La Mutualidad General de Funcionarios Civiles del Estado (MUFACE), creada en 1975, enfrenta una crisis que podría marcar su desaparición.
Técnicos de Gestión del Estado, sobre MUFACE: «hay que mentalizarse que se acabó, pero tienen que tener un plan de contingencia»
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22/11/2024 01:00
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Actualizado: 22/11/2024 01:19
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La Mutualidad General de Funcionarios Civiles del Estado (MUFACE), creada en 1975, enfrenta una crisis que podría marcar su desaparición. Las aseguradoras privadas Adeslas, Asisa y DKV han rechazado el nuevo concierto sanitario propuesto por el Gobierno argumentando que el aumento del 17,12% en la prima anual es insuficiente para cubrir los gastos actuales.
Este rechazo amenaza la continuidad del modelo, que permite a 1,5 millones de funcionarios y a sus familias elegir entre la sanidad pública o privada. Datos del ministerio liderado por Mónica García revelan que el 67% de los mutualistas opta por la segunda opción.
Por lo que el Gobierno estudia integrar a estos funcionarios, en su mayoría docentes, policías e inspectores, a la sanidad pública.
Según El Economista, el Gobierno habilitó esté miércoles unas consultas preliminares de mercado para que todas las aseguradoras privadas interesadas puedan trasladar el precio por el que prestarían asistencia sanitaria para 2025, 2026 y 2027. Para, posteriormente, con dicha información, elaborar una nueva licitación.
Una situación que «no pinta nada bien»
Fuentes de la Asociación de la Escala Técnica de Gestión de Organismos Autónomos del Estado cuentan a Confilegal que no sienten que esta situación pinte bien mientras que no se suba la prima, un camino que, parece ser, no es el que lleva el Gobierno. «Vamos a un cambio de modelo, habrá que adaptarse aunque cueste al principio».
Según explican, creen que el problema con MUFACE va a afectar, sobre todo, a la Comunidad de Madrid. Pues allí es dónde está el mayor colectivo de funcionarios. Profesionales que, si pasan todos a la sanidad pública, la gestión será «complicada», por lo que creen que los que se lo puedan permitir optarán por la privada.
Es más, la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia alertó hace dos días sobre los posibles riesgos e inquietudes que podría conllevar el traspaso de la totalidad de los beneficiarios de MUFACE a la sanidad pública por la «sobrecarga del sistema».
Esto conllevaría el aumento de las listas de espera y afectaría a la calidad del servicio.
Recortes en MUFACE desde hace años
Desde la Asociación de la Escala Técnica de Gestión de Organismos Autónomos del Estado comentan que seguramente se prorrogue el contrato y, quizá, se firme un concierto nuevo, «pero puede que sea el último, por lo que hay que ir mentalizándose de que esto se acabó».
Aunque reconocen que, quizá, doctrinalmente hablando tenga sentido porque son empleados públicos, «pero el problema es que si haces eso, tienes que tener un plan de contingencia para poder responder al aumento de demanda».
Una situación que, según cuentan, están viviendo con incertidumbre porque, además, no es algo que sea de ahora, si no de tiempo atrás en el que las aseguradoras han ido recortando cada año el servicio. Por ejemplo, han llegado a buscar un médico, que les aparezcan todas las citas y cuando indican que son mutualista de MUFACE, sólo les dejan abiertas dos.
«Hay un refrán que explica muy bien esta situación, y es que nadie da duros a pesetas». Pero insisten en que, si quieren hacer eso, deben de tener un plan y preguntarse si tienen capacidad para asumir a 3 millones de personas -contando con sus familias- porque, si no la tienen, tendrán que darles dinero para que lo hagan.
En definitiva, la asociación no habla de colores políticos, sino de gestión pura.
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