De izquierda a derecha, Luis González Díaz, presidente del COFM; Aurora Araujo, decana del CFISIOMAD; Francisco Rodríguez Lozano, presidente de ENSP; Antonio Montero, presidente de COEM; y Miguel Sánchez Chillón, presidente de ICOMEM, durante la presentación en la sede del al Colegio de Odontólogos y Estomatólogos de la I Región.
Médicos, odontólogos, farmacéuticos y fisioterapeutas piden medidas legales que restrinjan el consumo de los cigarrillos electrónicos
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29/9/2019 06:15
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Actualizado: 28/9/2019 22:41
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El Observatorio de la Profesión Sanitaria presentó la campaña “¿De verdad no crees que esto daña tu salud?” para explicar la problemática del cigarrillo electrónico y su elevado consumo.
Profesionales de la salud, a través de sus colegios profesionales, han denunciado públicamente la comercialización de cigarrillos electrónicos y destacado su efecto nocivo para los pulmones de los ciudadanos.
Una iniciativa que cuenta con la colaboración de la Red Europea para la Prevención del Tabaquismo (European Network for Smoking Prevention o ENSP) que trabaja para coordinar la estrategia de lucha contra el tabaco.
Desde el Observatorio de la Profesión Sanitaria, el cual reúne en su seno al Colegio de Odontólogos y Estomatólogos de la I Región (COEM), al Colegio de Médicos de Madrid (ICOMEM), al Colegio de Farmacéuticos de Madrid (COFM) y al Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid (CFISIOMAD), se presentó el jueves la campaña: “¿De verdad crees que esto no daña tu salud?”, cuyo objetivo es informar a la población sobre el peligro real que conlleva el uso de dispositivos electrónicos de liberación de nicotina.
Para este colectivo agrupado debería regirse por la normativa antitabaco, esto es, prohibir su venta a menores porque preocupa el incremento del uso de los adolescentes sobre esta cuestión.
Prohibición, al mismo tiempo, en la mayoría de espacios públicos al emitir nicotina y sustancias cancerígenas contaminantes dañinas para los que nos rodean.
Y, por último, prohibición de la publicidad, promoción y patrocinios.
Una campaña que se podrá seguir en redes sociales a través de los hashtags #CigarrilloElectrónico #LaSaludPrimero.
La iniciativa quiere hacer especial hincapié en tres mensajes clave.
Luis González Díaz, presidente de COFM, y Antonio Montero, presidente del COEM, durante la presentación.
En general, estos productos se publicitan como ayuda para dejar de fumar, o como alternativa más saludable y como producto inocuo.
Las sustancias que contienen, aunque se encuentran en cantidades más bajas de las que se detectan en los cigarrillos habituales, tienen capacidad para producir patología en humanos.
Por otra parte, su seguridad y eficacia como ayuda para dejar de fumar no han sido demostradas.
Si se desea dejar de fumar existen tratamientos que han demostrado su seguridad y eficacia. Los profesionales sanitarios pueden orientar y ayudar al paciente para conseguirlo.
En primer lugar, los dispositivos electrónicos se rigen por la normativa antitabaco, son perjudiciales para la salud y no ayudan a dejar de fumar.
En este sentido, el doctor Antonio Montero, presidente del COEM, afirmó que “tenemos la responsabilidad de informar a nuestros pacientes y a los profesionales sanitarios sobre los daños orales a corto y largo plazo que pueden acarrear este tipo de dispositivos electrónicos”.
Miguel Ángel Sánchez Chillón, presidente del Colegio de Médicos de Madrid, manifestó que “se deben tomar medidas legales cuanto antes para regularizar su uso por el bien de la salud pública”.
Desde su punto de vista “no debemos tolerar que los intereses comerciales de la industria del tabaco provoquen que nos expongamos a sustancias que agreden, y dañan directamente a nuestros pulmones. La población debe conocer que los cigarrillos electrónicos no son inocuos para la salud, no son efectivos para dejar de fumar”.
En esa misma línea, la decana del Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid, Aurora Araújo, afirmó que “el colectivo al que represento siempre ha apostado por la prevención y la promoción de la salud y eso incluye la protección de la salud respiratoria de la población, sabiendo que estos dispositivos suponen un riesgo para la misma”.
Luis González Díez, presidente del COFM, manifestó que “nosotros estamos comprometidos con todos los ciudadanos que quieran dejar el tabaco. Somos sus aliados y estamos preparados para informar y asesorar sobre las alternativas más eficaces de deshabituación tabáquica, sus riesgos y beneficios o para hacer cribados a la población fumadora”.
Campaña contra el vapeo.
PROHIBICIÓN A MENORES
Francisco Rodríguez Lozano, presidente de ENSP, fue claro, recordando que “no hay que olvidar que la OMS desaconseja el uso de los dispositivos de liberación de nicotina”.
Todos los intervinientes en el acto destacaron que lo prioritario debe ser la salud.
Y también señalaron que la venta de estos dispositivos a menores está prohibida. Al emitir nicotina y otras sustancias cancerígenas contaminantes, están prohibidos en la mayoría de los espacios públicos.
Además, recordaron que está vetada su promoción, publicidad y patrocinio.
Son perjudiciales para la salud, provocando numerosos daños a corto y largo plazo.
Desde este Observatorio de la Profesión Sanitaria se insiste en que el uso de estos dispositivos, en la práctica, no ha realmente probado que ayuden a dejar de fumar.
Para ello, lo recomendable es acudir a los profesionales sanitarios que sí disponen de los medios para ayudar al paciente a dejar el hábito tabáquico,
De hecho, los promotores de esta campaña divulgativa insisten en que el uso de dichos dispositivos Son perjudiciales para la salud oral provocando daños en tu boca, dientes y encías. A corto plazo, las vías respiratorias sufren daños similares a los del consumo del tabaco.
También recalcan que se han hallado sustancias cancerígenas en líquidos y vapor y que al mismo tiempo contienen sustancias que crean adicción.
NUEVA YORK OPTÓ POR LA PROHIBICIÓN
Hace unos días hemos sabido que el gobernador del estado de Nueva York, Andrew Cuomo, anunció hace unos días la prohibición de los cigarrillos electrónicos con sabores, en un intento de «combatir el aumento del consumo de productos de vaporeo entre los jóvenes».
Cuomo, que emitió una orden ejecutiva, también ha ordenado a los cuerpos de seguridad que redoblen sus esfuerzos para atajar la venta de estos productos a los jóvenes y menores de edad.
La edad mínima para fumar en Nueva York son los 21 años.
Además, adelantó que preparará una nueva legislación para combatir la «publicidad engañosa» de los cigarrillos electrónicos dirigida a jóvenes y niños.
«Los fabricantes de cigarrillos electrónicos con sabor a frutas y sabores dulces se están dirigiendo intencionadamente e imprudentemente a los jóvenes y hoy estamos tomando medidas para poner fin a esto. Al mismo tiempo, tiendas sin escrúpulos están vendiendo, conscientemente, productos de vaporeo a menores de edad», aseguró el gobernador.
Cerca del 40 % de los estudiantes de último año de escuela superior y el 27 % de los estudiantes de escuela superior en este estado están usando cigarrillos electrónicos.
Fuentes oficiales del estado de Nueva York, también recalcaron que en 2018, el 27,4 % de los estudiantes en escuela superior usaban el cigarrillo electrónico, un 160 % más que en 2014, cuando era de 10,5 por ciento.
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