Fallece la presidenta del CTBG, Esther Arizmendi.
Muere Esther Arizmendi, presidenta del CTBG, “defensora de los intereses de los ciudadanos”
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20/11/2017 06:00
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Actualizado: 20/11/2017 14:11
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En la madrugada del sábado al domingo fallecía Esther Arizmendi, de 61 años, presidenta del Consejo de la Transparencia y Buen Gobierno (CTBG), tras una larga enfermedad, como señala un comunicado de dicha institución.
Una ferviente defensora del servicio público y de los intereses de los ciudadanos, según algunos de los expertos que CONFILEGAL consultaba a la hora de preparar esta información.
En ese comunicado del propio Consejo se indicaba que «con la muerte de la presidenta se pierde una de las figuras que más ha luchado por la transparencia pública en nuestro país. Quienes la conocieron saben de su compromiso con el servicio público, su lucha ante las adversidades, su espíritu combativo, su humanidad y la cercanía con la que trataba a todos y todas»
Arizmendi presidía el consejo desde el 12 diciembre de 2014, cuando fue nombrada por un periodo de cinco años a propuesta del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, órgano al que está adscrito el CTBG, tras haber desempeñado cargos como funcionaria tanto en la administración local como autonómica y ministerial.
Licenciada en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid y técnico superior de la Administración Civil del Estado desde 1982, hace cinco años fue nombrada directora general de Modernización Administrativa, Procedimientos e Impulso de la Administración Electrónica y fue también ponente de la Comisión para la Reforma de las Administraciones Públicas como presidenta de la Subcomisión de Simplificación Administrativa, hasta su nombramiento para el organismo de transparencia.
Arizmendi fue asesora del Secretario de Estado de Política Territorial y directora general de Modernización Administrativa, Procedimientos e Impulso de la Administración Electrónica. Antes de la creación del Consejo de Transparencia, fue ponente de la Comisión para la Reforma de las Administraciones Públicas (CORA) y presidenta de la Subcomisión de Simplificación Administrativa.
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, lamentaba el fallecimiento de Esther Arizmendi, a la que consideraba «una mujer valiente» que trabajó «siempre con firmeza y pasión».
En un telegrama difundido por Moncloa, Rajoy traslada, en nombre del Gobierno, su «más sincero pésame y afecto» a la familia y amigos más allegados de Arizmendi, que ha fallecido «tras una larga lucha contra la enfermedad», según ha informado este domingo el organismo público que presidía.
También portavoces de diferentes partidos políticos daban el pésame a la familia de la fallecida y destacaban su trabajo en pro de impulsar la transparencia en nuestro país.
Una gran pérdida
Colaboradores más cercanos como Carlos Balmisa, director Departamento Control Interno de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), destacaba a Esther Arizmendi “ como sutil jurista sabía que la trasparencia no gozaba de la posición privilegiada que nuestra Carta Magna le otorga a otros principios, pero lejos de aquietarse se rebelaba frente a tal premisa hasta tal punto que nos lo creímos”.
Nuestro interlocutor recuerda “de cómo hablaba con una ternura ya casi inconcebible del derecho a saber y a estar informado de forma que uno pensaba en ello como un apéndice del derecho a la vida, incluso al honor, de manera que solo puedes vivir plena y dignamente si estas suficientemente informado”.
Y subraya que “agradecemos tu sacrificio por la transparencia, quedará indeleble en nuestra memoria, y, esperamos que pronto figure en el capítulo de oro de nuestra Carta Magna. Para los que te conocimos nos queda la obligación de contar a las generaciones venideras lo que hiciste, era tiempo de actos heroicos y luchaste, luchaste”.
Por su parte, Jesús Lizcano, presidente de Transparencia Internacional España , revela que “ con el fallecimiento de Ester Arizmendi desaparece una persona que ha trabajado intensamente por el impulso de la transparencia en España, con un innegable dinamismo y perseverancia, y con un fehaciente nivel de independencia respecto al poder político y los cargos públicos, lo cual ha sido muy de agradecer en el tiempo que ha estado al frente del Consejo de Transparencia y Buen Gobierno» .
Sobre su principal contribución como profesional destaca “su colaboración con las instituciones que pedían/pedíamos apoyo al Consejo frente a aquellas entidades que no eran transparentes y no nos proporcionaban la información que les pedíamos desde la sociedad civil o desde la ciudadanía”.
Fallece Lady Transparencia
Otro testimonio es del de Rafael Ayala, consultor en modelos de gobierno abiertos y editor del blog gobiernotransparente.com, que escribe consternado sobre la pérdida de Esther Arizmendi. Se encuentra en Buenos Aires para seguir la semana del gobierno abierto y de la cumbre regional de la OGP en Argentina.
“Para mi Esther Arizmendi no solo era una alta funcionaria del Estado, profesional y apasionada por lo público que quería cambiarlo desde dentro. Era ante toda una creyente en la Administración y sus obligaciones para los ciudadanos. Cercana y admirable por su fuerza a la hora de ganarse el respeto de otros comisionados y consejos regionales de transparencia, consiguió conformar un equipo de primera en defensa del derecho de acceso”.
Tambien destaca que “supo darnos a todos nuestro lugar, nos recibió y nos apoyó. Desde la sociedad civil nos abrió la puerta del Estado en mayúsculas. Las puertas abiertas del Consejo ha sido uno de los gestos más valerosos y reconocibles de su misión. Lo tenía claro Esther, cuando te recibía y escuchaba, dándote siempre consejos con su prudencia y experiencia. Pero Arizmendi, lo deja todo bien atado.”.
Y revela que el futuro Consejo es “luchador e independiente, un equipo de primera con Javier, Esperanza, Petra, Enrique, Cristina… un prestigio que perdurará años y un saber estar de una institución fuerte que impregno de su carácter indomable. Sí, nos ha dejado Lady Transparencia, se ha ido Arizmendi, la Gran Dama de la Adminsitración española pero quedamos muchos que la recordaremos y seguiremos su ejemplo. Hasta luego querida Esther”.
Otra de las opiniones es la de German Granda, director general de Forética, entidad volcada en la responsabilidad social corporativa y su fomento. Sus declaraciones son para el “ reconocimiento al legado que deja Esther Arizmendi en la búsqueda de la transparencia y el buen gobierno para mejorar las organizaciones y la vida de las personas. Esther nos apoyó en el CLUSTER de transparencia de Forética y siempre estaba abierta a colaborar. Así la recordaremos, siempre comprometida”.
Para Rafael Camacho, politólogo, experto en transparencia y Premio Novagob 2017 quien advierte que “Hoy se nos ha apagado una luz. No conozco el caso de muchos cargos públicos a los que se les empezara a echar de menos en mitad de su mandato, y Esther posiblemente sea una de las pocas excepciones”.
En su opinión hay que valorar, “de Esther y su equipo su compromiso con la transparencia, su valentía y su valiosa labor en los primeros años de andadura del CTBG. Y recomienda un artículo de la propia Arizmendi post de su blog en El Huffington Post, “ Por sus actos los conoceréis donde hablaba de la importancia de la transparencia. Y justamente, por sus actos se la ha reconocido, a ella y a su equipo.
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