José Manuel Almudí: “La Escuela de Práctica Jurídica es la puerta de acceso para que los alumnos alcancen sus metas en un entorno público de excelencia»
José Manuel Almudí Cid, experto en Derecho financiero y tributario, y director de la Escuela de Práctica Jurídica de la Facultad de Derecho de la Universidad Complutense de Madrid. Foto: Yolanda Rodríguez.

José Manuel Almudí: “La Escuela de Práctica Jurídica es la puerta de acceso para que los alumnos alcancen sus metas en un entorno público de excelencia»

|
15/6/2024 06:30
|
Actualizado: 14/6/2024 13:03
|

Recorremos las modernas instalaciones de la Escuela de Práctica Jurídica de la Facultad de Derecho de la Universidad Complutense, en pleno centro de Madrid, junto a la Plaza de España, junto a su actual director, José Manuel Almudí Cid, experto en Derecho financiero y tributario y firme defensor de la enseñanza pública, quien destaca la necesidad de formación continua y de especialización de los abogados.

Con él conversamos sobre el origen de la Escuela, su programa docente, los cambios que ha experimentado el perfil de los alumnos en los últimos años, cómo adapta la Escuela estos perfiles a los requerimientos de los despachos para que sus alumnos sean más competitivos en el mercado laboral, la importancia de la educación pública y los retos de futuro con la incorporación de nuevas tecnologías, como la Inteligencia artificial.

Creada hace ahora 70 años, acaban de cerrar este curso académico con más de 1.100 alumnos, y de estos, un 20% son jóvenes que acaban de graduarse. Los números avalan este proyecto académico donde “el incremento en el número de alumnos en los últimos años es un claro indicador de nuestra creciente relevancia y del acierto de nuestro planteamiento académico”.

Se muestra muy optimista con el futuro de Escuela de Práctica Jurídica, asegurando que la institución continuará siendo un referente de calidad y una vía esencial para quienes buscan la excelencia en su formación jurídica y profesional.

José Manuel Almudí Cid: «En nuestra Escuela, no solo buscamos la excelencia académica, sino también ser una pieza clave y útil para toda la comunidad jurídica». Foto: Yolanda Rodríguez.

Como director de una de las instituciones más prestigiosas en formación jurídica de España, ¿cómo ha evolucionado la Escuela de Práctica Jurídica para adaptarse a las nuevas demandas del mercado legal?

Desde hace unos años, decidimos ampliar nuestra oferta educativa no solo a recién graduados, sino también para profesionales en activo. Identificamos materias con alta demanda en el mercado laboral y ajustamos rápidamente nuestros programas. Mantenemos una interacción fluida y constante con los principales actores y profesionales del sector jurídico para adaptar nuestros cursos a las necesidades reales y emergentes.

Si tuviera que resumir lo que representa la Escuela de Práctica Jurídica en uno o dos titulares que me contestarías…..

Diría primero que es que “La Escuela de Práctica jurídica es la puerta de acceso para que los alumnos alcancen sus metas profesionales más ambiciosas en un entorno público de excelencia». Esto refleja nuestra dedicación a proveer una formación de posgrado en Derecho de la más alta calidad, accesible para todos, facilitando el acceso y la progresión en el mercado laboral y profesional de nuestros alumnos, dando respuesta al cometido esencial de una institución pública.

El segundo titular sería «Culminación de la excelencia educativa en Derecho, enriqueciendo el entorno jurídico profesional». En nuestra Escuela, no solo buscamos la excelencia académica, sino también ser una pieza clave y útil para toda la comunidad jurídica.

Y si me pregunta si hemos logrado estos objetivos, puedo decir modestamente que sí, que lo hemos conseguido. Los números hablan por sí solos: el incremento en el número de alumnos en los últimos años es un claro indicador de nuestra creciente relevancia y de lo acertado del planteamiento.

Analizando su programa de estudios, el claustro de profesores con el que cuentan es muy variado, ¿cómo contribuye esto a la formación de los estudiantes?

La función de la Escuela de Práctica Jurídica de la Complutense es, lógicamente, por una parte, ofertar esa formación continua, pero al mismo tiempo hacer ver a la sociedad que el excelente plantel docente con el que cuenta la Facultad de Derecho, está en disposición de aportar conocimiento, no solo de una perspectiva exclusivamente dogmática, sino también de una perspectiva práctica.

Desde esa perspectiva, entendemos que es una forma de trasladar a la sociedad y a la vida jurídica el resultado del estudio y de la investigación de excelencia de nuestro profesorado.

Nuestro claustro es bastante diverso, combinando académicos con profesionales que aportan su experiencia práctica. Este enfoque mixto garantiza que nuestros programas no solo sean rigurosos en lo académico, sino también relevantes y de la máxima utilidad en la práctica real.

Creemos que esta mezcla enriquece enormemente la experiencia educativa y prepara mejor a nuestros estudiantes para los desafíos del mundo profesional.

El director de la Escuela de Práctica Jurídica asegura a Confilegal «Nuestro claustro es bastante diverso, combinando académicos con profesionales que aportan su experiencia práctica». Foto: Yolanda Rodríguez.

Dentro del programa formativo de la Escuela de Práctica jurídica también imparten el Master de la Abogacía

En el Máster de la Abogacía y la Procura de la Complutense se admiten 180 alumnos al año y hay en estos momentos más de 1.200 solicitudes anuales. Por lo tanto, el tipo de alumno que tenemos es un alumno, es excelente. En pocos sitios hay 9 o 10 candidatos de toda España para cada plaza.

Es importante entender que, aunque la administración del máster recae en las Facultades, la Escuela de Práctica Jurídica posee la autonomía necesaria impartir ese programa físicamente en nuestras instalaciones. Esto nos permite mantener un estándar de enseñanza acorde con nuestras directrices y metas educativas, permitiendo a nuestros alumnos cursar dicho Máster en combinación con otras enseñanzas encaminadas a lograr una especialización del alumno.

«En el Máster de la Abogacía y la Procura de la Complutense se admiten 180 alumnos al año y hay en estos momentos más de 1.200 solicitudes anuales»

En respuesta a las demandas del mercado laboral que busca profesionales especializados, hemos desarrollado un enfoque innovador que combina el Máster de la Abogacía y la Procura con másteres de alta especialización.

Ofrecemos así un modelo de Doble Máster, donde los estudiantes pueden cursar simultáneamente el Máster de la Abogacía junto con un Máster de Especialización. Esta estructura no solo cumple con los requisitos académicos y profesionales para la práctica jurídica, sino que también mejora significativamente las oportunidades de nuestros alumnos de integrarse exitosamente en firmas de prestigio y empresas de renombre.

Además del Máster de Acceso a la Abogacía, ¿qué otros programas clave ofrecen?

Ofrecemos una variedad de másteres de alta especialización en áreas como asesoría fiscal, jurídica de sociedades, nuevas tecnologías, negocios internacionales y sectores regulados. Estos programas están diseñados para proporcionar a nuestros estudiantes más jóvenes una especialización profunda que mejora su competitividad para enfrentar los desafíos del mercado global actual.

A esta oferta se añaden más de cincuenta cursos de especialización, dirigidos a profesionales en ejercicio, que abarcan un amplísimo espectro de las ramas del Derecho, haciéndose especial hincapié en el Derecho de la empresa.

Antes me comentabas que tenéis un curso específico para abogados “in house”

Sí, es un curso dirigido por dos abogadas destacadas en el sector. Ana Prado, quien hasta hace poco fue la directora de la Asociación Jurídica de Mercedes Benz en España y ahora está en Francia, y Lorea García Jauregui, directora de OTIS para España y el norte de África.

Les propuse este curso inspirándome en una experiencia que tuve durante una visita a Harvard. Como quizás sepan, nuestra universidad tiene el privilegio de contar con un Real Colegio en Harvard, siendo la única universidad del mundo con esta distinción. En una de esas visitas, observé un curso para la Boston House y pensé que necesitábamos algo similar en España.

Este curso prepara a los alumnos con habilidades empresariales esenciales y una comprensión profunda de cómo conducir investigaciones efectivas. Se presupone que los estudiantes ya poseen una base sólida en formación jurídica si han sido admitidos en la Escuela, por eso, en ese curso se les enseña también cómo implementar cambios positivos y liderar equipos hacia mejoras significativas.

Está diseñado para cultivar una serie de habilidades más amplias que son cruciales en el mundo jurídico y empresarial actual.

Según José Manuel Almudí: “La Escuela de Práctica Jurídica es la puerta de acceso para que los alumnos alcancen sus metas en un entorno público de excelencia»»Los despachos buscan graduados que no solo tengan un alto nivel de competencia en idiomas y calificaciones académicas excelentes, sino también habilidades empáticas y de trabajo en equipo». Foto: Yolanda Rodríguez.

¿Cómo seleccionan al profesorado para estos programas?

Incorporamos a profesionales del mundo práctico en todos nuestros cursos. Esto es crucial porque nuestros estudiantes, que ya cuentan con una base teórica sólida, necesitan un enfoque práctico que solo pueden proporcionar aquellos que están activamente involucrados en la práctica del derecho. Esto es esencial para prepararlos adecuadamente para los retos que enfrentarán en el entorno laboral.

«Eligen la Complutense y nuestra Escuela de Práctica Jurídica, la formación pública, para actualizar sus habilidades, continuar su formación y, en última instancia, impulsar su carrera profesional»

¿Cuáles son los perfiles de estudiantes que buscan en la Escuela y cómo ha cambiado esto en los últimos años?

En cuanto a los perfiles que busca nuestra Escuela actualmente, podemos decir que se dividen principalmente en dos categorías. Cerraremos el año con alrededor de 1.100 a 1.200 alumnos, y de estos, un 20% son jóvenes que acaban de graduarse. Estos estudiantes están inscritos principalmente en el máster de acceso a la Abogacía y a la Procura, así como en los másters de alta especialización que ofrecemos.

El 80% restante de nuestros estudiantes son profesionales en activo. Este grupo está compuesto por profesionales que buscan especializarse más en sus campos, completar o actualizar su formación. Esto es lo que comúnmente se conoce como formación permanente o continua.

Eligen la Complutense y nuestra Escuela de Práctica Jurídica, la formación pública, para actualizar sus habilidades, continuar su formación y, en última instancia, impulsar su carrera profesional.

Contamos con un sistema de evaluación continua y programas anuales o cuatrimestrales. Esto nos permite abordar mejor las necesidades y estilos de aprendizaje de una población estudiantil diversa y en constante cambio.

¿Qué competencias y características buscan los despachos de abogados en los graduados de su Escuela de Práctica Jurídica?

Los despachos buscan graduados que no solo tengan un alto nivel de competencia en idiomas y calificaciones académicas excelentes, sino también habilidades empáticas y de trabajo en equipo. Nuestra formación busca fortalecer estas habilidades, preparando a los estudiantes no solo para enfrentar los desafíos legales, sino también para prosperar en entornos profesionales colaborativos.

Los despachos valoran mucho la experiencia práctica que nuestros programas ofrecen.

¿Y cómo suelen captar los despachos a vuestros alumnos?

Tenemos dos vías principales de captación de alumnos para nuestros programas. Por un lado, hay alumnos que son reclutados directamente por despachos de abogados cuando cursan tercero y cuarto del Grado. Estos estudiantes a menudo se integran a la plantilla de los despachos y realizan el máster mientras trabajan allí.

En muchos casos, estos programas se ofrecen en modalidad a distancia, permitiendo a los alumnos combinar su formación con la práctica profesional sin necesidad de pasar físicamente por nuestra Escuela.

Por otro lado, existe otra fórmula de captación que involucra a los estudiantes que completan el máster de la abogacía y la procura en nuestra institución. Estos alumnos suelen seguir un camino más tradicional, donde primero terminan sus estudios y luego buscan oportunidades de empleo. Este grupo está más orientado hacia el aprendizaje en el campus y aprovecha plenamente las instalaciones, recursos y oportunidades de “networking” que ofrece nuestra universidad.

Ambas vías son fundamentales para nosotros, ya que nos permiten adaptarnos a las necesidades y circunstancias de diferentes tipos de estudiantes, asegurando que todos reciban la formación adecuada para avanzar en sus carreras profesionales.

«Buscamos la excelencia en todos nuestros programas y queremos ser un recurso útil y relevante para el entorno jurídico y, especialmente para nuestros alumnos, que son lo más importante»

¿Cómo ha respondido la Escuela a los rápidos cambios en la práctica legal y la tecnología?

Nos enfrentamos a estos desafíos adaptándonos rápidamente a la formación online durante la pandemia, lo que nos permitió continuar ofreciendo nuestros programas sin interrupciones. Ahora, ofrecemos formación tanto presencial como telepresencial, excepto en programas muy específicos, para asegurarnos de que nuestros estudiantes puedan acceder a nuestra oferta educativa desde cualquier lugar.

¿Cómo ve el futuro de la Escuela de Práctica Jurídica en el contexto de los cambios tecnológicos y legales actuales?

El futuro de la Escuela implica una continua adaptación y respuesta a las necesidades emergentes. Esto incluye expandir nuestra oferta en áreas como el Derecho de las nuevas tecnologías, incluyendo cursos sobre inteligencia artificial, mientras mantenemos nuestro compromiso con la excelencia y la calidad en todos nuestros programas.

Por último ¿qué simboliza la Escuela de Práctica Jurídica para la universidad y sus estudiantes?

La Escuela representa una oportunidad para que los estudiantes, con independencia de su origen académico, alcancen sus metas profesionales en un entorno de excelencia.

Está diseñada para ofrecer formación de posgrado de alta calidad que es accesible para todos, asegurando que el factor económico no sea un obstáculo para nadie.

Buscamos la excelencia en todos nuestros programas y queremos ser un recurso útil y relevante para el entorno jurídico y, especialmente para nuestros alumnos, que son lo más importante.

Noticias Relacionadas:
Lo último en Profesionales