Susana Rodríguez, nueva CEO de Legaltech Legaline.
La «startup» Legaline incorpora a Susana Rodríguez como consejera delegada y consolida su crecimiento
Tras la adquisición de Reclamacionex, la tecnológica recurrirá a inversores (públicos y privados) para abrir una ronda de financiación de 500.000 euros
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24/5/2019 06:15
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Actualizado: 23/5/2019 22:11
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Legaline, «startup jurídica» especializada en atender demandas de consumidores en toda España, ha dado un nuevo impulso a su estrategia incorporando a su dirección a Susana Rodríguez Urgel como nueva consejera delegada y abriendo una ronda de financiación para consolidar su negocio en España.
Su objetivo es crecer en el mercado nacional y ampliar su cartera de servicios, acercando la justicia al ciudadano a través de un proceso «online» sencillo para encauzar las reclamaciones.
Desde la adquisición de Reclamacionex el año pasado para entrar en el mercado de las reclamaciones aéreas, esta «legaltech»ha continuado su consolidación con fichajes del sector tecnológico y prevé nuevas adquisiciones a corto plazo.
Rodríguez lleva algo más de un mes en Legaline como máxima responsable de esta startup para asumir el desarrollo de esta compañía que pretende acercar la justicia al ciudadano y hacerlo más sencillo en un mundo tan complejo y opaco como es la justicia
Esta profesional se encarga en esta nueva etapa de la «startup» tras relevar a Jaime Aparicio, anterior socio director.
Rodríguez cuenta con más de 20 años de experiencia en el área digital de empresas como Telefónica, Eltiempo.es, Páginas Amarillas y varias iniciativas empresariales propias.
“El mundo digital es mi pasión y ‘expertise’ [experiencia]. De los proyectos a nivel de ‘startup’ que tenía en mente, Legaline ya está operativo y hay un mercado evidente para su desarrollo”
Además, es co-directora académica del Programa de Dirección de Transformación Digital del IE Business School y fundadora de la organización Digitales Sin Fronteras, donde ayuda a personas en riesgo de exclusión social a familiarizarse con el entorno digital.
“La llegada del ‘blockchain’ [cadena de bloques] pondrá patas arriba todo lo relacionado con registro, procuradores y notaria a nivel de impacto jurídico. Es una tecnología que te ofrece la identidad digital»
Legaline está formado por un equipo de 11 personas, entre las que se encuentran fundadores de otras empresas tecnológicas y socios de despachos de abogados.
Su hoja de ruta y motivo principal de esta ampliación es clara: consolidarse y crecer.
OBJETIVO: LA CAPTACIÓN DE MEDIO MILLÓN DE EUROS
Los fondos captados con esta ronda de financiación de 500.000 euros se destinarán principalmente a consolidar los resultados obtenidos hasta ahora y a ampliar la oferta de servicios de la marca.
“Tenemos el objetivo de acercar la justicia al ciudadano e impulsar la digitalización del sector legal en nuestro país” afirma Rodríguez, quien añade que “la aplicación a los procesos legales de IA [Inteligencia Artificial] apoyada sobre ‘big data’ nos permite agilizar y automatizar procesos hasta ahora largos para los clientes y tediosos para los despachos tradicionales”.
Para esta experta “el sector legal es el de los más atrasados en su proceso de digitalización como en lo más importante, en cuanto acercarse al cliente».
«Es un nicho de mercado emergente donde los abogados tienen que darse cuenta que la tecnología tiene que formar parte de su actividad como herramienta que les ayude a mejorar procesos”, apunta.
RECLAMACIONES BANCARIAS, FISCALES, DENTALES Y AÉREAS
En Legaline son expertos legales en ofrecer al cliente un proceso sencillo para distintos tipos de reclamaciones: bancarias, fiscales y a las que ahora se suman las reclamaciones aéreas.
Su metodología permite al cliente contactar y procesar su reclamación de manera totalmente online. “De esta forma el ciudadano podrá ejercer sus derechos con el uso de esta tecnología”.
En este proceso el ciudadano interesado debe ingresar en su página web, introducir sus datos y adjuntar la documentación, permitiendo así que lo haga desde cualquier punto, de forma rápida y desde cualquier dispositivo.
A lo que ahora en este próximo año quieren sumar la inteligencia artificial a sus procesos. “Son procesos muy sencillos donde solo hay que subir cierta información que demuestre que uno ha sido víctima de un problema”-
Toda la documentación es analizada en 48 horas por el equipo de abogados de Legaline que indican al consumidor si realmente hay caso y qué posibilidades tiene de éxito, “tenemos que ser transparentes en estos temas para que toman la decisión de arrancar el proceso».
«Normalmente el proceso de reclamación es largo de 12 a 18 meses. Buscamos en principio la vía extrajudicial como primer paso. Sino responde vamos a fase judicial”. La plataforma funciona a éxito y tiene un 20% de comisión de lo rescatado de ese asunto.
Hasta el momento, esta startup ha centrado sus esfuerzos en el desarrollo de un «software« propio que le permite mejorar la eficiencia en estos procesos.
“Con la nueva ronda de financiación, Legaline podrá mejorar los servicios jurídicos personalizando aún más la atención que nuestros abogados y nuestro equipo ofrecen a cada cliente”, asegura la nueva CEO.
EL AUGE DE LA INDUSTRIA DE LAS RECLAMACIONES
El inicio del desarrollo del ecosistema «legaltech» en España cuenta actualmente con aproximadamente 80 compañías y las previsiones auguran que este sector seguirá creciendo en los próximos años.
La madurez de la tecnología disponible y el cambio de mentalidad de los despachos de abogados están permitiendo a las startups desarrollar nuevos negocios que acerquen los servicios jurídicos al ciudadano.
De momento, Legaline tiene como foco el mercado de las reclamaciones «online» de los sectores bancario, aéreo, fiscal y dental, entre otros, donde se posiciona como la compañía que mejor acompaña al ciudadano en todo el proceso.
En España las reclamaciones han crecido exponencialmente, en particular, en ciertos sectores. Es el caso del sector bancario: según la memoria anual de reclamaciones del Banco de España, en 2017 se cursaron 40.176 reclamaciones por hipotecas, marcando un récord histórico.
En el sector aéreo, las reclamaciones por cancelaciones de vuelos se han disparado un 297% en los últimos diez años (2.687 en 2008 frente a 10.666 en 2018), según datos de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA).
Esta cifra es similar a la registrada en las cancelaciones por retrasos de vuelos, que ha crecido en un 285% (se ha pasado de las 2.517 de 2008 a las 9.690 de 2018).
También el sector sanitario ha incrementado el número de reclamaciones por negligencias dentales, en gran parte debido a los casos recientes de las clínicas dentales «low cost», según FACUA
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