Entre Policía Nacional y Guardia Civil, en 2022 se suicidaron 22 agentes
Laura González López, secretaria de Riesgos Laborales y de Igualdad de Jupol, y Sonia Valverde Diego, secretaria de Igualdad de Jucil, analizan en Confilegal este problema y reclaman una serie de medidas urgentes para luchar contra esta grave lacra social que golpea nuestras sociedades. Foto: EP.

Entre Policía Nacional y Guardia Civil, en 2022 se suicidaron 22 agentes

Una media de 20 agentes entre los dos Cuerpos se quita la vida al año, la mayoría con su arma reglamentaria
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26/1/2023 06:50
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Actualizado: 27/1/2023 02:01
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Entre Policía Nacional y Guardia Civil, en 2022 se suicidaron 22 agentes, como ocurrió en 2020, la mayoría con su arma reglamentaria.

En concreto, se quitaron la vida 13 guardias civiles y 9 policías nacionales, según han informado a Confilegal el sindicato Jupol, el mayoritario en el Consejo de la Policía, y Jucil, el mayoritario en el Consejo de la Benemérita.

En 2021 se suicidaron 34 agentes, 17 de cada Cuerpo, un aumento del 54% respecto a 2020 que hizo saltar las alarmas en las dos instituciones de Fuerzas de Seguridad del Estado, ya que fue la cifra más alta de la serie histórica, pese a contar ambos con planes de promoción de la salud mental y de prevención de la conducta suicida.

Un problema que afecta por igual a ambos Cuerpos, y que analizan en este diario Laura González López, secretaria de Riesgos Laborales y de Igualdad de Jupol, y Sonia Valverde Diego, secretaria de Igualdad de Jucil.

Jupol y Jucil -ambas nacidas de Jusapol- y CSIF, sindicato más representativo en las administraciones públicas y con presencia creciente en el sector privado, imparten conjuntamente charlas por todo el territorio nacional sobre el suicidio policial. Justo hace ahora un año, estas organizaciones acordaron un frente común «ante el deterioro de las condiciones laborales de policías, guardias civiles y del conjunto de los empleados públicos».

Jusapol, Jucil, CSIF y Jupol
De izquierda a derecha: Miguel Gómez, presidente de Jusapol; Ernesto Vilariño, secretario general de Jucil; Miguel Borra, presidente de CSIF y Aaron Rivero, secretario general de Jupol. En la imagen, una concentración el pasado 25 de mayo, en Madrid, frente al Ministerio de Hacienda y Función Pública.

Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), la tasa de suicidios entre los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado es de casi el triple que entre la población general.

La Organización Mundial de la Salud estima que aproximadamente 800.000 personas mueren a causa del suicidio al año. 

Los casos de suicido aumentaron en España un 1,6% en 2021, con 4.003 personas que se quitaron la vida, según el informe ‘Estadísticas de defunciones según causa de muerte. Año 2021’, publicado el pasado diciembre por el INE.

En 2021 se produjeron 16.831 fallecimientos por causas externas, 753 más que en el año anterior (un 4,7%), de 10.689 hombres (un 4,2% más que en 2020) y 6.142 mujeres (un 5,5% más).

El suicidio se mantuvo como la primera causa de muerte externa, por delante de las caídas accidentales (con 3.655 muertes y un aumento del 1,4%) y el ahogamiento, sumersión y sofocación accidentales (con 3.504, un 20,3% más que en 2020).

LAS RECLAMACIONES DE JUPOL

«Armeros en las comisarías, acciones de prevención de la conducta suicida y autocuidado emocional», esas son las principales medidas, según Jupol, sindicato liderado por Aarón Rivero, para luchar contra el problema del suicidio policial. Medidas que ya se están llevando a cabo, pero «de forma insuficiente», advierte, Laura González.

Según explica, «hay muchos factores que influyen en estas tristes decisiones, no se debe a una única causa, sino que influyen causas personales, familiares y profesionales, es multifactorial».

Laura González, policía nacional con 12 años de servicio, y secretaria de Riesgos Laborales y de Igualdad de Jupol.

«Estamos ante una profesión con un alto grado emocional y de estrés laboral: el portar un arma de fuego, el tipo de turnos de trabajo, la dificultad de conciliación familiar, la responsabilidad del trabajo policial… Son factores que influyen en la vulnerabilidad. Pero todo ello no es causa única de los problemas de salud mental, porque luego nos encontramos ante perfiles de personalidad concretos y situaciones personales que influyen», argumenta.

«Estrés laboral, función policial, problemas familiares, problemas laborales, divorcios, intervenciones policiales, fallecimientos de familiares, problemas legales y la propia personalidad de la persona», cita como ejemplo de los factores que pueden influir en la conducta suicida.

¿Por qué importa tanto la conducta suicida en las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado? «Por la facilidad de medios (arma), turnicidad (noches, cambios…); alta responsabilidad y consecuencias; ausencia de conciliación laboral y familiar; e indefensión ante órdenes, leyes, penas…», detalla González.

Esta responsable de Jupol destaca que es necesario que se conciencie a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado de la importancia del autocuidado emocional. Medida que, según señala, «se ha empezado a implementar dentro de la prevención del suicidio en la Policía Nacional».

«No podemos meternos en la cabeza de un agente y evitar que se quite la vida, pero sí trabajar las situaciones vividas en las intervenciones y hacer autocuidado emocional», afirma.

Laura González, impartiendo una de las charlas contra el suicidio.

«MUY POCAS COMISARÍAS CUENTAN CON ARMEROS, DEBERÍA HABER EN TODAS»

Además, pide que ambos Cuerpos realicen acciones de prevención dirigidas al colectivo, y que haya armeros en las comisarías para que los agentes depositen en ellos su arma al finalizar el servicio.

«Sólo cuentan con armeros muy pocas comisarías», lamenta. Lo mismo ocurre en la Guardia Civil, declara Sonia Valverde, y hace la misma reivindicación que su compañera.

Sonia Valverde Jucil
Sonia Valverde, guardia civil con 32 años de servicio, y responsable de Igualdad en Jucil.

La Policía Nacional aprobó en noviembre de 2020 un Plan de Promoción de la Salud Mental y Prevención de la conducta suicida en la Dirección General. Entre 2001 y octubre de 2020 se suicidaron más de 160 policías nacionales, de acuerdo a los datos oficiales, siendo 2021 el año con más suicidios.

En septiembre de 2021, coincidiendo con la conmemoración del Día Mundial para la Prevención del Suicidio, también puso en marcha un teléfono de asistencia para atender las necesidades psicológicas de su personal: 915 821 043. Atendido por el equipo de intervención psicosocial durante las 24 horas del día, los 365 días del año, da respuesta a las solicitudes de asistencia y/o apoyo psicológico. 

Jupol han estudiado los perfiles de los compañeros que se han quitado la vida para poder ajustar sus reivindicaciones respecto al Servicio de Prevención de Riesgos Laborales en la Dirección General de la Policía (incluidos policías nacionales y guardias civiles en activo, segunda actividad, retirados y jubilados).

El 98% eran hombres y el 2% mujeres, y en el 90% de los casos se suicidaron con el arma reglamentaria.

«Desde Jupol reclamamos más psicológos para este plan, para realizar más acciones de prevención y atención a los policías», indica Laura González. «Lo ideal sería que hubiese psicólogos en todas las dependencias, lo que facilitaría la atención directa», apunta.

La secretaria de Riesgos Laborales e Igualdad de Jupol recuerda que en paralelo a este plan, su sindicato también cuenta desde la primavera de 2018 con un servicio se atención psicológica las 24 horas, llamado SOS Jupol, que atiende tanto a compañeros como a sus familiares, como el del Ministerio, y realiza acciones de sensibilización en las distintas provincias.

«Los agentes tenemos que concienciarnos de que esta profesión tiene un alto contenido emocional y eso lo que requiere es que tengamos un autocuidado emocional. Esto es una de las cosas más importante para luchar contra esta lacra. De hecho, el plan contra los suicidios de la Policía vela porque sea así, y cuando hay intervenciones complicadas, trabajan esa actuación policial a posteriori para que no genere ningún tipo de consecuencia psicosocial», explica González.

Los perfiles de atención de SOS Jupol corresponden a hombres, de una media de 42 años, con problemas de pareja y por temas laborales que derivan en trastornos de ansiedad.

La asociación Jucil también tiene un teléfono de atención 24 horas frente a este problema, SOS Jucil. Ambas organizaciones comparten los números de atención. Son el 633 722 848 y el 717 003 717.

El perfil del agente que acude a este servicio es el de un varón, de una media de 30 años, que solicita ayuda por problemas de ansiedad.

LAS REIVINDICACIONES DE JUCIL

En la Guardia Civil hay un protocolo para adoptar medidas específicas ante situaciones de naturaleza psiquiátrica, psicológica o ante conductas anómalas que afecten a los guardias civiles, aprobado en la orden general de 19 de julio de 2018, que se complementa con el Plan Preventivo de Asistencia Psicológica (PPAP), vigente desde 2010.

Jucil también reivindica que de manera urgente se revise el Plan de prevención de suicidios.

«Las medidas adoptadas hasta ahora han demostrado que no son suficientes para impedir que haya compañeros que no vean más futuro», señala Sonia Valverde.

Según Jucil, «es necesario modificar los protocolos, facilitar la instalación de armeros en las dependencias y ofrecer todo tipo de ayuda a quienes la necesitan»

Además, reclama que se externalice la ayuda psicológica «como una medida para no estigmatizar a los agentes con problemas psicológicos, de manera que sea más efectivo el protocolo».

«En esta familia nadie lucha solo y nadie debe sentirse nunca tan abandonado como para no encontrar una solución mejor a la que tristemente terminan por tomar», manifiesta el secretario general de Jucil, Ernesto Vilariño.

«Es importante detectar e identificar de manera temprana para poder ayudar a los agentes», insiste Sonia Valverde, y pide que se atiendan las reivindicaciones de ambos Cuerpos de manera urgente.

«Pedir ayuda previene de males mayores», subraya Laura González.

Y a la sociedad le lanza el siguiente mensaje: «Cuando se tiene a un agente delante, hay que saber que es un trabajador que cumple con su labor. El trabajo que realiza es de un alto grado de responsabilidad, que tiene que llevarse a cuestas todos los días. Por tanto, respeto y consideración hacia el trabajo policial».

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