Paul Jenkins, socio director global de Ashurst y María José Menéndez, socia directora de la firma en España.
Ashurst alcanza los 610 millones de euros en el 2016 por su apuesta en gestión
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03/7/2017 04:58
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Actualizado: 03/7/2017 01:05
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La firma internacional de abogados Ashurst alcanzó los 610 millones de euros (541 millones de libras) en el ejercicio cerrado el pasado 30 de abril de 2017, un 7% más frente a 505 millones de libras (570 millones de euros en 2016). El beneficio medio por socio de cuota fue de 758.000 euros (672.000 libras, un 11% más que en 2016, frente a 603.000 libras en 2016) .
La oficina española con María José Menéndez, como socia directora, facturó sobre los 22 millones de euros, cifra similar a la del año pasado.
La valoración de estos resultados por parte de Paul Jenkins, socio director global de Ashurst, desde hace un año es la siguiente: «Hemos observado un sólido rendimiento de la firma a nivel mundial, que se traduce en ingresos superiores y mayor rentabilidad. Se trata de unos resultados muy positivos teniendo en cuenta el contexto actual de incertidumbre económica y política existente en muchos de los mercados en los que estamos presentes”.
Desde la llegada de Jenkins a la dirección mundial de Ashurst hay dos palabras que se han venido escuchando en todas veinticinco oficinas del bufete internacional” ingresos y rentabilidad”. como colofón de una nueva estrategia de gestión del despacho. María José Menéndez, socia directora de la firma en España lo explica” este último año fue irregular para la firma, “la falta de un gobierno estable frenó muchas operaciones lo que hizo que la facturación sea similar aunque la rentabilidad por socio haya crecido bastante”, aclara.
Las previsiones para este 2017 son las de crecer, “el año desde enero está yendo bastante bien y creemos que la facturación se podrá incrementar en unos tres puntos. Lo importante es que el al crecimiento en volumen vaya aparejado otro en productividad”. El despacho a nivel global ha aligerado sus estructuras paralegales en todas sus oficinas lo que luego repercute en las cifras finales” comenta la socia directora de Ashurst en España.
En este contexto Menéndez nos explica la filosofía de Jenkins para Ashurst “la eficiencia es un elemento muy a tener en cuenta en este despacho internacional desde sus propios procesos internos y hemos procurado economizar los recursos realmente en temas que fueran productivos. También lo hemos hecho en la oficina de Madrid y eso nos ha provocado un resultado muy bueno a nivel de rentabilidad por socio”, indica.
Apuesta decidida por la gestión
En este año también se han centralizado los procesos de gestión a nivel de software del propio despacho. Menéndez explica que “la firma hace tres años era dos firmas, una en Australia y otra en Europa y América que acabaron integrándose. Este último año hemos logrado ya la unificación plena en un nuevo sistema que ayuda a modernizar la firma, tanto a nivel de captura de información como de seguimiento de clientes”. Ahora la consigna es trabajar en aquello que sea productivo realmente y que el cliente lo note al final.
Para Jenkings el crecimiento del despacho se ha centrado sobre todo en nuestras áreas de práctica de desarrollo y financiación de proyectos y litigación. Nuestra práctica de operaciones corporativas ha sido especialmente fuerte en la región de Asia-Pacífico y, además, hemos sabido aprovechar la recuperación de los mercados financieros de productos estructurados”. Esos resultados se han visto sobre todo en Australia y en China que además, se han visto reforzados por un trabajo excelente en Oriente Medio.
Respecto a Europa, Menéndez comenta que la penetración de la firma en cada país en el que estamos presente es diferente “la posición de Madrid es diferente a la de Alemania, donde es un mercado diferente con firmas locales más potentes y donde el despacho aún no ha crecido todo lo que debiera. Eso hace que la firma se adapte al momento que vive y que intente mejorar su posicionamiento con estrategias diferentes”.
La oficina de Madrid se abrió en enero de 2001 y actualmente cuenta con alrededor de 60 abogados, de los cuales catorce son socios.
Desde su fundación, esta oficina ha asesorado a clientes nacionales e internacionales de los principales sectores económicos en numerosas operaciones empresariales y financieras. “El despacho es un ente vivo en permanente cambio y tienes que estar dispuesto a ver todo con ojos nuevos, sin dar por sentado nada. El uso de la tecnología y las mejoras internas introducidas por el Ceo Mundial nos tienen que ayudar a seguir creciendo”, apunta su socia directora en la capital de España.
Brexit puede generar negocio
En cuanto al Brexit, las últimas noticias parecen haber cambiado las negociaciones entre Reino Unido y la UE “lo cierto y real es que no hay datos objetivos nuevo sobre cómo van a ser los términos de la salida. La preocupación sobre el tema sigue ahí. De todas formas trabajo no va faltar si los despachos saben posicionarse en este contexto. Lo peor es la incertidumbre que hay que puede frenar algunas operaciones de interés”, subraya Menéndez.
Sobre las áreas en las que Ashurst es un despacho importante, nuestra interlocutora destaca las prácticas de “corporate y M&A, operaciones empresariales y financieras, también en el área de resolución de disputas y arbitraje y en la práctica de financiación de proyectos, lo que nos permite entrar en sectores donde se realizan este tipo de operaciones de infraestructura o energía donde hay mucha actividad. Y en servicios financieros, regulatorio financiero está muy desarrollada. En España somos líderes en seguros y en sus operaciones corporativas y asesoramos a fondos internacionales de inversión que al final operan en diferentes áreas”.
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