Desarticulado un importante entramado delictivo de tráfico de drogas y transporte de migrantes a la península desde Melilla
Se ha detenido a ocho personas e investigado a otras dos, de nacionalidades española y marroquí y con amplio historial delictivo.

Desarticulado un importante entramado delictivo de tráfico de drogas y transporte de migrantes a la península desde Melilla

Cobraban a cada migrante 2.000 euros por el trayecto en embarcación
|
10/2/2021 09:49
|
Actualizado: 10/2/2021 12:29
|

La Policía Nacional y la Guardia Civil han desmantelado en Melilla una organización delictiva dedicada al tráfico de hachís y al transporte de inmigrantes a la península, a los que cobraban 2.000 euros por persona por el trayecto.

Según han informado a Confilegal fuentes policiales, la travesía tuvo lugar a finales del pasado mes de diciembre y pusieron en grave peligro la vida de los migrantes, que tuvieron que ser rescatados por Salvamento Marítimo.

Los agentes han detenido a ocho personas e investigado a otras dos, de nacionalidades española y marroquí y con amplio historial delictivo, por supuestos delitos de organización criminal, contra la salud pública y contra los derechos de los ciudadanos extranjeros.

Los arrestados son hombres, y tienen entre 17 y 48 años.

Los migrantes a los que trasladaron son una mujer y 6 hombres.

La Dirección General de la Policía ha detallado que la investigación se inició el pasado mes de septiembre, cuando se detectó la existencia de un grupo organizado dedicado al transporte de sustancias estupefacientes desde Melilla a la península, bien con embarcaciones de alta velocidad o a través del método de “salto” o transbordo en alta mar entre embarcaciones.

Al confluir la investigación entre los dos cuerpos policiales, se decidió realizar la investigación conjunta con el fin de desarticular el entramado delictivo.

La operación ha sido bautizada como Candil-Fuagras.

Durante el desarrollo de la misma, dirigida por el Juzgado de Instrucción número 3 de los de Melilla, se han practicado tres registros domiciliarios en los que se han incautado 335 kilos de hachís, y se han intervenido tres embarcaciones deportivas, 17 vehículos, y siete teléfonos móviles, así como diverso material electrónico de última generación y numerosa documentación.

La investigación la han llevado a cabo la Unidad Orgánica de Policía Judicial (UOPJ) de la Comandancia de la Guardia Civil de Melilla y la Unidad de Droga y Crimen Organizado (UDYCO) de la Policía Nacional de Melilla.

Según explica la Policía, realizaban la carga de las sustancias estupefacientes en playas de Marruecos y transportaban la droga con embarcaciones recreativas, que adquiría el líder de la organización en Marruecos.

Una vez alijada la droga en alguna playa cercana al cabo de Tres Forcas (Marruecos), otros miembros de la red se encargaban de transportarla hasta las costas andaluzas.

Indica que de forma alternativa, también realizaban la modalidad de “salto”, por la cual, una vez estibada la droga en la embarcación deportiva, se dirigía a unas coordenadas concretas en alta mar y realizaban el transbordo a lanchas rápidas del tipo “go fast”.

Paralelamente, la organización también se dedicaba al transporte ilegal de migrantes a la península, lo que les reportaba un alto beneficio económico.

«Tras la captación de los migrantes y previo el pago realizado, la organización establecía un complejo dispositivo de seguridad con el objetivo de controlar todos los movimientos de las diferentes unidades de la Guardia Civil, como el GEAS, las patrullas fiscales y de seguridad ciudadana, e incluso las salidas del helicóptero de la Guardia Civil», relata la Policía.

Explica que de esta forma, una vez asegurada la operación, el jefe del dispositivo daba el visto bueno para realizar la acción con la seguridad de no ser sorprendidos.

Señala que para ello, acercaban una embarcación deportiva a la playa de la “Ensenada de los Galápagos” de Melilla, donde otro miembro de la red esperaba oculto con los migrantes para subirlos a la embarcación y emprender la travesía rumbo a la península.

Los líderes de organización residían en la ciudad de Melilla. «Supervisaban minuciosamente todos los movimientos de los miembros de la red, controlando todas las fases de compra de la droga, la captación de los migrantes, así como el posterior traslado de la droga y de las personas, no dejando ningún detalle al azar», indica la Policía.

Noticias Relacionadas:
Lo último en Tribunales