Fuster-Fabra se persona ante la AN en representación de los policías heridos en los disturbios «terroristas» de Barcelona
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28/9/2024 05:35
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Actualizado: 28/9/2024 08:28
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La firma Fuster-Fabra, especializada en la defensa de cuerpos de seguridad del Estado, se ha personado ante el Juzgado Central de Instrucción 6 de la Audiencia Nacional en representación de dos agentes de la policía nacional, que resultaron heridos en octubre de 2019, por los supuestos delitos de terrorismo. A consecuencia de los graves incidentes que tuvieron lugar en Barcelona tras la sentencia del procés y que organizó Tsunami Democràtic.
Los agentes, miembros de las Unidades de Intervención Policial (UIP) –antidisturbios–, resultaron gravemente heridos el 18 de octubre de 2019, una jornada que supuso el punto más caliente en las protestas tras la condena de los líderes independentistas catalanes por sedición y otros delitos.
Dichos policías nacionales sufrieron brutales agresiones mientras intentaban contener, haciendo su trabajo, a grupos de manifestantes violentos, superándolos en la proporción de 10 a 1.
En los dos escritos presentados, se detalla cómo, tras horas de enfrentamientos, los policías nacionales fueron alcanzados por diversos objetos que les causaron serias heridas, lo que al final les ha inhabilitado para continuar en la Policía.
Estos agentes interpusieron hace 5 días, sendas denuncias contra Tsunami Democràtic, la plataforma independentista que organizó los disturbios de aquel día en Barcelona. En sus escrito alegaban que fueron víctimas de la kale borroka auspiciada por dicha plataforma, a la que acusaron de un presunto delito de terrorismo.
INVESTIGAR LOS HECHOS EN UNA NUEVA CAUSA
Por ello, solicitaron que la Audiencia Nacional, único órgano competente en el territorio nacional para investigar los delitos de terrorismo, abriera una nueva causa, distinta de cualquier otra anterior, para que se investigara lo sucedido aquel día.
La lógica de estas denuncias se basa en el hecho de que si bien la Sala de lo Penal anuló todo lo investigado por el Juzgado Central de Instrucción 6 de la Audiencia Nacional, del que era titular el magistrado Manuel García Castellón, por haber prorrogado la investigación de la causa el 30 de julio de 2021 –24 horas fuera de plazo–, lo cierto es que los dos policías se personaron como acusación particular en la causa 2 años y cuatro meses después; 28 meses más tarde.
Los dos policías nacionales consideran que existe base legal suficiente para que la Audiencia Nacional investigue los hechos –de clara naturaleza terrorista–, de forma nueva y autónoma, y al margen de la causa archivada.
Por lo tanto, procede legalmente. reactivar la investigación.
José María, Juan Ignacio Fuster-Fabra y José Carlos Velasco ya representaron a los dos policías nacionales en aquella causa. Ambos argumentan ahora en sus escritos de personación que los hechos deben ser investigados bajo la tipificación de delitos de terrorismo.
Los disturbios que estallaron en Barcelona, según los escritos, a los que ha tenido acceso Confilegal, no fueron simples protestas, sino ataques organizados por grupos radicales que buscaban desestabilizar el orden público mediante el uso de violencia extrema.
Los abogados sostienen que estos grupos, a los que Tsunami Democratic dirigía y coordinaba, utilizaron tácticas y medios coordinados, como explosivos caseros y objetos peligrosos, que ponen de manifiesto su intención de causar el mayor daño posible tanto a las fuerzas de seguridad como a terceros.
En este sentido, la Fiscalía ya había emitido un informe en 2023, afirmando que los actos violentos sufridos por los agentes podían ser calificados como terrorismo. La Audiencia Nacional compartió esta visión en un auto del 6 de noviembre de 2023, que se adjunta al escrito de personación presentado por el bufete Fuster-Fabra.
LOS HECHOS
El relato de los hechos expuesto en los escritos detalla la escalada de violencia el 18 de octubre de 2019. Los manifestantes, inicialmente pacíficos, comenzaron a retirarse para dar paso a grupos más radicales, vestidos de manera uniforme y armados con objetos peligrosos.
Estos grupos lanzaron piedras, botellas llenas de ácido y otros objetos contundentes con el objetivo de causar el mayor número de heridos posible, al estilo kale borroka, que es considerado por la jurisprudencia terrorismo callejero.
Este caso es de gran relevancia tanto para los Cuerpos de Seguridad del Estado como para la justicia española. El hecho de que los disturbios se investiguen como posibles actos de terrorismo subraya la gravedad de lo sucedido en Cataluña tras la sentencia del procés.
Además, el caso pone de relieve la vulnerabilidad de los agentes que, en situaciones de gran tensión, se ven enfrentados a la violencia extrema de grupos organizados.
La personación del bufete Fuster-Fabra busca que se haga justicia para estos dos policías heridos en el cumplimiento de su deber.
Los abogados insisten en que es fundamental identificar y castigar no solo a los autores materiales de los ataques, sino también a aquellos que los planificaron.
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