La gran distribución pide al Gobierno un marco normativo flexible que ayude a la transformación digital del comercio
Imagen de la Asamblea General de ANGED. En la mesa presidencial la ministra Reyes Maroto, a su dcha., Alfonso Merry del Val, presidente de ANGED, y a su izqda, Michael Koening de la UE. Alfonso Esteban.

La gran distribución pide al Gobierno un marco normativo flexible que ayude a la transformación digital del comercio

La ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, anuncia la creación de un Observatorio 4.0 que ayude al cambio digital de nuestros establecimientos
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19/9/2018 06:15
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Actualizado: 11/10/2018 17:11
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Empresarios de las principales compañías de distribución del país, diputados de la Asamblea de Madrid, sindicatos, miembros de CEOE y CEPYME  y medios de comunicación invitados estuvieron presentes en la Asamblea Anual de la  Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución (ANGED) clausurada por la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto.

Su presidente Alfonso Merry del Val, recordó el reto de la transformación digital para el que se necesita una normativa más flexible.

En su discurso, el presidente de ANGED apuntó  que digitalizarse no es sólo empezar a vender online”, sino que supone una “una transformación profunda de toda la estructura y estrategia de las compañías, los procesos, relaciones con proveedores, equipos humanos y renovación de los puntos de venta”, en la que las empresas de ANGED han invertido 15.000 millones en los últimos 10 años.

En el centro la ministra Reyes Maroto, a su derecha, Alfonso Merry del Val, presidente de ANGED, y Michael Koening de la UE. Alfonso Esteban.

En su opinión, este “cambio de paradigma del consumo y el comercio” que hoy vivimos “requiere una revisión normativa sin precedentes, desde aspectos nuevos relacionados con la tecnología a cuestiones operativas fundamentales como una fiscalidad no discriminatoria, la libertad de establecimiento, la flexibilidad de horarios, la unidad de mercado y la seguridad jurídica”.

Para Del Val es preocupante tener “una legislación tan cambiante y fragmentada en 17 comunidades. Esto genera un enorme entramado burocrático tan complejo que crea graves ineficiencias y ahoga la inversión empresarial». Ha advertido que la regulación autonómica puede convertirse en «una máquina de destrucción» de empleo para los comerciantes físicos.

Por su parte, la ministra Maroto que llegó a esta Asamblea General tras presidir la Conferencia Sectorial de Comercio con CCAA y municipios, señaló el compromiso del Gobierno por impulsar un plan para la modernización del comercio minorista, que ayude a la digitalización de establecimientos, y subrayó  que estamos ante un punto de inflexión que determinará quiénes serán los protagonistas durante las próximas décadas.

«Animamos al sector a percibir la digitalización como una oportunidad y no como una amenazada, a que tenga una mentalidad abierta y que comprendan que el comercio digital crea nuevas oportunidades en comercio exterior y facilita la entrada de actores foráneos por lo que tenemos que estar pendientes de cara a mejorar la actividad», dijo la ministra.

Desde su punto de vista, el modelo de economía 4.0 ofrece grandes oportunidades para mejorar la competitividad y para desarrollar el negocio”, recalcando que el comercio “necesita adaptarse a todos los cambios que se están produciendo, encontrándonos ante un cliente más exigente e informado, al tiempo que se están desdibujando las fronteras entre el ámbito analógico y el digital”.

Tras enumerar los “tres importantes retos” que tiene la distribución (a la hora de romper las brechas existentes en tecnología, penetración e internacionalización), la ministra afirmó que es necesario “posibilitar la competencia leal entre competidores en un marco de seguridad jurídica”.

Asimismo, la titular de Comercio también destacó la necesidad de conseguir “trabajadores capacitados que adquieran las competencias digitales para que el sector se adapte a las nuevas demandas”. A este efecto recordó la colaboración con el actual ministro de Educación para impulsar la Formación Profesional Dual, de tal forma “que los más jóvenes ya hagan prácticas en empresas que posteriormente les acogerán”.

Como ha comentado en otros foros de opinión, Maroto volvió a incidir en que “España no puede quedarse atrás en transformación digital; el Gobierno está comprometido con la transformación digital, que debe verse como una oportunidad y no como una amenaza, ya que facilita la competitividad”.

El sector comercial en España se encuentra en un punto de inflexión, ha reflexionado, “para saber quiénes serán los protagonistas en las próximas décadas.

Marco flexible normativo

La veintena de compañías integradas en ANGED facturaron en España 40.992 millones de euros en 2017, un 3 % más que en 2016, con lo que encadenaron cuatro años al alza; en tanto que el empleo se mantuvo prácticamente estable, con un crecimiento interanual del 0,15 % y una plantilla al cierre del ejercicio de 232.187 trabajadores. Su inversión sumó 1.046 millones de euros, un 4,6 % más, y al cierre del ejercicio contaban con 6.257 establecimientos, 73 más que un año antes.

En  opinión del presidente de ANGED , los legisladores, sobre todo los autonómicos, no pueden quedar al margen del cambio a la sociedad digital que se está produciendo porque «el coste de oportunidad sería muy alto para todos, en términos de competitividad, crecimiento y oportunidades de empleo».

Al mismo tiempo recordó que  el esfuerzo de empresas y trabajadores por pactar un convenio que permite adaptarse a la era digital debe ser correspondido por las administraciones con un entorno normativo seguro, estable y sencillo.

Merry del Val recomendó  especialmente a los legisladores autonómicos “dejar atrás la dicotomía entre canal físico y digital o el viejo conflicto entre pequeño comercio y distribución”, para trabajar en un nuevo “marco normativo seguro, estable y sencillo, construido sobre la base del entendimiento y una visión estratégica de futuro”.

En su opinión, sólo con más libertad comercial se podrán “crear oportunidades e incorporar al máximo número posible de empresas en el nuevo entorno digital”. Apuntó a lo asistentes que el camino contrario a las reformas es el del proteccionismo.

“Bloquear el cambio genera efectos perversos y resulta absolutamente inútil en la sociedad digital en la que nos movemos», indicó  Merry del Val, quien advirtió que la regulación existente se elaboró en los ochenta con el errático objetivo de proteger al pequeño comercio en detrimento de los grandes formatos.

En la clausura, tomó la palabra también Michael Koening, responsable de Retail en DG Growth de la Comisión Europea, que recientemente ha situado a España como el segundo país de la UE con mayor número de restricciones al ejercicio del comercio.

En su intervención señaló que la UE ha impulsado muchas medidas para que se desarrolle el comercio online. “La distribución física nunca desaparecerá aunque los países de la UE tendrán que impulsar un marco normativo mas flexible para dar respuesta a los cambios digitales que llegan a la economía”.

Indicó  que tanto la apertura de establecimientos como su modificación horaria han sido hitos importantes: “Es cierto que hay que contar con la normativa laboral, medioambiental o de salud pública pero no debe ser tan restrictiva como ahora”.

En junio del año que viene pretende organizar otra Conferencia en Bruselas sobre comercio como la que tuvo lugar este año antes del verano. Para Koening es muy importante que la UE escuche a los empresarios del sector retail , sus necesidades y demandas para adaptarse al nuevo mercado global europeo.

No se puede olvidar que estamos ante una de las actividades más destacadas de la economía con un peso sobre el PIB europeo del 4,5% por cien.

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