Foto de familia de Hogan Lovells Europa; Lucia Lorente tercera por la izda.; en el centro, con gafas, el CEO Mundial Steve Immelt, a su lado Burkhart Goebel, socio director de Europa Continental. Al final, a la derecha, Lucas Osorio, director de la oficina de Madrid.
El despacho multinacional Hogan Lovells analiza su modelo de gestión global en una «cumbre europea» interna en Madrid
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22/9/2016 06:55
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Actualizado: 22/9/2016 07:49
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Hoy jueves concluye la “cumbre europea” que el despacho multinacional Hogan Lovells ha celebrado en Madrid durante dos días con la presencia del Ceo Mundial Steve Immelt. Europa continental y sus catorce oficinas generan más de 1600 millones de euros al año a este bufete global.
Reunión al más alto nivel en Madrid, una de las oficinas estrellas del despacho internacional en Europa a la que están invitados socios directores de todas las oficinas del Viejo Continente y los ‘seniors partners’ (socios seniors) La idea analizar el modelo de gestión del despacho y ver qué cambios se van a introducir para seguir siendo competitivos.
En Madrid, están radicados Burkhart Goebel, socio director de Europa Continental de Hogan Lovells, Lucía Lorente, ‘chief operating officer’, responsable de Operaciones de las citada catorce oficinas.
El peso de esta oficina es evidente. Las cuatro oficinas alemanas, la francesa y la española supone el 75 por ciento de la facturación de Europa Continental.
Para Burkhart Goebel, esta reunión se enmarca “dentro del plan de management de nuestra región. Una vez fijados los objetivos globales a alcanzar en 2018, los asistentes a este encuentro de trabajo comentarán las áreas clave a desarrollar y acciones concretas a llevar a cabo para alcanzar dichos objetivos globales en nuestra región”.
Desde su punto de vista, “el foco central del encuentro de este año es profundizar en nuestra cultura de «high performance» (alto rendimiento) que implica ir más allá de alcanzar objetivos puramente económicos. Se trata de que nuestra cultura impregne todas las áreas del negocio (sea recursos humanos, servicio al cliente, marketing…) sacar lo mejor y hacerlo tangible y concreto a través de determinados proyectos clave”.
En opinión de Lucia Lorente, “es importante que una región como Europa tenga la capacidad de adaptarse a todos los proyectos clave que se deciden a nivel global”.
En el 2014 Hogan Lovells en esta región alcanzó 1.579 millones de euros en 2014, a través de sus 14 oficinas, 184 socios y más de 1.600 profesionales.
En este encuentro en la capital de España se han abordado diferentes cuestiones. “Estamos en la transición de pasar de las áreas de práctica a sectores industriales. Detectamos que el cliente pide más cercanía y que conozcas muy bien su negocio y el sector en el que se desenvuelve”, cuenta Lorente.
En Europa Continental hay muchos clientes clave de Hogan Lovells. Se trata de mantener el mismo nivel de excelencia como hasta ahora.
Lorente nos revela que una de las preocupaciones que hay en la cúpula del despacho es mantener la cultura propia del despacho adaptándola a los nuevos tiempos.
“Es fundamental que se entiendan nuestros valores en cualquier lugar del mundo. Si el profesional la hace suya las fugas de talento son escasas”, destaca.
Se trata de conceptos globales de organización y estructura que el abogado debe ver como asumibles.
Hablar de cultura en Hogan Lovells es hacerlo para la directora para Europa de Operaciones de “inovacion, colaboración, disciplina y por supuesto diversidad e integración, como conceptos que la definen”. Sobre los millennials o generaciones más jóvenes señala que es importante que “entiendan y compartan nuestra cultura corporativa”.
La firma ha puesto en marcha programas para nuevos abogados en Londres para que se conozcan dichos valores.
NUEVOS TIEMPOS EN LA ABOGACÍA
Nuestra interlocutora es consciente que los tiempos han cambiado en la abogacía. Que el abogado quiere encontrar un trabajo que no le absorba todo el día.
“Una de las claves de la retención del talento es que las personas encuentren su sitio. Y ese sitio sea el adecuado para que puedan trabajar a gusto”. Para Lorente, la transparencia es clave en esta organización “ la cultura que contamos es la que tenemos realmente”, aclara.
Desde Hogan Lovells se han puesto en marcha programas de conciliación que ayuda a trabajar de manera más flexible, “las actividades Agile Working son una iniciativa del propio CEO Mundial, Steve Immelt, y de su Consejo de Administración. Ya están implantadas en todas las oficinas de la firma a nivel internacional”. Para esta jurista el nivel de compromiso en una firma dependen “de que se encuentren a gusto en ella”.
A su juicio, el presencialismo ya no funciona a nivel nivel “ni de socio ni cuando eres junior. Nuestro objetivo es que estos programas cuajen en nuestras oficinas gracias a que se pongan en marcha también medidas complementarias que ayuden a su realización”.
Los profesionales de la firma disponen de un ordenador portátil lo que les ayuda a trabajar desde cualquier lugar.
En su opinión, el desarrollo de la tecnología en los despachos de abogados hay que verlo “como un elemento valioso que nos ayuda a ser más competitivos. Me cuesta pensar que podrá sustituir el trabajo del abogado a medio plazo, tal y como se indica en el debate abierto sobre este asunto”.
Lucía Lorente advierte que siempre existirá la relación de confianza entre abogado y cliente pese a los cambios tecnológicos que se avecinan.
Como elemento clave de gestión, la firma internacional ha hecho suyo la gestión de proyectos o Legal Project Management “llevamos trabajado en ello. Todos los profesionales deben pasar por una formación online obligatoria para que conozcan esta práctica. Ya hay un responsable ubicado en París, responsable de gestión de proyectos para la región europea”.
Es un cambio importante que pretenden asumir en todas las áreas de negocio del despacho.
“Ayuda a mejorar la relación con el cliente porque genera mucha transparencia entre el despacho y la empresa. Es un elemento que incrementa la comunicación entre ambas partes”, concluye.
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