Alba Anegón, abogada especializada en temas de M&A.
Baker & Mckenzie apuesta por el Legal Project Management para fidelizar y dar valor a sus clientes
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14/6/2016 07:56
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Actualizado: 16/6/2016 09:41
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Desde hace seis años Baker & Mckenzie ha desarrollado una red de equipos en su estructura mundial volcada a la mejora del cliente y en innovar su gestión incorporando de forma progresiva la gestión de proyectos.
Los cambios en la abogacía de los negocios son ineludibles en un escenario global como en el que conviven despachos y clientes. La gestión de proyectos, eficaz en actividades como ingeniería o arquitectura, empieza a tenerse en cuenta como la herramienta para que los despachos optimicen sus recursos y los propios clientes conozcan qué y porqué se les factura determinados honorarios.
Alba Anegón, abogada especializada en temas de M&A en diferentes despachos como Allen & Overy, DLA PIPER u Olswang, es uno de los treinta project management que Baker & Mckenzie tiene operativos desde que hace seis años decidiera en una reunión internacional apostar por esta figura en muchas de sus oficinas.
Desde la oficina del bufete anglosajón en España gestiona con los socios correspondientes el timing y procesos de muchas de las operaciones en las que la firma aparece como asesor de alguna de las partes, de hecho la apuesta de Baker & Mckenzie en España por la gestión de proyectos surge cuando Alba se incorpora para gestionar las operaciones del despacho siguiendo estos cánones.
La apuesta de la firma anglosajona desde el 2010 por el Legal Project Management es clara, pese a que aún la implantación de esta tendencia no se ha generalizado en la abogacía de los negocios “ Creo que hay mucho desconocimiento sobre el tema y que muchos despachos no han entendido de lo que hablamos cuando aplicas la gestión de proyectos”, apunta nuestra interlocutora.
En el propio Baker & Mckenzie confluyen diferentes perfiles, como el de Alba, abogado y Project management junto a otros “ en nuestro centro de servicios ubicado en Belfast combinamos perfiles como el mio con otros especializados en finanzas y Project management o tecnología y gestión de proyectos. Esto configura un equipo de 30 project management a nivel global”; señala.
Todos estos profesionales persiguen el llamado “Better faster cheaper”, frase que significa hacerlo todo mejor más rápido, mejor y por menos dinero. “ Creemos que podemos mejorar con esta herramienta la gestión de nuestros procesos”, señala nuestra entrevistada, quien considera la gestión de proyectos clave para la mejora de la comunicación entre despacho y cliente.
Cuando le preguntamos que haga un balance de la experiencia de Project management en Baker & Mckenzie, Alba Anegón se muestra satisfecha con los logros alcanzados a nivel interno, como a nivel profesional “ creo que ahora soy mejor abogada que antes por todos los conocimientos que he ido aprendiendo”.
“ La gestión de proyectos mejora la comunicación del cliente»
Cualquier asunto llevado desde la gestión de proyectos tiene como elementos clave el alcance, coste y el tiempo del propio asunto. “ Luego hay otros tres temas más secundarios derivados de aquellos que son la comunicación tanto interna o externa del asunto; personas interesadas en el proyecto de forma directa o indirecta en el mismo y los posibles riesgos que puedan ir surgiendo”, comenta Alba.
Alrededor de estos seis elementos se crean una serie de técnicas y herramientas “queremos que las personas del departamento los conozcan y sepan cómo tratarlos por si en algún momento tenemos que contactar con ellos “Desde la gestión de proyectos se divide el asunto en cuatro partes, desde que contactan con nosotros hasta que se cierra la operación, cuestión que concluye con la evaluación que hacemos al cliente de lo que hemos hecho”.
Procesos de due diligence, encuestas multijurisdiccionales u operaciones que se tienen que hacer con diferentes oficinas, son algunos de los asuntos que desde Baker & Mckenzie se impulsan con el uso de la gestión de proyectos como herramienta principal. “Desde junio del pasado año habré participado en una veintena de operaciones de cierto calado como project management”, indica.
Pese a que no podemos tener una cifra exacta del ahorro en costes que ha permitido el uso de esta herramienta en la gestión de los asuntos, Alba señala que “se ha notado a nivel de mejora interna el uso de esta técnica. Creo que nos ha ayudado a organizarnos mejor y la realización de los proyectos se ha incrementado”, señala.
A su juicio, hay diferentes niveles de aplicación de la gestión de proyectos en el despacho “primeramente poner en marcha tecnología para ayudar a los abogados en su trabajo, la gestión de honorarios o un estadio mayor como es el control de ese asunto desde el principio al final desde el punto de vista legal”; señala.
En su opinión, el papel de estos profesionales deben pasar ineludiblemente porque sean abogados a los que luego se les pueda dar la formación adecuada en gestión de proyectos “ Si estás metido en el sector legal, sabes realmente en qué puedes ayudar a mejorar el trato con el cliente. Puede identificar qué procesos son susceptibles de mejora en esa relación”, señala.
La aplicación de la gestión de proyectos para esta letrada puede extenderse a otras actividades como el compliance o asuntos procesales donde se pueda ver la mejora a la hora de introducir esta técnica “El project management te da unas pautas y unas herramientas y genera un cambio cultura en el seno del despacho. Se trata de ver en qué procesos se puede introducir la mejora que beneficie al cliente”, concluye.
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