La SALA DE APELACIÓN DE LA AUDIENCIA NACIONAL comenzará a funcionar en 2016
El viejo edificio de la Audiencia Nacional (AN), rehabilitado y reconvertido en otro nuevo, ya cuenta en su interior con los despachos para magistrados, y la sala de reuniones, que conformarán la nueva Sala de Apelación. Comenzará a funcionar a principios de 2016.
Así, trece años después, se hará realidad la modificación de la Ley Orgánica del Poder Judicial (LOPJ) de 2003, resolviendo la controversia surgida por la resolución de 20 de julio de 2000 del Comité de Derechos Humanos de naciones Unidas en la que se mantenía que el actual sistema de casación español vulneraba el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos.
Como dice el dicho, «más vale tarde que nunca».
La Sala de Apelación será competente en los recursos que se presenten contra las resoluciones de la Sala de lo Penal de la AN, tal como establece el artículo 64 bis de la LOPJ.
Según ha podido saber Confilegal de fuentes del Ministerio de Justicia, la plantilla estará formada por tres magistrados, un secretario judicial y un número indeterminado de funcionarios.
«Desconocemos el número de sentencias de la jurisdicción penal que serán apeladas. No sabemos si serán apeladas todas, la mitad o una minoría. Esto condiciona, como es logico, la asignación de recursos humanos. El sentido común nos dice que debemos dar un tiempo de rodaje y en función de los resultados, ajustar esos recursos», explicaron las citadas fuentes.
Hasta ahora, la segunda instancia penal no existe para las sentencias de la jurisdicción penal de la Audiencia Nacional. Los condenados apelan al Tribunal Supremo, en lo que se convierte ‘de facto’ en un recurso mixto de apelación-casación que Naciones Unidas no considera válido.
La implantanción -finalmente- de esta Sala acaba con esa anomalía en nuestro sistema.
En 2016 los condenados podrán apelar, primero, ante esta Sala, y, después, si así lo consideran, ante el Tribunal Supremo, en casación, reduciendo, en consecuencia, la complejidad y la carga de trabajo, al alto tribunal.
La selección de los magistrados de esta nueva Sala de Apelación es competencia del Consejo General del Poder Judicial, que se guiará por la antigüedad en el escalafón y la especialidad y experiencia de los magistrados que lo soliciten.
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