El secretario general de la AUGC, Juan Fernández, detalla las medidas que considera muy necesarias implantar de forma inmediata.
La AUGC reclama medidas urgentes para luchar contra los suicidios en la Guardia Civil: más de 200 agentes se han quitado la vida
Denuncia que los guardias civiles aún carecen de medidas necesarias que ayuden a mantener una adecuada salud mental en sus labores y en su vida diaria
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12/10/2023 06:30
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Actualizado: 12/10/2023 09:21
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La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) advierte que 216 guardias civiles se han quitado la vida en los últimos 17 años, de 2005 a 2022, ambos inclusive, y reclama medidas que fomenten la salud mental dentro del Cuerpo.
Con motivo de la celebración del Día Mundial de la Salud Mental, celebrado el pasado martes, ha destacado la importancia de aplicar medidas efectivas de prevención. Una reivindicación que viene haciendo “desde hace mucho tiempo”.
Esta asociación señala que en los últimos 17 años, desgraciadamente, el suicidio ha tomado el protagonismo en la vida de muchos guardias civiles, y subraya que “ya es hora de que la Dirección General de la Guardia Civil afronte este drama que nos golpea día a día”.
Una media anual de 12 agentes han optado por el suicidio desde 2005 hasta el pasado año, la mayoría con su arma reglamentaria.
La AUGC pide al Gobierno que «prevea» medidas para evitar esta lacra y a la Dirección General que «atienda las necesidades y actúe ante el problema».
Según informa a Confilegal el secretario general de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), Juan Fernández Hernández, este drama incesante golpeó más fuerte en la Guardia Civil en 2005, 2008 y 2021, pero en cada uno de los años que recoge la estadística ha habido que lamentar fatales desenlaces.
Esta problemática afecta por igual a la Guardia Civil y al Cuerpo Nacional de Policía. Una media de 20 agentes en cada Cuerpo se quita la vida al año.
En 2021 se suicidaron 17 agentes de cada Cuerpo, la mayoría con su arma reglamentaria. Más de la mitad no llegaba a los 41 años. Estos datos hicieron saltar las alarmas en los dos Cuerpos, ya que fue la cifra más alta de la serie histórica, pese a contar ambos con planes de promoción de la salud mental y de prevención de la conducta suicida.
«Se trata de una lacra que hay que atajar de todos los modos posibles», destaca esta asociación de guardias civiles, y apunta que lleva insistiendo desde 1994 «para que se aborde de forma urgente, mediante una comisión de estudio multidisciplinar y no únicamente con los mecanismos internos de la Guardia Civil».
Juan Fernández expone que la institución se ha involucrado mejorando el II Plan de Prevención de Conductas Suicidas, vigente entre 2005 y 2009, y también activó un protocolo en 2018 para adoptar medidas específicas psiquiátricas, psicológicas y de conductas anómalas, reforzadas en desde 2010 con el Plan Preventivo de Asistencia Psicológica.
Sin embargo, esta asociación insiste en que «es necesario atajar el problema de todos los modos posibles y sin restarle importancia, postura que ha acostumbrado tradicionalmente la Dirección General de la Guardia Civil».
LAS MEDIDAS QUE RECLAMA
A juicio de la AUGC, es “muy necesario” instalar armeros en todas las dependencias de España, así como implementar ayuda psicológica mediante la externalización del servicio de psicología.
También reclama que se refuerce el número de psicólogos dentro de las Unidades de Prevención de Riesgos, “pero que estos no pertenezcan a la escala de mandos”, así como normalizar los asuntos relativos a salud mental de los agentes.
La AUGC insiste en que el hecho de recibir atención psicológica «tiene que dejar de ser un tema tabú dentro de la Guardia Civil», así como dejar de suponer una mancha en el expediente profesional si trasciende que requieres de atención psicológica. Según asegura, “actualmente, es algo que perjudica ante posibles ascensos o acceso a especialidades”.
Afirma que desde la escala de mandos no deberían tener acceso a este tipo de información de los agentes, ni mucho menos tendría que utilizarse para tales fines.
ESPECIALISTAS AJENOS AL CUERPO
Ante este drama que no cesa, en el que centenares de componentes se han quitado la vida a lo largo de los últimos 17 años, la AUGC subraya que el Protocolo de Conductas Anómalas que se implante no debería limitarse solamente a la retirada del arma reglamentaria por motivos psicológicos.
Esta asociación considera que también es preciso permitir que los agentes puedan seguir su tratamiento con especialistas ajenos al Cuerpo, elaborar un buen protocolo antisuicidios e implantar un plan efectivo de prevención frente este tipo de conductas.
La AUGC hace hincapié en que habitualmente, los guardias civiles experimentan continuadas situaciones conflictivas derivadas de su labor policial que no toda persona es capaz de llevar con normalidad, y que repercuten tanto en el ámbito laboral como el personal “sin la debida comprensión, en ocasiones, de algunos de sus mandos”.
Señala que estas situaciones se suelen agravar, además, con el paso de los años de servicio, donde en cada servicio realizado se encuentran y resuelven determinados problemas que pueden provocar situaciones de tensión y que pueden provocar estados de ansiedad, tristeza, rechazo, etc.
Además, manifiesta que a esto se suma la dificultad para conciliar la vida familiar y laboral ante la “ausencia de turnos fijos de trabajo” -que sí tienen otros Cuerpos Policiales- o los diversos traslados como consecuencia del movimiento de destinos.
La AUGC insta, una vez más, a la Dirección General de la Guardia Civil para que atienda estas demandas y solucione estas necesidades actuando consecuentemente ante este grave problema.
Afirma que para ello, sería necesario analizar cada caso y dar una respuesta individual por personal cualificado y formado al efecto.
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