En 2018 se registraron 152.602 hurtos y 33.821 robos o atracos, donde ya interviene la fuerza. Foto: EP
El perfil del delincuente en España: realiza robos sin violencia contra las personas, de noche y durante el fin de semana
Se caracteriza por sus dotes de observación y preparación previa, y asalta de manera sosegada, sin la presencia del propietario, según arroja un estudio de Techco Security
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23/4/2019 10:39
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Actualizado: 23/4/2019 10:43
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El delincuente medio en España se caracteriza por sus dotes de observación y preparación previa. Asalta de manera sosegada, sin la presencia del propietario y evita la violencia contra las personas.
Así se desprende de un estudio de la empresa Techco Security sobre el comportamiento del delincuente. Lo ha realizado a partir de las conclusiones del ‘Informe anual sobre Actos Delictivos 2018’, elaborado por la compañía, y los datos del ‘Balance de Criminalidad 2018’ del Ministerio del Interior.
En 2018 se registraron en España 152.602 hurtos (sustracción de dinero u objetos sin violencia o intimidación) y 33.821 robos o atracos (donde ya interviene la fuerza y, en la mayoría de los casos hay daños físicos y materiales).
La mayoría de estos asaltos se produjeron en domicilios. Los negocios sufrieron el 21% de los ataques, seguidos de las gasolineras (19%) y los bancos (11,3%).
Las sustracciones de vehículos ascendieron a 8.712.
Según Techno Security, los ladrones suelen ser observadores y metódicos, ya que estudian y planifican previamente los robos para evitar los sistemas de seguridad e impedir la señal de alarma.
Así actuaba, por ejemplo, una banda de ladones que cayó el pasado febrero. El cabecilla tenía planos de los locales y de las porterías adyacentes, los puntos donde se tenían que ubicar los otros miembros, rutinas de los propietarios y toda una serie de detalles que denotaban su carácter metódico. Además, antes de organizar el robo, el jefe del grupo consultaba el zodiaco para escoger el mejor día para actuar.
El estudio de Techno Security indica que los daños que se producen en estos robos son materiales. Se centran en la violencia contra las instalaciones, como romper escaparates, forzar la puerta o la cerradura y abrir la caja registradora del comercio.
«Este tipo de actos delictivos suele producirse cuando el establecimiento está cerrado, habitualmente por la noche. Concretamente de medianoche a las 4 de la madrugada», detalla.
Además, informa que los asaltantes prefieren consumar el delito durante los días festivos.
«La mitad de los delitos suelen concentrarse en fin de semana, cuando los negocios están cerrados y/o hay menos afluencia de ciudadanos en las calles, especialmente en las zonas residenciales», indica.
Los atracos se caracterizan por su violencia, generalmente amenazando a las personas que se encuentren en un establecimiento comercial, en la calle o en una casa particular.
Informa que estos delincuentes suelen preferir delinquir en horario de apertura al público, cuando el sistema de alarmas está desconectado, a excepción de los pulsadores y de otros equipos de activación voluntario.
Apunta que en estos casos los delitos no requieren tanta planificación y se caracterizan por la rapidez de su ejecución.
«El objetivo suele ser dinero en metálico, y los atracadores destacan por su carácter violento, ser reincidentes en delitos menores y tener un perfil de delincuente común», explica.
El horario de afluencia a los comercios es lo que determina la hora en la que se produce el delito. Techco informa que ha constatado que los atracadores prefieren delinquir en los picos de afluencia de público, de 10 a 16 horas y de 19 a 21 horas para obtener mayor botín.
Añade que los ladrones que realizan hurtos suelen moverse por necesidad o por capricho y suelen sustraer -sin violencia contra las personas ni contra los establecimientos- los bienes de un comercio sin que nadie lo perciba.
LAS CIFRAS DE LA DELINCUENCIA EN LA COMUNIDAD DE MADRID
La delincuencia subió en la Comunidad de un Madrid un 2,3% en 2018, según el Balance de Criminalidad del Ministerio del Interior, en el que destaca la importante subida de delitos contra la libertad e indemnidad sexual y el tráfico de drogas, y el descenso de robos con violencia e intimidación y de homicidios.
La Policía Nacional y la Guardia Civil de Madrid registraron un total de 389.995 infracciones el año pasado, frente a las 381.242 de 2017.
Los delitos más graves disminuyeron, ya que se registraron 36 homicidios dolosos y asesinatos consumados, 3 más que el año anterior. Las tentativas de homicidios también bajaron, de 86 a 78.
Los delitos graves y menos graves de lesiones y riñas tumulturias también descendieron un 2%, de 2.124 en 2017 a 2.167 el año pasado. En cambio, los secuestros pasaron de 7 a 12, un 71,4% más.
Destaca el aumento de delitos contra la libertad e indemnidad sexual, que ya se incrementaron respecto el año precedente. En el último año lo hicieron un 13.6%, hasta las 2.167 infracciones de este tipo. Se registraron 252 violaciones, un 14% más que en 2017.
Además, el tráfico de drogas, en un año caracterizado por el fenómeno de los ‘narcopisos’, volvieron a subir, en esta ocasión un 21,5%, hasta las 1.954 infracciones penales.
En cambio, los robos con violencia e intimidación disminuyeron un 11,2%, hasta anotar los 14.493. Los robos con fuerza en domicilios, establecimientos y otras instalaciones se mantuvieron más o menos igual, al registrarse 19.328, eso es 18 más que en 2017. De ellos, 12.793 son robos en casas.
Los robos con fuerza en domicilios subieron un 1,8%, tras la gran bajada de 2017, y se situaron en los 12.793. Sin embargo, las sustracciones de vehículos bajaron un 18,7%, de 10.715 a 8.712 infracciones.
Los hurtos, que son los delitos que más se comen también bajaron un 2,4%, hasta llegar a los 152.602.
El tráfico de drogas también repuntó en 2018 y se incrementó un 21,5%, hasta llegar a los 1.954 delitos registrados.
En la capital también aumentó la criminalidad el año pasado, un 2%, hasta alcanzar las 240.138 infracciones, según datos de la Policía Nacional del Balance del Ministerio del Interior.
Los homicidios y asesinatos aumentaron de 16 a 20 y intentos de homicidio, en cambio, pasaron de 55 a 46.
Se registraron 1.228 riñas tumultuarias, un 1,3% menos, y se denunciaron 2 secuestros.
Al igual que en el resto de la región, los delitos contra la indemnidad y libertad sexual subieron un 16,6%, hasta 1.003. De ellos, se denunciaron 162 violaciones, un 12,5% más que en 2017.
Los robos con violencia e intimidación bajaron un 12,3% (10.086), y los robos con fuerza en domicilios bajaron un 9,4%, hasta los 5.462.
Los hurtos bajaron un 2%, hasta alcanzar los 109.909, la sustracción de coches bajó un 12,8% (5.455), mientras que el tráfico de drogas subió un 22,2 (1.465 delitos denunciados).
RECOMENDACIONES PARA PREVENIR ROBOS Y ASALTOS
Techno Security, empresa dedicada al diseño y desarrollo de soluciones tecnológicas aplicadas a sistemas electrónicos de seguridad y protección contra incendios, da una serie de recomendaciones para tratar de prevenir robos y asaltos:
-Disponer de un sistema de seguridad con, al menos, un elemento de activación voluntaria, complementado con cámaras de vídeo-verificación.
-No facilitar a terceras personas el código de seguridad de la alarma ni su palabra clave.
-Cerrar y abrir el domicilio y local acompañados por otra persona, vigilando el entorno cercano al acceso.
-Tener siempre disponible una cantidad de dinero en metálico ya que la ausencia de botín puede desencadenar en agresividad.
-Informar periódicamente a su familia y a los empleados de confianza sobre las medidas de precaución.
-Cambiar de código de seguridad si alguna persona deja de trabajar en su casa o empresa.
-No establezcer rutinas de comportamiento fáciles de predecir que permitan planear un atraco.
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