Silvia Oñate Moya, presidenta de la Fundación Vida; Mar Galán Gómez, de ACUREMA; el notario Vicente Martorell García; María Pérez Galván, abogada de Familia y vicepresidenta de la Asociación Española de Abogados de Familia; Rafael Verdera Server, catedrático de Derecho civil de la Universidad de Valencia, y José Ángel Martínez Sanchiz, presidente de la Fundación Notariado.
La inseguridad jurídica deja vulnerables a las viudas de las familias de parejas de hecho
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29/6/2023 06:30
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Actualizado: 29/6/2023 11:44
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Las parejas de hecho no gozan de suficiente protección legal en la normativa española, según las conclusiones de los expertos invitados a participar en un foro organizado por la Fundación Notariado, que destacaron especialmente la situación que enfrentan las personas cuya pareja de hecho muere, quedando en una situación de inseguridad jurídica, en palabras de María Pérez Galván, abogada de Familia y vicepresidenta de la Asociación Española de Abogados de Familia (AEAFA).
La falta de legislación nacional general ha dado lugar a que 14 autonomías le regulen sin que se alcance una unanimidad legislativa autonómica, lo que no deja claro los deberes y derechos de las parejas de hecho en España. Según Galván, los «casos de crisis» dejan a las parejas de hecho «muy perdidas, en un limbo», por lo que es más recomendable ir a un notario y formalizar un marimonio civil o redactar un pacto de previsión de ruptura.
En el foro «Parejas de hecho, una diversidad normativa nacional y autonómica» participaron también Mar Galán Gómez, de la Asociación de Consumidores y Usuarios de la Región de Madrid (ACUREMA); Rafael Verdera Server, catedrático de Derecho civil de la Universidad de Valencia, y Silvia Oñate Moya, presidenta de la Fundación Vida, de mujeres viudas y madres de hijas e hijos huérfanos de familias de parejas de hecho.
Oñate vivió en carne propia las dificultades de perder a su pareja de hecho sin poder aprovechar las prestaciones de viudedad ni otra protección estatal para resolver cuestiones como la posibilidad de figurar como heredera. «La ley nos explotó en la cara en nuestro momento de mayor vulnerabilidad», dijo, recordando que representa en su mayoría a mujeres, ya que «la viudedad está feminizada».
«Si hay un domicilio en común, hijos en común, y están empadronados juntos y no es familia, ¿qué es una familia entonces?» sentenció Oñate, que declaró que las viudas de parejas de hecho eran «castigadas» en el momento de solicitar una pensión de viudedad. «Pedimos que la legislación se acerque a nuestra realidad social, pero falta voluntad política para cambiar las cosas».
Galán destacó que no muchas personas acuden a ACUREMA para pedir asistencia en asuntos de consumidores porque «no saben que se puede». «Hay que hacer mucha pedagogía al respecto», indicó, haciendo referencia a los espacios y bienes compartidos que suelen involucrar este tipo de relaciones a largo plazo. «Esperamos recibir más consultas», dijo.
Por su lado, Verdera calificó la legislación al respecto como «manifiestamente mejorable, como poco, indicando que es necesario «reflexionar sobre hacia dónde debe ir», mientras que Galán aseguró que «lo importante es que haya una lay marco para la regulación», caracterizando la situación actual como una «locura».
«La dispersión normativa causada por la regulación en diferentes comunidades autónomas genera dudas sobre su constitucionalidad», señaló Verdera, refiriéndose a las cuestiones civiles que se abordan en estas normas sin tener competencia para ello y la sentencia del Tribunal Constitucional que dictamina que solo puede considerarse como pareja de hecho a quienes manifiesten la voluntad de que se les considere como tal.
«Las que conviven durante años y tienen hijos en común no pueden ser forzadas a ser parejas de hecho», dijo. También somentó que en ningún caso quedaba claro el criterio para identificar a las parejas de hecho, por lo que algunas podrían estar dentro de un régimen mientras que otras podrían organizarse de la misma manera de aquella sin llegar a disfrutar de protección legal. En todo caso, las nuevas formas de emparejamiento llevan a que «no se debe pensar que deben reproducirse situaciones cuasimatrimoniales».
Los invitados, cuya discusión moderaba el notario Vicente Martorell García, coincidieron en que una reforma de la normativa debería contemplar diferentes regímenes para las diversas formas de organización de las parejas de hecho, como lo pueden ser las personas que comparten su tiempo de ocio sin compartir un domicilio, los que son padres de hijos de otras personas que se juntan cuando no tienen la custodia, entre otras.
El catedrático afirmó que «sin una visión completa, las normas quedan para los titulares», algo con lo que estuvo de acuerdo Galván al establecer que varias medidas políticas se diseñaban «para obtener votos», igual que Oñate, que dijo que «no hay que hacer leyes cortoplacistas», como la ‘ley de Familias’ impulsada por el Ministerio de Derechos Sociales.
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