“¡Sánchez dimisión!”, “¡Sánchez a prisión!” y "¡Gobierno dimisión!" fueron los gritos más repetidos de los asistentes.
Decenas de miles de personas abarrotan el centro de Madrid pidiendo la dimisión del Gobierno de Sánchez
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21/1/2023 15:14
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Actualizado: 21/1/2023 18:08
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Estaba previsto que el acto, muy simple y directo, empezara a las 12.00 de la mañana pero se demoró hasta las 12.20, un momento en el que la Plaza de Cibeles de Madrid y sus vías aledañas –la calle de Alcalá hasta la Plaza de la Independencia y casi hasta el Metro Sevilla, y el Paseo de Recoletos, en ambas direcciones, hacia Colón y hacia Atocha– estaban completamente abarrotadas.
Un periodo de tiempo en el que las organizaciones convocantes, Foro España Cívica y Fundación Foro Libertad y Alternativa, con el apoyo de un centenar de asociaciones, amenizaron con canciones clásicas, como «Mi querida España», de la desaparecida Cecilia, «Libertad sin ira», de Jarcha, «Mediterráneo», de Joan Manuel Serrat, entre otras, y para terminar, «Soy español», de José Manuel Soto.
Decenas de miles de personas, que Delegación de Gobierno cuantificó en 30.000 –500.000, según los organizadores–, abarrotaron un espacio muldialmente conocido por ser en el que el Real Madrid suele celebrar sus triunfos. Esta vez vez fue con un sentido completamente contrario.
“¡Sánchez dimisión!”, “¡Sánchez a prisión!” y «¡Gobierno dimisión!» fueron los gritos más repetidos de los asistentes entre un mar de banderas nacionales que nacían en los cuatro puntos cardinales de la manifestación y que se transmitían al resto de inmediato.
El acto consistió en la lectura de un manifiesto que podía haber sido redactado, firmado o inspirado por el propio Alfonso Guerra, exvicesecretario general del PSOE y exvicepresidente del Gobierno, cuando mostró su decepción con Pedro Sánchez por haber hecho lo contrario de lo que prometió: no formar gobierno con Podemos, no pactar con Bildu, tipificar el delito de convocatoria de referéndum, no a los indultos y agravamiento de las penas.
Dicha lectura fue llevada a cabo por Julia Calvet, líder de S’Ha Acabat, de los estudiantes perseguidos en la Universidad Autónoma de Barcelona, y por Nacho Trillo, presidente de la asociación Resiste España.
Y contenía precisamente este mismo mensaje: «Los españoles no hemos votado lo que está sucediendo. El Partido Socialista concurrió a las elecciones asegurando que No daría entrada en el Gobierno a los populistas, dejó bien claro que nunca sostendría la gobernabilidad en quienes desde la Generalitat acababan de articular un golpe de Estado, se comprometió a permitir el íntegro cumplimiento de las condenas de los sediciosos y a no pactar con Bildu, heredero directo del brazo político de ETA y se comprometió también a hacer de la lucha contra la corrupción y por la regeneración democrática dos de sus principales objetivos».
«Una mayoría de los españoles dieron su voto al Partido Socialista bajo esas premisas, no para que hiciera exactamente lo contrario», recordaron.
Previamente, Calvet y Trillo explicaron el motivo de la convocatoria.
«Nos hemos reunido hoy personas con diferentes sensibilidades, pero con objetivos comunes: Defender la democracia, defender la Constitución y defender una España unida de ciudadanos libres e iguales en derechos», comenzó Calvet. Para luego desgranar las decisiones tomadas por el Gobierno para «resolver el horizonte penal» de los sediciosos: los indultos, la salida de las cárceles de los prexos de ETA y la modificación del Código Penal «al dictado de los propios transgresores: ya no existe en España el delito de sedición y las penas por malversación de los políticos se han rebajado hasta el ridículo».
«Hemos visto cómo el bloque gubernamental y sus socios cierran el círculo menoscabando el control parlamentario», continuó Trillo. «Se ha batido el récord en el uso del Real Decreto Ley desde que fue aprobado por la Constitución, se ha batido el récord en el uso del Real Decreto Ley desde que fue aprobado por la Constitución, se abusa de los mecanismos de urgencia en la tramitación de leyes, se evita la habitual vía del proyecto de ley para sortear la emisión de los informes preceptivos o se pretende hurtar todo debate sobre asuntos esenciales mediante la introducción de enmiendas totalmente ajenas al objeto de las leyes en las que son introducidas».
Este conjunto de actuaciones y muchas más, según el manifiesto, no son hechos aislados. Revelan un «Un «plan de mutación constitucional que se mantiene oculto a los ojos de la ciudadanía y que está siendo acordado con los representantes del populismo totalitario, los nacionalismos secesionistas y los herederos del discurso del terror de ETA».
Un plan que pretende cambiar la Constitución y que está corroyendo al democracia, socavando las instituciones y dividiendo a la población.
«Por eso, hacemos un llamamiento a la sociedad civil y a los partidos comprometidos con el orden constitucional y la soberanía indivisible de la Nación, para unirnos en un clamor que demuestre que rechazamos la deriva política que ha tomado España. Un clamor que demuestre que los ciudadanos estamos dispuestos a defender democráticamente los valores de la Constitución y la unidad nacional, garante de la igualdad de derechos de todos», afirmaron.
Y añadieron, para concluir: «El Gobierno y el Partido Socialista deben tomar nota de la masiva oposición a sus pactos y políticas que refleja este acto. Y todas las fuerzas y actores políticos deben tener claro que la ciudadanía exige una España unida de ciudadanos libres e iguales en derechos, una democracia fuerte, con instituciones independientes y con prestigio, una España con vigor, inteligencia y energía para oponerse a sus enemigos y para avanzar decidida hacia un brillante futuro común.
El acto terminó con tres vivas, a la Constitución, al Rey y a España y el himno nacional.
A la manifestación han asistido el vicesecretario de Coordinación Autonómica y Local del PP, Pedro Rollán, el vicesecretario de Organización, Miguel Tellado, la portavoz de esa formación en el Parlamento Europeo, Dolors Montserrat, y la diptuada Cayetana Álvarez de Toledo, la exlíder de Ciudadanos, Inés Arrimadas y la vicealcaldesa de Madrid, también de la formación naranja, Begoña Villacís, y los dirigentes de Vox Santiago Abascal, Jorge Buxadé, Rocío Monasterio, Juan Gallardo e Iván Espinosa de los Monteros.
MANIFIESTO
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