De izquierda a derecha: Xavier Abat, LawTips y Un Tío Legal, tres abogados con presencia en TikTok.
Xavier Abat, LawTips y Un Tío Legal, tres abogados que en TikTok juntos suman casi 5 millones de seguidores: no todos son bailes
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13/2/2024 02:00
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Actualizado: 13/2/2024 08:38
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TikTok es una aplicación que permite subir vídeos cortos en formato vertical y que comenzó a expandirse en la pandemia. La gente la utilizaba como medio de entretenimiento para poder despejar la mente tras llevar días y días encerrados en casa para combatir el virus.
Los vídeos que se subían eran de recetas, bailes, humor, mascotas o de ideas de juegos para hacer de manera virtual con los amigos. Pero con el paso del tiempo se ha convertido en la cuarta red social más descargada en el mundo y ha permitido que profesionales del Derecho puedan contar a los usuarios de forma sencilla información relacionada con el mundo jurídico.
Xavier Abat, Andrés Millán, más conocido por su apodo de «Lawtips», e Ignacio de la Calzada, alias «Un tío legal», suman entre los tres 4.960.000 seguidores, 1.679.218 personas más que todos los habitantes juntos de Madrid, que juntos suman 3.280.782 personas, según datos de 2024.
Este trío conforman un buen ejemplo.
Xavier Abat: 1,8 millones de seguidores
Xavi Abat, o más conocido como «el abogado de TikTok» empezó subir vídeos legales el jueves 17 de septiembre de 2020, pero se pasó cuatro meses analizando cómo funcionaba la aplicación e informándose mediante vídeos de YouTube.
Su objetivo era divulgar el derecho haciéndolo fácil.
La idea de aterrizar en redes surgió cuando un cliente y amigo al que le había llevado un caso, que era influencer, le recomendó entrar en redes sociales porque era el futuro.
Al principio era muy cauteloso con la idea, pero tras investigar que sólo una persona hacía ese tipo de contenido, que era Andrés, ver cómo lo hacían letrados de otros países, se animó.
Arrancó con la idea de acercar el derecho a las personas, hacerlo fácil y que la gente lo entendiese tras 24 años de carrera profesional. Y aunque en un primer momento iba dirigido a un público joven que incluso le paraba por la calle y le decía que gracias a su contenido querían cursar la carrera de Derecho, con el paso del tiempo se dio cuenta que le seguían adultos.
Habla sobre «tips» legales y consejos, aunque reconoce que comentar temas polémicos como los toros, la amnistía o directamente asuntos políticos le hace perder seguidores.
Los vídeos los graba en dos tandas, por la mañana y por la tarde. Aprovecha incluso cuando está paseando a su perra, pero confiesa que es muy complejo compaginarlo todo. «No he dejado de publicar ningún día, ni estando enfermo, es más complicado de la que la gente piensa”.
Un esfuerzo que se ha visto recompensado económicamente ya que, gracias a su cuenta, recibe un dinero extra. Por un lado, por alguna campaña de publicidad que ha hecho y, también, porque le ha permitido llevar casos de más clientes. «Por visitas, sólo habré recibido unos 3.000 euros».
Pero no lo hace por dinero, lo que más le reconforta es poder ayudar a gente. Desde mujeres que le han enviado mensajes llorando dándole las gracias por un asunto relacionado con un divorcio hasta otros muchos que le han dado las gracias por facilitar documentos gratuitos para reclamar las comisiones abusivas de los bancos.
“Una de ellas me llamó y me dijo que gracias a mi pudo recuperar 700 euros, estaba en bancarrota y un mes más ha podido tirar para adelante”.
Sin embargo, ha recibido críticas de otros letrados. Se reían de él, le menospreciaban y le criticaban a sus espaldas. Le decían que estaba desprestigiando al sector dando asesoramiento gratis. «Pero ahora abres TikTok y hay 25.000 abogados haciéndolo».
LawTips: 2,4 millones de seguidores
Andrés Millán, conocido como “LawTips” comenzó en TikTok en febrero de 2020, justo antes de la declaración del estado de alarma. Descubrió que esta red social era la que más capacidad de crecimiento orgánico iba a tener porque, por aquel entonces, había mucha demanda de contenidos pero muy poca oferta. Sólo había gente haciendo bailes y haciendo humor.
En esa época estaba estudiando el Máster de Acceso a la Abogacía y quería dar pequeñas píldoras de Derecho a la sociedad para ayudarles, por ejemplo, a hacer la declaración de la renta. Sabía que esos vídeos podían funcionar si estaban bien explicados y de forma breve. Ahora, es abogado colegiado, pero cuenta que casi no lleva temas porque al ser socio director y cofundador de un despacho, se encarga de la supervisión y de la captación de clientes.
Vídeos que graba de forma muy rápida sin necesidad de mucha edición para optimizar el tiempo. Para preparar los vídeos, lee los periódicos todos los días y mezcla la actualidad con el Derecho.
A veces, también sube tiktoks más delicado, ya sea de la vacuna del covid o de Derecho Penal, pero explica que tiene que tener cuidado con las palabras que dice porque la propia plataforma censura. «Doy mi opinión también sobre temas polémicos como la ley de amnistía pero para que la gente saque sus propias conclusiones, soy objetivo».
«Disfruto mucho haciendo contenido, me encanta ayudar a mi comunidad en lo que pueda y recibir feedback de ellos. También me ha permitido hacer amigos y más contactos».
Vídeos que son muy bien acogido por muchos, pero muy criticado por otros. Criticas que, según explica Millán, han sido de sus mejores aprendizajes en redes sociales. Le ha ayudado a madurar y a prestar atención sólo a las constructivas.
Y lo mismo con otros abogados. «Cuando empecé decían: mira este crío, ni siquiera es abogado, qué hace hablando de Derecho, está perdiendo prestigio y nadie le va a contratar. Pero ahora, mucha gente que me criticaba se está uniendo a redes sociales muy parecidos a los míos».
Actualmente se gana la vida gracias a las redes. Cuando empezó pasaba algunos clientes que le contactaban al despacho en el que hacía las prácticas. Ahora colabora con un par de marcas, recibe una parte económica de TikTok y, por otro lado, su fuente de ingresos es su despacho de abogados que construyó gracias TikTok.
Un Tío Legal: 760.000 suscriptores
Ignacio de la Calzada, conocido en redes como “Un Tío Legal”, comenzó también en plena pandemia. Los juzgados estaban cerrados, se paró todo, y siempre tuvo la idea de crear un canal de YouTube para explicar a la gente cuestiones tan básicas como saber qué es una nómina, entenderla o leer su contrato.
Consideró que esto hacía falta porque le preguntaba a sus amigos y eran incapaces de saber cuáles eran sus derechos en el trabajo. Además, ello le iba a servir para mejorar su oratoria y refrescar contenidos. Pero nunca pensó que podía llegar hasta el punto actual.
Los temas, al igual que sus compañeros, los elige en función de la actualidad. En su caso, sobre todo, van enfocados al mundo laboral hablando sobre la normativa y sobre abusos que han sufrido sus clientes. “A veces la gente me cuenta cada barbaridad que ni se me había planteado, y como los abusos y engaños no me gustan, pues trato de corregir eso”.
De la Calzada, que es socio de la firma Galant Iuris, con base en Tarragona, recibe mensajes de gente que, gracias a sus vídeos, ha podido negociar con su empresa o han evitado perder sus derechos.
Para que le dé tiempo a todo durante el día, se levanta a las 6:00 horas para grabar un poco por las mañanas donde elabora uno o varios vídeos para dejar en borradores para ese día, o para los siguientes.
Un contenido que compagina con su bufete, donde parte de su trabajo son las asesorías, los juicios y el papeleo. Además, en la empresa cuentan con un equipo que les permite llegar a todo.
Ha notado que con sus vídeos el interés por el Derecho ha aumentado entre los trabajadores.
Aún así, también le llegan mensajes de estudiantes de derecho o relaciones laborales que le cuentan que les ha ayudado o bien a entender la materia o les ha motivado a seguir su futuro profesional al derecho laboral.
Como sus compañeros, también ha recibido críticas. “La finalidad no ha sido jamás hacer publicidad directa, sino difundir, y sin embargo mucha gente del sector critica el uso de estas, incluso hablando de engaños o que lo que decimos es mentira”.
“Obviamente en un video de 30 segundos no se puede explicar con una precisión jurídica impecable alguna cuestión (ni hablamos de conceptos jurídicos) la idea es que al público le quede clara un concepto o idea, y eso hace que exista crítica de profesionales”.
Pero cree que están haciendo un buen trabajo porque la gente está tomando conciencia de sus derecho, y eso le llena mucho.
Respecto a la remuneración, él por sus vídeos de forma directa no ha recibido nada, o una cifra insignificante porque “lo que paga TikTok o YouTube es anecdótico”. Pero sí lo ha notado en el incremento de clientes en el despacho.
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