Manuel Marchena Gómez, presidente de la Sala de lo Penal del Supremo, coautor de "Claves prácticas para la defensa penal", el libro que ha escrito junto a su hijo, Manuel Marchena Perea, abogado penalista, a la derecha de la foto, durante su turno de intervención en la presentación del libro que ayer tuvo lugar en el Colegio de la Abogacía de Madrid. Foto: Carlos Berbell/Confilegal.
Los Marchena congregan a lo más granado en la presentación de su libro «Claves prácticas para la defensa penal»
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29/9/2022 06:52
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Actualizado: 29/9/2022 13:42
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Pedro González Trevijano, presidente del Tribunal Constitucional (TC), Carlos Lesmes, presidente del Consejo General del Poder Judicial y del Tribunal Supremo (TS), Rafael Catalá y Juan Carlos Campo, exministros de Justicia, Antonio Narváez y Enrique Arnaldo, magistrados del TC; Ángel Hurtado, Antonio del Moral, Susana Polo, Pablo Lucas Murillo de la Cueva y Dimitry Berberof, magistrados del TS; Jaime Moreno, fiscal del TS; Celso Rodríguez Padrón, presidente del Tribunal Superior de Justicia de Madrid; José Manuel Suárez Robledano, magistrado de ese órgano, Alejandro Abascal, magistrado de la Audiencia Nacional, y Ricardo Rodríguez, magistrado de lo Penal de Madrid.
También Victoria Ortega y Juan Carlos Estévez, presidentes de los Consejos de la Abogacía y de Procuradores de España; el decano del Colegio de Procuradores de Madrid, Alberto García Barrenechea y su predecesor, Gabriel María de Diego Quevedo, junto al vicesecretario Noel Dorremochea de ese Colegio; los diputados del Colegio de la Abogacía de Madrid, Eugenio Ribón, Dolores Fernández Campillo y Juan Gonzalo Ospina; los abogados Nicolás González-Cuéllar, Alba Rosell, Manuel Ollé, Jaime Campaner, Marcos Molinero, Jesús Andújar, Carolina Mata, Delia Rodríguez, Bárbara Royo, José Manuel Maza Muriel, Adolfo Prego junior y Antonio Abellán.
Todos ellos, y muchos más, formaron el público, entre los que se encontraban las dos Sofías, madre e hija, esposa y hermana de los coautores del libro «Claves prácticas para la defensa penal», Manuel Marchena Gómez, presidente de la Sala de lo Penal del TS, y Manuel Marchena Perea, abogado penalista, de la presentación de la obra que tuvo lugar ayer por la tarde en el Colegio de la Abogacía de Madrid de la mano de su decano, José María Alonso.
Un aforo que excedió las 150 personas en pleno centro de la capital de España.
Le correspondió al decano abrir el acto, flanqueado por los dos Marchenas, en carne y hueso, y por los cuadros de sus antecesores en el cargo, Sonia Gumpert y Antonio Hernández Gil, con un elogio de ambos autores y del libro, del que dijo que «llama al pan, pan y al vino, vino».
A Manuel Marchena Perea le tocó hacer una descripción de su contenido, capítulo a capítulo, de un modo ameno e interesante. No hubo ni un segundo de duda en la exposición, prueba de que el joven maestro ya había toreado en plazas anteriores con aplomo y destreza.
«Nuestro objetivo fue hacer un libro eminentemente práctico para aquellos abogados de la jurisdicción penal. Un libro donde encontrar respuesta a las dudas que en el ejercicio de la abogacía se puedan encontrar. De existir, cuando comencé a ejercer, me lo hubiera comprado», explicó después.
El libro ha sido publicado a través de Amazon, con lo cual se ha conseguido un abaratamiento de su publicación (son 39,95 euros).
Cerró la presentación Manuel Marchena Gómez, el magistrado, quien se refirió a su hijo, varias veces, como «el coautor». Explicó que la obra nació como producto de la pandemia, pero que lo que habían buscado, desde el primer momento «dar un apoyo práctico a los abogados en la jurisdicción penal».
Y añadió: «Un profesor nuestro, de historia del derecho, siempre que hablaba de Bartolo de Sasoferrato, casi, casi nos exigía ponernos de pie. Él decía que los sistemas jurídicos se ingieren en las facultades de derecho pero se digieren en la práctica de los tribunales».
Marchena, que refirió que había sido abogado al terminar la carrera –estuvo en el turno de oficio durante un año–, fiscal y luego magistrado, llamó la atención de una forma especial sobre el derecho de defensa. «Cuando hablamos de la concreción del derecho de defensa estamos hablando de principios que tienen una dimensión ética, una función de legitimación de la propia legitimación jurisdiccional», subrayó.
Para terminar dio gracias a todos los asistentes, con ese humor tan característico de su persona.
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