Sobre estas líneas, el edificio de los Juzgados de Vigo, que alberga al Penal 1, donde tuvo lugar este juicio.
El abogado juzgado por supuestamente calumniar a un juez se despachó a gusto en la vista oral en su derecho a la última palabra
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16/4/2021 12:11
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Actualizado: 16/8/2023 12:13
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Fue justo antes de acabar la vista oral en la que acababa de estar siendo juzgado por supuestas calumnias contra juez dune Instrucción de Vigo. En el ejercicio del derecho a la última palabra –tal y como recoge el artículo 739 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal–, ante la titular del Juzgado de lo Penal 1 de esa ciudad.
Contra todo pronóstico, el abogado Raúl V. no solo no se retractó sino que se ratificó en sus acusaciones contra el magistrado, del que dijo que había actuado por «una triste venganza».
Y por ello «las pagó conmigo y me amenazó», afirmó el letrado, como bien cuenta La Voz de Galicia.
El abogado respondía ante la Justicia por las palabras escritas en un escrito de apelación ante el juez del Juzgado de Instrucción 2 de Vigo, que, en 2013, investigaba por supuesta estafa procesal a la exmujer de su cliente, un estudiante de Derecho.
En dicho escrito de apelación, presentado en 2015, Raúl V. había –presuntamente– acusó veladamente al magistrado de ayudar a la sospechosa. También de ser no haber sido imparcial e ignorante y le atribuyó un delito de prevaricación.
Durante el ejercicio de su derecho a la última palabra, Raúl V. se vio interrumpido por la representante del Ministerio Fiscal –quien había solicitado como condena la imposición de una multa de 5.400 euros por la comisión del delito de calumnias– para sugerir a la magistrada del caso que quizá estaban siendo testigos de la perpetración de un nuevo delito.
Sus palabras no frenaron al abogado.
«Pido que se nos tenga respeto [a los abogados], yo era consciente de lo que escribía; cuando nos pasa a nosotros, cuando hablan el secretario o el juez, nos tenemos que callar», afirmó.
Subrayó que el día que fue denunciado «apareció el fiscal», cuando el Ministerio Fiscal nunca van a estos actos.
La magistrada, llegada a ese punto, le advirtió: «No siga en esta dinámica, lo que hace, salpicar a todo mundo, no vale para desviar las culpas».
Y repitió sus palabras: «Dijo usted que actuó conscientemente…».
Traducido: usted es un abogado en ejercicio y conoce la ley, conoce la trascendencia de sus palabras y lo que puede conllevar.
Al comienzo de la vista oral la abogada del acusado presentó un documento al tribunal en el que se informaba que el acusado había presentado una querella contra el juez de instrucción, con el objetivo de aplazar el juicio.
La Fiscalía estudió el documento, consultó y concretó que dicha querella había sido presentada días antes de la celebración de esa vista, por lo que la magistrada acordó continuar con el procedimiento.
En su informe final, la abogada defensora solicitó que a su cliente se le tuviese en cuenta la atenuante de dilaciones indebidas.
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