Joan Tardà ha sido el primer testigo que ha declarado. Foto: EP
Marchena amonesta a Tardà y le recuerda su condición de testigo para que no haga ‘valoraciones políticas’
El diputado de ERC ha comenzado a responder en catalán y ha dicho que "este juicio está inspirado en la venganza"
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27/2/2019 13:00
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Actualizado: 27/2/2019 15:59
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El presidente del tribunal que juzga el proceso independentista en Cataluña, Manuel Marchena, ha amonestado hoy al diputado de ERC Joan Tardà y le ha recordado su condición de testigo en este proceso para que no realice «valoraciones políticas» o «juicios de valor».
Al comenzar la octava sesión del juicio, el magistrado ha explicado que la contribución de los testigos es ayudar al esclarecimiento de los hechos, por lo que ha instado a «evitar debates y valoraciones».
Joan Tardà ha sido el primero en declarar. Su comparecencia ha durado apenas media hora.
A la primera pregunta de la acusación popular que ejerce VOX y que hoy es la primera vez que interviene en el juicio, éste ha comenzado a responder en catalán.
El abogado Pedro Fernández le ha preguntado si recordaba un tuit que publicó el pasado julio afirmando que la «negativa de PP y PSOE» es lo que llevó a los independentistas a «desobedecer» en 2017.
Cuando Tardà respondía Marchena le ha interrumpido.
«No empezamos bien», ha dicho el presidente del tribunal al líder diputado, y le ha explicado que«como testigo tiene la obligación de emplear la lengua oficial del foro y del lugar en el que tiene lugar el juicio».
Otra cosa, ha añadido, es que el tribunal «haya dado la opción a los acusados de hablar en su lengua», pero los testigos sólo pueden expresarse en castellano.
El diputado de ERC ha empezado a decir que «este juicio está inspirado en la venganza», y de nuevo ha sido interrumpido por Marchena, que le ha recordado la condición de testigo en la que comparece.
«Un testigo es alguien que se pone a disposición de las partes de la administración de justicia exclusivamente para contribuir al esclarecimiento del hecho. Usted está para ayudarnos al esclarecimiento del hecho. No está autorizado a hacer valoraciones políticas pese a su condición de diputado», ha destacado.
El presidente del tribunal le ha pedido «por favor» que «se someta a la razón de su llamamiento» a declarar como testigo en el procedimiento, pero que no lo haga «a partir de sus valoraciones, sino a partir de lo que pudo percibir» cuando tuvieron lugar los hechos.
Marchena también ha recordado al abogado de VOX Pedro Fernández que «no existe el testigo opinante para la valoración de los hechos».
La abogada del Estado Rosa María Seoane ha preguntado a Tardà si conoce a Josep Maria Jové, exsecretario general de la Consejería de Economía del anterior gobierno autonómico, exnúmero dos de Oriol Junqueras.
En el registro ordenado en el domicilio de Jové, por el magistrado Juan Antonio Ramírez Sunyer, fallecido el pasado diciembre, que era el titular del Juzgado de Instrucción 13 de Barcelona, la Guardia Civil encontró el documento Enfocats, la hoja de ruta secreta para la independencia de Cataluña, y una agenda con nombres y reuniones de los supuestos implicados en la misma.
Jové fue detenido el pasado 27 de septiembre en un operativo de la Guardia Civil contra el núcleo duro de coordinación del 1-O y el TSJCat lo está investigando por su implicación en el ‘procés’ y la organización del referéndum.
Entonces Tardà ha corregido a Seoana sobre la forma de pronunciar su apellido.
Marchena ha tenido que interrumpir nuevamente cuando Tardà estaba relatando el ideario político de su partido, algo que, según el magistrado, «no interesa» al tribunal por su calidad de testigo.
Preguntado sobre si entiende la movilización ciudadana como un modo de «coacción al Estado», Tardà ha dicho que no, que lo considera un «factor de progreso».
También ha destacado que «ni la unidad de España ni la independencia de Cataluña valen una mínima violencia».
Sobre la jornada del 20 de septiembre de 2017, ha relatado que acudió a la sede de la Consejería de Economía y que en un momento dado se dirigió a los manifestantes para pedirles que no cayeran en «ninguna provocación» y que «había que evitar cualquier violencia» y hacer «todo a la catalana, es decir, pacíficamente».
Tardà considera que aquella movilización fue «algo muy espontáneo» y que «había sensación de normalidad».
«No me sentí en ningún momento violentado ni que las personas de mi lado estuvieran tensas. No era un escenario de tensión, sino de indignación de ver una situación anómala e inmerecida», ha explicado en referencia a los registros judiciales que se estaban llevando a cabo aquel día.
Sobre los disturbios del 1-O, Tardà ha recordado que la exportavoz del Grupo Socialista en el Congreso y actual ministra de Defensa, Margarita Robles, registró al día siguiente una solicitud de interpelación a la entonces vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, para que explicara la actuación policial el día del referéndum.
Por lo tanto, ha destacado que «la sorpresa y la indignación» por los hechos acaecidos ese día «no sólo afectaba» a los que habían estado en Cataluña ese día, sino también a otros «demócratas, personas tan alejadas» de las tesis independentistas.
A su salida del Supremo, Tardà ha manifestado a los medios de comunicación que el juicio «está inspirado en la venganza» por la «humillación», en su opinión, «absurda» que «sintió» el Estado el 1-O «por la presencia de urnas» en Cataluña.
«Creo que este juicio debería evolucionar hacia la absolución y que el Estado español deberá tarde o temprano pedir perdón por lo acaecido», ha afirmado el diputado de ERC.
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