El Rey inaugura el curso judicial con un Poder Judicial renovado y presidido, por primera vez, por una mujer
Isabel Perelló posando bajo el retrato del Rey Felipe VI, que preside hoy el solemne acto de apertura de tribunales, en una foto tomada tras su toma de posesión. Foto: CGPJ.

El Rey inaugura el curso judicial con un Poder Judicial renovado y presidido, por primera vez, por una mujer

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05/9/2024 00:45
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Actualizado: 05/9/2024 07:36
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El Rey Felipe VI preside este jueves el acto de apertura del año judicial con la novedad de contar, tras un bloqueo de más de un lustro, con un Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) renovado y con su primera presidenta en toda su historia: la magistrada Isabel Perelló.

Como es tradición, el Tribunal Supremo acogerá el solemne acto, evento que sirve de pistoletazo de salida a un nuevo curso en los juzgados y tribunales al que asistirá la cúpula judicial y los representantes de las principales instituciones del país.

Fin del bloqueo del CGPJ

Este año los discursos ya no podrán centrase, como ha ocurrido en los últimos años, en el bloqueo que el órgano de gobierno de los jueces.

Por fin se ha renovado tras más cinco años.

Por ello, en esta ocasión, lo más probable es toda la atención la acapare Isabel Perelló, quien este miércoles tomaba posesión de su cargo en el Tribunal Supremo.

Perelló realizará su primer discurso como presidenta ante la presencia de altas autoridades, entre ellas el ministro de Justicia, Félix Bolaños, en representación del Ejecutivo.

Antes de ella intervendrá el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, pendiente de que el TS resuelva el recurso contra su renovación como fiscal general y sobre su imputación por la querella presentada por Alberto González Amador, pareja de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso.

La primera foto de la nueva presidenta con la Sala de Gobierno del Supremo. De izquierda a derecha, Susana Polo, Antonio del Moral, Jacobo Barja de Quiroga, Francisco Marín Castán, Isabel Perelló, Manuel Marchena, Pablo Lucas Murillo de la Cueva, Antonio V. Sempere, Dimitry Berberoff y Tomás Sanz Hoyos. Foto: CGPJ.
Los tres poderes, ejecutivo, legislativo y judicial: Félix Bolaños, ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Isabel Perelló, presidenta del CGPJ y del TS, Francina Armengol, presidenta del Congreso de los Diputados, y Margarita Robles, ministra de Defensa, y magistrada. Foto: CGPJ.

La amnistía en el horizonte

La Justicia encara un año que se prevé intenso por la aplicación de la ley de amnistía, pendiente de que el Tribunal Constitucional (TC) responda a la cuestión de inconstitucionalidad planteada por el TS, el cual considera que la norma carece de encaje en la Carta Magna.

El Supremo directamente rechazó amnistiar la malversación del ‘procés’ y acudió al Constitucional por el delito de desórdenes públicos al tener la «absoluta convicción» de que su perdón vulneraría «al menos» el derecho a la igualdad ante la ley.

El alto tribunal aún debe responder a los recursos que buscan revocar su decisión de excluir la malversación de la amnistía, si bien el recorrido de su cuestión de inconstitucionalidad comenzará la próxima semana.

Isabel Perelló con el presidente del Tribunal Constitucional; el máximo tribunal de garantías recientemente propinó un rapapolvo al TS por la sentencia de los ERE. Foto: CGPJ.
Con el defensor del Pueblo, Ángel Gabilondo. Foto: CGPJ.

102 nombramientos de la cúpula judicial pendientes

Tras el tenso periodo acontecido con el anterior Consejo, habrá que ver como evoluciona la relación con el Ejecutivo del actual órgano de gobierno de los jueces, cuya principal misión, sin duda, es cubrir las 102 vacantes que el bloqueo en la renovación del CGPJ dejó en la cúpula judicial.

La mayoría (40) están en los tribunales superiores de justicia, a las que se suman 31 en las audiencias provinciales, 29 en el Supremo y dos en la Audiencia Nacional.

Una ingente tarea que urge afrontar pero cuyo recorrido no se antoja sencillo, habida cuenta de que completar la totalidad de los nombramientos es un proceso que puede alargarse cerca de dos años.

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