Manuel Marchena, medalla de honor del ICAM, subraya la vital importancia del papel de la abogacía para la Justicia
Marchena recibió la medalla de honor y el diploma consiguiente de manos del decano del ICAM, Eugenio Ribón. Foto: ICAM.

Manuel Marchena, medalla de honor del ICAM, subraya la vital importancia del papel de la abogacía para la Justicia

|
08/11/2023 01:30
|
Actualizado: 08/11/2023 01:47
|

El Colegio de la Abogacía de Madrid (ICAM) vivió ayer por la tarde su momento cumbre en un día de juramento de nuevos colegiados y de homenaje a más de 400 letrados con 25, 50 y 60 años de ejercicio profesional al entregar su medalla de honor y el diploma consiguiente a Manuel Marchena, presidente de la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo.

Una medalla y un diploma que le fue entregado por el decano del ICAM, Eugenio Ribón, a quien acompañó el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, en cuya sede tuvo lugar este importante acontecimiento en dos actos, mañana y tarde.

Marchena, que recibió una gran ovación, calificó de trascendente el papel de la abogacía para hacer realidad los principios constitucionales y para dar legitimidad al ejercicio de la función jurisdiccional.

«Sin contradicción y sin defensa el proceso se desmorona», afirmó el presidente de la Sala de lo Penal del Supremo, tras recordar sus 40 años de ejercicio profesional, primero como abogado del turno de oficio, luego como fiscal y después como magistrado.

Manuel Marchena ha recibido la medalla de honor del ICAM
Manuel Marchena en su turno de agradecimiento por el honor recibido en el que reconoció el gran nivel técnico del turno de oficio. Foto: ICAM.

ELEVADÍSIMO NIVEL TÉCNICO DEL TURNO DE OFICIO

«Por eso quiero agradecerles su papel, su día a día, su trabajo, su entrega. El decano ha hablado del turno de oficio. Cuando evoco estos 40 años me acuerdo cuando me apunté, me alisté al turno de oficio. Y reivindico ahora, desde mi condición de presidente de la Sala de lo Penal, la enorme dignidad y el elevadísimo nivel técnico que recibimos como recursos de casación en el Tribunal Supremo suscritos por abogados del turno de oficio», afirmó.

Marchena, que en 2018 recibió el II Premio de la Asociación de Letradas y Letrados por un Turno de Oficio Digno (ALTODO), rompió una lanza a favor del turno de oficio recordando la necesidad de que su trabajo sea reconocido «por quien corresponde».

«Y no solo que sea retribuido como se merece sino que sea extendido a otros sujetos de derecho que no responden a la idea histórica de una persona física que reivindica el derecho de defensa. Creo que es fundamental que el turno de oficio tenga la posibilidad ahora de asumir entre sus funciones la labor de defensa de las personas jurídicas», concluyó, en clara referencia a la asignatura pendiente que tiene el Gobierno de reconocer el derecho de las empresas de ser defendidas, como personas jurídicas, por el turno de oficio.

En la laudatio en honor de Marchena, el decano del ICAM aplaudió “el compromiso de Manuel Marchena con la justicia, el Estado de Derecho y la dignificación de la labor de la abogacía, lo erigen como un pilar de la legalidad y la equidad”.

Eugenio Ribón, decano del ICAM
Ribón durante su intervención, haciendo la laudatio de Marchena. Foto: ICAM.

Para Eugenio Ribón, Marchena “no es solo un magistrado, es un académico, un pensador y, sobre todo, un defensor del Estado de Derecho. Su aporte al estudio y reforma de la legislación procesal ha sido significativo y es de tal magnitud que ha contribuido no solo a la evolución de nuestras prácticas jurídicas, sino también al fortalecimiento del Estado de Derecho en nuestro país”.

El decano del ICAM concluyó afirmando que la abogacía madrileña rendía tributo “a un hombre cuya vida y obra son un testimonio del derecho vivido con pasión y con respeto, de la ley entendida como vehículo de justicia y no de venganza, y del papel del abogado defensor como esencial en la balanza de la justicia.”

También recibieron la medalla de honor, a título póstumo, al abogado Ignacio Valentín-Gamazo Alcalá, que dio la vida en 1996 al ayudar a una joven cajera de una pequeña tienda de alimentación cuando era atracada a punta de pistola, y la medalla de Colegiado de Honor al secretario general del ICAM, Pedro Lescure, que el próximo mes de diciembre dejará su responsabilidad.

homenajeados icam
Por la mañana fue el juramento de los nuevos abogados. Por la tarde, la entrega de los diplomas a los abogados con 25, 50 y 60 años de ejercicio profesional, a los cuales se les entregó el diploma correspondiente. Foto: ICAM.

El acto fue clausurado por el alcalde, Martínez-Almeida.

Al mismo asistieron Francisco Marín, delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martín, y el consejero de Presidencia, Justicia y Administración Local de la Comunidad de Madrid, Miguel Ángel García Martín. Todo ello en presencia de las principales autoridades judiciales, fiscales y policiales de la región.

Noticias Relacionadas:
Lo último en Profesionales