Zaida Cantera: “No se puede marginar a los militares a nivel laboral cuando dejan el ejército”
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26/2/2018 06:05
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Actualizado: 25/2/2018 19:52
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Desde hace más de un año está operativa en el Congreso de los Diputado una Subcomisión Parlamentaria que está analizando los problemas de los militares de tropa y marinería. Una iniciativa del PSOE que fue secundada por el resto de partidos políticos. Este miércoles será la última comparecencia para luego consensuar un dictamen sobre esta problemática que verán Pleno del Congreso y nuestro Gobierno. Zaida Cantera, portavoz de Defensa del PSOE en el Congreso forma parte de esta Subcomisión.
En su opinión las dos Proposiciones No de Ley (PNL) presentadas por Unidos Podemos y Ciudadanos sobre este colectivo “solo son declaraciones de intenciones pero no valdrán para nada. No frenarán las próximas salidas de militares que concluyen su compromiso con el ejército por llegar a los 45 años”. Para Cantera estas medidas son solo populistas pero lo que importa el dictamen que alcance la Subcomision que se creó hace un año y que puede generar cambios legales”.
Nuestra interlocutora fue uno de los parlamentarios que acudió al I Congreso de Militares, organizado este sábado por AUME y ATME, donde se han analizado y planteado cambios sobre la carrera militar en cuanto a retribuciones, temporalidad, derechos y calidad de vida, justicia militar entre otras cuestiones. Su intervención, muy realista, explicó que se está trabajando para resolver este problema pero que no todos los militares podrán seguir en el ejército”.
Para Cantera “una cosa es que tu sirvas a la sociedad, defendiendo la bandera y la democracia del país, y otra cosa es que seas un esclavo o un sirviente y estés sometido a la disciplina de las Fuerzas Armadas de tal forma que puede atentar a tus derechos”. A su juicio, la existencia de asociaciones profesionales militares como las que organizado este evento, son necesarias “se trata que los militares desarrollen su trabajo en unas condiciones dignas, tanto a nivel social como retributivo”.
¿Cree que la sociedad entiende el trabajo que hacen los militares realmente?
La última encuesta del CIS en el 2015, hacia referencia a las Fuerzas Armadas con unos datos que llaman la atención. Mientras la sociedad la percibe como una institución bien valorada, siempre que se dedique a las misiones que tienen ver con la paz y de carácter humanitario. Hay que recordar que la misión fundamental de las Fuerzas Armadas es prepararse para enfrentamientos de carácter bélico.
Mientras tengan ese perfil son bien concebidas por la sociedad. Sin embargo cuando se les pregunta cuantos españoles estarían dispuestos a dar su vida, si hubiera una invasión, te das cuenta que muchos no la darían. Y si les preguntas por profesiones que se prioricen, las dos profesiones peor valoradas son, la penúltima, las del soldado profesional y la antepenúltima la del militar profesional de carrera.
Da la sensación que hay que trabajar para acercar esas Fuerzas Armadas a la sociedad…
Hay que cambiar esa visión, desde luego. Cuando hablas con varios militares ellos advierten que no es culpa suya. Y que es cosa quizá de los políticos. Es posible que una parte de la culpa la tengamos los políticos, pero también los propios militares deben hacer una serie de transformaciones.
No parece lógico que en un acto educativo, las fuerzas armadas, que en su seno realizan muchas actividades universitarias, se estudian carreras e incluso se pagan algunas, siempre y cuando se sigan un tiempo. La persona que diga que las Fuerzas Armadas no tienen cabida en ese evento educativo, como dijo la alcadesa Colau de Barcelona no tiene conocimiento.
Zaida Cantera, portavoz de Defensa del PSOE en el Congreso forma parte de esta Subcomisión.
Ahora está el problema de los militares de tropa y marinería que a los 45 años y su acomodo laboral futuro….
Al mismo tiempo, soy consciente que a muchos profesionales de tropa y marinería que han cumplido ya 45 años, con una media de quince a veinte años sirviendo al país, se les cierra las puertas laborales por su origen militar, lo que estamos haciendo es marginar a este colectivo de militares. Cuando son parte de la sociedad.
Hay que darse cuenta que en España en la franja de 45 a 50 año quedarse sin trabajo supone estar en una situación complicada de volver al mundo laboral. El problema es que han empezado a salir de las Fuerzas Armadas en el 2015 en un ciclo recesivo del país donde los sueldos son aún más bajos.
Muchos de ellos se quejan de su escasa formación a nivel laboral dentro del ejército…
La ley de Tropa y Marinería se aprobó en el 2006 y en estos doce años pocos cambios ha habido. Si hago de abogado del diablo, muchos de estos profesionales saben que han firmado un contrato por el que a los 45 años dejan su unidad y se reintegran a la sociedad civil. Son contratos temporales que se rescinden como otros tantos en nuestro entorno.
Llegar a los 45 años se produjo por una demanda de la sociedad y del ejército que necesitan más efectivos en las Fuerzas Armadas porque se necesitaban otro tipo de profesionales. También se les incrementó algo el salario. En aquel entonces había un problema de captación de efectivos. En años boyantes, siempre pasa eso. Sin embargo en los años de la crisis se multiplicaron las demandas para ser militar.
Sin embargo, la propia Ley del 2006 que hemos citado no ha ayudado a cualificar y formar a estos profesionales de tropa y marinería para su futuro más inmediato. Es evidente que el estamento militar ha fallado en este sentido. No se ha hecho nada para garantizar esa homologación formativa para su salida al mercado laboral general.. Muchas de estas cuestiones se están abordando en la citada Subcomisión para encontrar una solución real al tema. En España solo el Ministerio de Educación es el único que puede hacer dichas homologaciones.
¿Qué papel está jugando dicha Subcomisión a la hora de resolver la problemática de estos profesionales que se ven abocados al desempleo?
Iniciamos los trabajos hace un año. Han pasado treinta ponentes que están dando su visión del problema muy al detalle. Algunos han venido del extranjero para explicarnos los modelos de ejército que hay fuera y ver si se pueden adaptar al nuestro. Lo que no tiene sentido es que algunos estudiantes hagan prácticas en algunas unidades militares y se les homologue, y a estos profesionales, con carrera militar larga, su certificado no tenga valor.
Otra cuestión son las retribuciones, los militares de tropa y marinería se quejan con razón de que están muy mal pagados…
El militar profesional de tropa y marinería es de los peores pagados de la Administración. Un guardia civil recién salido de la Academia cobra más que un oficial recién salido de la Academia del ejército, y no los comparemos con los mossos de escuadra.
Si nos vamos al soldado, muchos de ellos no son mileuristas y dependen de los complementos de remuneración especial. En otros ámbitos de la Administración se subieron los sueldos, pero al militar no se le ha hecho. Tenga en cuenta que no se cobran guardias, el límite conocido de las 40 horas semanales en las Fuerzas Armadas no existe. Puede haber guardias de tres días que los militares tienen que asumir. Todas presenciales en el cuartel no remunerado. Tampoco se pagan festivos. La conciliación en las Fuerzas Armadas es muy compleja.
Es muy difícil conciliar en las Fuerzas Armadas. Las reducciones de jornadas se han suprimido muchas de ellas y los sueldos, en comparación con otros cuerpos de Seguridad del Estado, son muy bajos
La ministra Cospedal ha hablado del incremento del gasto militar en defensa, entiendo que debería también haber algo parecido a nivel de retribuciones de los propios militares…
Creo que debería ser lo lógico. Pero me temo que la Ministra lo entiende de otra forma. Hasta ahora ha ofrecido muy buenas palabras, pero ha llegado el momento de pasar a la acción y concretar lo que hará en esta problemática y a nivel de política militar de defensa.
De una lectura de los presupuestos generales, en el apartado catorce, uno observa que hay poco dinero dedicado a becas y acción social en el seno de las fuerzas Armadas. Al mismo tiempo algunos militares que sufren accidentes tienen que acabar en los tribunales para reclamar esas indemnizaciones que se les debe de dar. Al final nunca es responsabilidad del mando que dio la orden.
Lo cierto es que desde el PP está en el Gobierno se han aprobado ordenes ministeriales que vn contra la conciliación familiar. Ahora las reducciones de jornadas no son por hijos menores de doce años, sino que tienen que tener cuatro o menos años y a pesar de eso hay reducciones militares que se suprimen. Todo depende de las necesidades del servicio pero nadie las define realmente. No se puede coartar el derecho a la conciliación familiar en el seno de las Fuerzas Armadas.
¿Cómo valora el tratamiento de los casos detectados de acoso sexual en el ejército?
No creo que el fenómeno haya repuntado, lo que si está claro es que es más visible. La alarma social se genera cuando no se toman medidas adecuadas de proteger a las víctimas. El protocolo de acoso sexual, con una serie de medidas preventivas, no ha servido de mucho en los últimos casos detectados. Los mandos realmente no han reaccionado bien.
Cuando una victima le va a contar a un mando que sufre ese acoso o agresión sexual, lo primero que deben hacer es tomar medidas de protección a esa víctima. Medidas inmediatas. Recibo muchos correos de mujeres y algún hombre con este tipo de problemática que te piden consejo sobre denunciar o no. Muchos de ellos tienen miedo a represalias por denunciar.
El protocolo no funciona. Las víctimas no están formadas en dicho protocolo y no lo conocen. No basta con leer una guía y lo mejor sería que tuviera a su lado una serie de médicos y psicólogos y asesoramiento legal que le ayudasen en ese trance. En las unidades, la formación sobre este protocolo no es uniforme. Se deja al criterio de los mandos. Esta concienciación debería empezar en las Academias militares pero al final se forma en las unidades de manera superficial.
De los agresores poco se conoce siempre…
Es cierto que el derecho a la presunción de inocencia debe prevalecer pero mientras tanto hay muchas multitud comisiones de servicio. Se puede crear una comisión de servicio y se le lleva a otra unidad. Pero la que abandona la unidad o la que acaba con baja médica es la víctima, una mujer que ha sufrido un intento violación o agresión sexual. Muy pocas pueden seguir trabajando. No se las protege y muchas de ellas acaban rescindiendo su contrato mientras que los agresores siguen en sus puestos de trabajo presumiendo de lo hecho.
El protocolo contra el acoso sexual en el ejército debe mejorarse. No es lógico que el presunto agresor siga en su unidad mientras que la víctima está de baja médica
Hay que cambiar el protocolo contra el acceso de arriba abajo. Este protocolo lo han estudiado hombres y mujeres expertos en género y violencia y están de acuerdo en que son medidas insuficientes. Es un paso adelante que se dio hace algo más de dos años. En ese protocolo se habla de las denuncias falsas, por cierto. El 0,075 son falsas según el CGPJ a nivel general, pero en el campo militar a veces la denuncia no tiene pruebas suficientes, eso no significa que sea falsa. Que no lo tenga no significa que los hechos no hayan ocurrido.
Este tema enlaza con la justicia militar, muchos expertos piden que se integre como una jurisdicción más dentro de nuestra sociedad…
Soy partidaria de eliminar la justicia militar que no el Código Penal Militar. Es una justicia especial que no tiene cabida dentro de nuestra Constitución. En tiempos de paz tiene menos cabida. ¿Por qué una persona que tiene una profesión que es la de militar, tiene que acabar en esta jurisdicción cuando el delito que sufre no es militar? Eso no ocurre ni con policía ni con bomberos que yo sepa.
Otra cuestión que llama la atención es el caso de los jueces. Su carrera como tal depende de su actividad militar por encima de que sean o no buenos jueces. Sobre el Código Penal Militar, hay que recordar que es un libro donde se recogen hechos delictivos en el ámbito militar. Son propias del ejercicio de esta profesión aunque podría tener otro nombre. Por eso no estoy de acuerdo con que delitos como agresión sexual se hayan incorporado al mismo. Ya están tipificados en el Código Penal convencional.
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