, rememora Manel.
Además, recuerda que Colau también vetó las pantallas para seguir los partidos de la selección en la Eurocopa de 2016, y encima les impuso una sanción de 12.000 euros por montar una pantalla gigante en Plaza Cataluña.
Sobre este asunto también se ha pronunciado hoy Alberto Fernández, líder del PP en Barcelona.
Lamenta que “una vez más Colau no quiera poner las pantallas, pero tampoco deje que otros lo hagan”. La acusa de “totalitaria y sectaria”.
Asimismo, el ‘popular’ resalta que la alcaldesa “utiliza criterios distintos”. Indica que en 2015 instaló pantallas en plaza Sant Jaume el día de su propia investidura, con cargo al erario público. «En concreto, se gastó 11.940 euros en pantallas y sonido», apunta.
Por otra parte, dice que también permitió a asociaciones independentistas colocar pantallas para que se siguieran los plenos del Parlamento catalán sobre la independencia.
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