La opción de contratar directamente, a través de Internet, pisos privados en Madrid, y en las principales ciudades del mundo, ha impulsado el turismo internacional. Madrid Aloja.
Propietarios de viviendas turísticas denuncian la premeditación del Ayuntamiento de Madrid en su cierre progresivo
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23/12/2018 06:15
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Actualizado: 22/12/2018 17:19
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El presidente de Madrid Aloja, Adolfo Merás, reconoce que han utilizado la inscripción voluntaria en el Registro para enviar órdenes de cierre a las cerca de 11.000 viviendas que hay en la capital de España
El contexto de las viviendas turísticas invita al debate ante la situación existente. En los últimos cuatro meses el Ayuntamiento de Madrid interpuso una orden de clausura de 710 pisos en el centro de Madrid entre agosto y diciembre de este año.
Al mismo tiempo, la muy reciente sentencia del Tribunal Supremo anulando dos requisitos del Decreto 79/2014 de la Comunidad de Madrid , por desproporcionados dice el fallo, hace ahora más necesario este nuevo Decreto que se espera en la primavera del 2019.
En ese fallo, se estima en parte el recurso de casación interpuesto por Madrid Aloja y considera que tanto la exigencia del visado colegial, como la inscripción en el Registro de Empresas Turísticas, como requisito necesario para llevar a cabo cualquier forma de publicidad, “no están justificadas” y “son contrarias a derecho”.
Adolfo Merás, presidente de Madrid Aloja, la asociación de propietarios de viviendas para alquiler turístico.
La CNMC IMPUGNÓ LA NORMATIVA URBANÍSTICA MUNICIPAL
En este entorno llama la atención el papel de la Comisión Nacional de los mercados y la Competencia (CNMC) contra aquellos municipios que amonestan los alquileres turísticos ilegales.
El «superregulador» ha impugnado la normativa urbanística municipal en ciudades como Madrid, Bilbao y San Sebastián por ser «contrarias a la competencia» y perjudicar a los ciudadanos.
Al mismo tiempo, acaba de conocerse tras la publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE) de la modificación de la Ley de Propiedad Horizontal para permitir que, por mayoría de tres quintas partes, las comunidades de propietarios puedan adoptar acuerdos que limiten o condicionen la actividad del alquiler turístico.
Una medida que desde algunos sectores ha servido para pedir a Ayuntamiento y Comunidad de Madrid que publiquen sus normas y clarifiquen el marco legal de estos establecimientos”.
PERSECUCION DE VIVIENDAS TURÍSTICAS EN MADRID
Merás, presidente de esta entidad que agrupa a las viviendas turísticas de Madrid y que acaba de ganar la mencionada sentencia en el Supremo, explica que “en cuanto al plano visado, nos parece bien que exista pero no que se visara. Solo haría falta que el Colegio de ese profesional que realiza el plano avale su condición profesional. En cada situación que se presenta un plano de este tipo al Colegio Profesional. Estamos satisfechos que el Tribunal Supremo lo haya entendido como desproporcionado en su sentencia”.
En cuanto al tema del registro de la vivienda “hay una nota del CGPJ en la que viene a decir el propio Abogado General de la Comunidad de Madrid que la inscripción en el Registro no es obligatoria, con lo que el hecho que deba figurar en la publicidad de la vivienda es una contradicción dentro del mismo Decreto”, aclara Merás.
El presidente de Madrid Aloja recuerda que este recurso hoy ganado en el Supremo se interpuso hace cuatro años cuando la regulación de la Comunidad de Madrid era muy restrictiva.
“Este es un registro de empresas turísticas y en España hay muchos profesionales que alquilan esas viviendas sin ser empresas”, afirma.
UN NUEVO REGISTRO
Desde Madrid Aloja se reivindica un registro nuevo “hecho para las viviendas de uso turístico que sirva de control de una actividad que sigue creciendo y en donde deben quedar los malos actores, tanto a nivel de propietarios, gestores como sobre todo huéspedes”. Para este colectivo el papel del Ayuntamiento de Madrid es muy talibán en el aspecto de querer frenar el crecimiento de esta actividad.
“Utiliza el acto de voluntad de inscripción de la vivienda en el Registro, pese a que no se alquilan esas 10.000 viviendas, para poner en marcha expedientes de cierre cuando hace dos años la postura del Concejal Calvo era diferente”, cuenta.
El cambio de punto de vista del municipio madrileño influye en que se indica que las viviendas turísticas están incluidas en el Plan General de Urbanismo “ahora si estamos metidos, la actividad es de hospedaje y necesitamos una licencia de actividad. Ahora de aquellas viviendas que puede comprobar que están inscritas en el registro de viviendas de uso turístico, a esas les está mandando personalizadas sus órdenes de cierre como establecimiento”. Merásreconoce que se ha pedido al consistorio madrileño que se modifique la Ordenanza de Medioambiente y Ruido para regular mejor la convivencia.
Sin embargo, ahora Madrid Aloja como el resto de operadores del sector saben que habrá una nueva normativa impulsada desde la Dirección General de Turismo de la Comunidad de Madrid, que hace unos días Marta Blanco,su directora general avanzaba en un debate sobre la regulación de las viviendas turísticas organizado por Andersen Tax & Legal y donde participó también el concejal José Ramón Calvo, especializado en Desarrollo sostenible “ Han escuchado nuestro punto de vista y hay cuestiones que irán en ese Decreto, otras relacionadas con la convivencia, por ejemplo se ha quedado algo corto”, explica.
NECESIDAD DE REGULACIÓN, NO DE PROHIBICIÓN DE LAS VUT
Para e presidente de Madrid Aloja, la actividad de las viviendas turísticas como alternativa al alquiler de toda la vida, “es un fenómeno disruptivo que se debe ir regulando de forma progresiva. Ahora de esa regulación y aprendizaje que todos estamos teniendo no debería derivar en una prohibición expresa como ya se postura desde el Ayuntamiento de Madrid y su Plan Especial, en el que hemo dejado nuestras alegaciones”.
A día de hoy la entrada en vigor del citado Plan Especial de Hospedaje del Ayuntamiento de Madrid previsto para finales de este año no se hará efectivo.
Desde Madrid Aloja se indica que este control municipal pretende acabar con un sector emergente, al que se le achacan cuestiones como las subidas de alquiler o problemas de convivencia en los barrios, entre otras cuestiones, que nosotros no compartimos esa visión de las cosas.
«Sobre el impacto de Madrid Central aún estamos evaluando su impacto. Lo que queda claro es que a los turistas que quieren venir en coche a esta zona de la ciudad les afecta bastante”.
Sobre las órdenes de cierre, Merás reconoce que es un drama para muchos propietarios “que han encontrado en la VUT entre el 50 y 70 de sus ingresos. Para hacerle un símil es como si a uno le despidieran de su empresa por carta”.
Reconoce que seguirán luchando con todo el peso de la ley «para poder demostrar que el Ayuntamiento se ha inventado una ley a base también de inventarse unos datos de una medición, tanto a nivel de impacto medioambiental como de métricas que tienen son con unidades nuevas inventadas que no corresponden a la realidad. Creemos que la decisión de cierre las viviendas turísticas ya era algo premeditado”.
Merás subraya que en materia de vivienda de uso turístico parece que cada gobernante decide lo que es bueno y lo que no, lo que viene a revelar desde su punto de vista la falta de un estudio profundo y profesional del asunto, “ sin ningún tipo de ideología”.
El auge de estas viviendas viene propiciado porque muchas de ellas se anuncian en plataformas tecnológicas como Airbnb, de alcance mundial y muy efectivo para poner en contacto a propietarios con turistas clientes.
Y recuerda que “hay datos que se ocultan: Se han empadronado 80.000 personas más en los últimos tres años en Madrid, de los cuales 2.000 en el centro. No es cierto que se esté expulsando a vecinos, mensaje que se lanza desde el Ayuntamiento de Madrid”, señala el propio presidente de esta agrupación de viviendas turísticas que reclaman una regulación coherente del sector para un fenómeno que ha llegado para quedarse.
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