Fernando Rodríguez Rey sucede a Campos como fiscal de Sala delegado de delitos económicos
Fernando Rodríguez Rey ingresó en la Carrera Fiscal en 1991 y estuvo destinado en la Fiscalía de Barcelona, siendo delegado de la Fiscalía Anticorrupción y delegado de Extranjería, en septiembre de 2018 fue designado fiscal de Sala jefe de la Secretaría Técnica, cargo que ostentó hasta marzo de 2020, quedando adscrito a la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo. Foto: Marisa del Valle

Fernando Rodríguez Rey sucede a Campos como fiscal de Sala delegado de delitos económicos

Hasta su nombramiento, el pasado martes, ejercía como fiscal de Sala delegado para los delitos de odio y contra la discriminación
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07/7/2022 08:50
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Actualizado: 08/7/2022 07:38
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El fiscal de Sala delegado de delitos de Odio y Discriminación Fernando Rodríguez Rey (León, 1965) ha sido designado como fiscal de Sala delegado de delitos económicos, materia cuya delegación de la fiscal general del Estado estaba a cargo de Juan Ignacio Campos Campos, hasta su inesperado fallecimiento en diciembre de 2021.

El decreto del nombramiento está fechado a 5 de julio.

La fiscal general del Estado, Dolores Delgado, destaca en su resolución que Campos desempeñó las labores propias de dicha especialidad «con particular dedicación y brillantez».

Indica que dada la importancia de la materia, resulta «inaplazable» atribuir esta última delegación a quien sea «conocedor de la especialidad y de sus implicaciones en la actividad diaria de las secciones especializadas repartidas por buena parte de las fiscalías territoriales», y manifiesta que Fernando Rodríguez Rey dispone de los conocimientos especializados necesarios, según acredita su trayectoria profesional.

La delegación ahora atribuida «mantiene el contenido y los términos en los que se venía desarrollando hasta este momento», ello sin perjuicio de que, en su desarrollo futuro, puedan la fiscal general del Estado y el propio fiscal designado introducir las novedades que consideren necesarias.

A fin de evitar una sobrecarga en el reparto de trabajo del que es destinatario Rodríguez Rey, se deja sin efecto la delegación de la que era titular hasta ahora como fiscal de Sala delegado para los delitos de odio y contra la discriminación, competencia que, provisionalmente, recupera la fiscal general del Estado a fin de determinar, una vez entre en vigor su inminente nueva configuración legal, los perfiles futuros de la referida especialidad.

‘JURISTA DE GRAN CAPACIDAD DE TRABAJO, DEDICACIÓN Y FORMACIÓN TÉCNICO-JURÍDICA, SIEMPRE CERCA DE LOS MÁS VULNERABLES’

Fernando Rodríguez Rey, miembro de Unión Progresista de Fiscales (UPF) y exvocal del Consejo Fiscal, se licenció en Derecho por la Universidad de León en 1988 e ingresó en la Carrera Fiscal en 1991.

Su primer destino fue la Fiscalía Provincial de Barcelona, donde estuvo destinado entre 1991 y 1992, hasta que fue destinado a Badalona, volviendo en 1996 a ocupar una plaza en la Fiscalía de la Ciudad Condal.

En 2008 fue nombrado delegado de Extranjería en Barcelona y en 2012 en Cataluña, cargo que desempeñó hasta septiembre de 2018, cuando fue designado fiscal de Sala jefe de la Secretaría Técnica, sustituyendo a José Miguel de la Rosa, quien se incorporó entonces a la Fiscalía del Tribunal Supremo.

Rodríguez Rey ostentó ese cargo hasta marzo de 2020, quedando adscrito a la Sala de lo Penal del Alto Tribunal.

Fernando Rodríguez Rey, en su toma de posesión como fiscal jefe de la Secretaría Técnica, el 17 de septiembre de 2018. Foto:
María Luisa del Valle
Tomando posesión como fiscal jefe de la Secretaría Técnica, teniendo como padrinos a Pedro Crespo Barquero, entonces fiscal jefe de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo y actualmente fiscal de Sala ante el Tribunal Constitucional, y Lourdes Rodríguez Rey, entonces fiscal superior de Castilla y León y ahora fiscal del Supremo.

En su toma de posesión como fiscal jefe de la Secretaría Técnica, la entonces fiscal general del Estado, María José Segarra, destacó la labor que Rodríguez Rey llevaba desarrollando desde que ingresó en 1991, especialmente los casos relacionados con la delincuencia económica, “todos ellos resueltos con brillantez”, y subrayó que es “un jurista de gran capacidad de trabajo, dedicación y formación técnico-jurídica», que ha manifestado «una sensibilidad social en cuestiones que exigen destreza y comedimiento, siempre cerca de los más vulnerables”.

Rodríguez Rey, en la clausura el pasado 17 de junio del I Curso en Delitos de Odio organizado por el Centro Universitario de la Guardia Civil, que ha contado con la participación de fiscales de criminalidad informática y delitos de odio; en la que el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, abogó por la especialización y formación de los efectivos policiales para reforzar la lucha contra los delitos de odio.

Su nombramiento ya ha sido comunicado a la teniente fiscal de la Fiscalía del Tribunal Supremo, María de los Ángeles Sánchez Conde; al presidente del Consejo General del Poder Judicial, Carlos Lesmes; la ministra de Justicia, Pilar Llop; la fiscal de Sala jefa de la Sección Penal de la Fiscalía del TS, Pilar Fernández Valcarce, y a la fiscal jefa de la Inspección Fiscal, María Antonia Sanz Gaite.

El artículo 22.3 del Estatuto Orgánico del Ministerio Fiscal (EOMF) establece que el fiscal general del Estado podrá delegar a los fiscales de Sala funciones relacionadas con la materia propia de su competencia. Los fiscales de Sala delegados asumirán dichas funciones en los términos y con los límites que establezca el acto de delegación, que será revocable y en todo caso se extinguirá cuando cese el fiscal general.

La Instrucción 1/2015, sobre algunas cuestiones en relación con las funciones de los fiscales de Sala Coordinadores y los fiscales de Sala Delegados, desarrolla el régimen de la actividad de unos y otros.

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