Delgado agradece a Chile que acogiera a 2.200 españoles exiliados por la Guerra Civil, tras la victoria franquista
La ministra de Justicia, Dolores Delgado, durante su intervención en un acto en Valparaíso (Chile), donde hace 80 años llegaron a ese puerto 2.200 exiliados republicanos españoles a bordo del barco "Winnipeg" tras la Guerra Civil. Foto: Twitter.

Delgado agradece a Chile que acogiera a 2.200 españoles exiliados por la Guerra Civil, tras la victoria franquista

La ministra de Justicia recuerda a los cerca de 2.200 pasajeros del barco que en 1939 llegaron a Chile huyendo del asedio franquista
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04/9/2019 06:15
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Actualizado: 03/9/2019 23:15
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Más de 2.200 republicanos españoles, derrotados en la guerra civil, pudieron encontrar una segunda patria en Chile gracias al poeta Pablo Neruda, seudónimo del chileno Ricardo Eliécer Neftalí Reyes Basoalto, a quien Gabriel García Márquez describió como «el más grande poeta del siglo XX en cualquier idioma».

Neruda, que se ganaba la vida como diplomático y se había posicionado del lado republicano, en 1939 recibió el encargo del entonces presidente Pedro Aguirre Cerda, quien lo nombró cónsul especial para la inmigración española en París, de poner en marcha el «proyecto Winnipeg».

Ese fue el nombre del barco que partió el 4 de agosto de ese año del puerto fluvial galo de Paullac y que llegó, un día como ayer, 3 de septiembre de 1939, a Valparaiso, ciudad costera del Océano Pacífico, a 115 kilómetros de la capital, Santiago.

Una odisea que Neruda describió como «su más bello poema» porque tuvo que superar obstáculos en apariencia insalvables. Para empezar, el Winnipeg era un barco de cargo que podía acoger hasta 97 personas.

Fue adaptado para llevar a los 2.200 refugiados a Chile, convirtiendo su travesía en el mayor contingente en toda la historia del exilio republicano español

Sucedió hace 80 años.

El Winnipeg fue el barco que llevó a los 2.200 exiliados republicanos, perdedores de la Guerra Civil española, desde Francia a Chile. Foto: Wikipedia.

“España tiene la obligación moral de rescatar del olvido a las víctimas que el franquismo intentó borrar y silenciar”, afirmó ayer la ministra de Justicia, Dolores Delgado, precisamente en esa ciudad, a donde se desplazó para conmemorar esa efeméride.  

En Valparaiso desembarcó la mayor parte del pasaje.

Los supervivientes y sus descendientes recordaron con mucho cariño a Neruda, que consiguió la financiación necesaria para costear los pasajes y alejarlos de la tormenta sangrienta que fue la Segunda Guerra Mundial.

Durante su estancia en Santiago, la ministra participó en un homenaje a la artista de origen catalán, Roser Bru. Bru sufrió el castigo del exilio, primero en Francia y después en Chile, a donde llegó junto a su familia con apenas 16 años a bordo del Winnipeg.

La ministra de Justicia de España, Dolores Delgado, entrega la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes a la hija de la artista hispanochilena Roser Bru, Tessa Aguadé Bru, durante la conmemoración del 80 aniversario de la llegada del barco «Winnipeg» a Valparaíso con 2.200 republicanos tras la Guerra Civil, este lunes en la sede del Congreso Nacional de Chile, en Santiago (Chile). Foto: Twitter.

Una calidad artística indudable

Delgado destacó su indudable calidad artística y su papel clave “a la hora de abrir la plástica chilena a nuevas ideas”, desde un enfoque más social, vanguardista y de ruptura con las manifestaciones artísticas anteriores.

En 2015 recibió el Premio Nacional de Artes Plásticas de Chile y, en 2018, la Medalla de Oro al Mérito de las Bellas Artes de España, que la ministra ha entregado este lunes a sus hijas, debido al delicado estado de salud de la artista, en un acto celebrado en la sede del ex Congreso Nacional.

Junto a Bru, viajaron también otras figuras ilustres de origen español cuya aportación a Chile es hoy indiscutible, como el dramaturgo José Ricardo Morales, el pintor José Balmes, el crítico Antonio Romera, el tipógrafo Mauricio Amster o el historiador Leopoldo Castedo.

«Las trayectorias vitales de todos ellos», subrayó la ministra, «contribuyeron, sin duda, al enriquecimiento cultural, social y económico de Chile».

Delgado desveló una placa conmemorativa de la llegada de los exiliados españoles a la estación central de Santiago. Foto: Twitter.

La sobrina de Antonio y Manuel Machado, entre los exiliados en Chile

Dolores Delgado tuvo ocasión de conocer la dura experiencia del exilio a través del testimonio de Carmen Machado, sobrina de los poetas Antonio y Manuel Machado.

Exiliada primero en Moscú y finalmente en Chile, con quien se entrevistó brevemente durante su estancia en la capital.

La ministra ha celebrado también un encuentro en la Embajada de España, en Santiago, con autoridades del país, familiares de los viajeros del ‘Winnipeg’ y con las delegaciones del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación y del Senado de España, que participan estos días en los actos de homenaje al exilio que están teniendo lugar en Chile.

Ante todos ellos, la ministra reiteró el compromiso del Gobierno con la reparación del honor “de estos protagonistas anónimos de la Historia de España para que sean incorporados a la memoria colectiva de nuestra patria”.

Certificados de reparación y reconocimiento personal

Delgado señaló que, en línea con ese compromiso, «desde enero de este año se han entregado 300 certificados de reparación y reconocimiento personal a quienes durante la guerra civil y la dictadura sufrieron violencia por razones políticas o ideológicas, hasta un total de casi 3.000 desde el año 2008».

El Gobierno ha emprendido la tarea, dijo la ministra, de saldar “la deuda pendiente del Estado con el exilio republicano”.

Esto se ha traducido en homenajes en los principales destinos del exilio republicano español como Argelès-sur-Mer, Orán, Argel, Moscú, México, París y también en Mauthausen, en cuyo campo murieron cerca de 4.400 españoles.

La ministra visitó, además, el Centro Cultural Estación Mapocho, donde descubrió una placa conmemorativa del 80 aniversario de la llegada de los pasajeros del ‘Winnipeg’.

Los refugiados españoles, tras el desembarco en Valparaíso, viajaron en tren hasta esta antigua estación, asentándose en la capital, Santiago, e iniciando aquí una nueva vida.

Delgado recordó el cariño con el que entonces fueron recibidos y agradeció al pueblo chileno su generosidad “al conceder una segunda oportunidad a tantos hombres y mujeres, además de esperanza y futuro a quienes el fascismo quiso condenar al olvido y al éxodo”.

La ministra con su homónimo chileno Hernán Larraín.

Durante la jornada en Santiago, la ministra de Justicia visitó el Museo de la Memoria y los Derechos Humanos y mantuvo un encuentro con el ministro de Justicia y Derechos Humanos de Chile, Hernán Larraín, con quien abordó cuestiones relativas a la cooperación judicial bilateral.

Ambos dirigentes se refirieron también a los retos de futuro de la Conferencia de Ministros y Ministras de Justicia de los Países Iberoamericanos (COMJIB) tras la reciente remodelación de su estructura en la reunión celebrada en julio en Medellín, Colombia.

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