Inmaculada falleció de un infarto el pasado 13 de junio durante su jornada laboral. Trabajaba como teleoperadora en Konecta BTO en la sexta planta de la oficina situada en San Romualdo, Madrid.
CCOO defiende que Konecta BTO no obligó a sus empleados a seguir con sus labores tras el fallecimiento de una compañera en el trabajo
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20/6/2023 16:06
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Actualizado: 20/6/2023 16:10
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Inmaculada falleció de un infarto el pasado 13 de junio durante su jornada laboral. Trabajaba como teleoperadora en Konecta BTO en la sexta planta de la oficina situada en San Romualdo, Madrid. Tenía 56 años y llevaba más de 15 en la empresa. Era una persona muy querida entre sus compañeros.
Sin embargo, las alarmas saltaron cuando sindicatos como CGT, UGT y USO denunciaron que los superiores habían obligado a sus compañeros a trabajar durante dos horas con el cuerpo de la mujer presente sin parar la actividad al considerar que eran un «servicio esencial».
CGT explicó en un comunicado que los trabajadores no daban crédito tras conocer la noticia y se preguntaron por WhatsApp si seguirán cogiendo llamadas. Respondieron que sí porque era lo que les habían dicho, el servicio continuaba. Pero el sindicato mayoritario, CCOO, ha negado estos hechos.
Laura Domínguez, responsable de Contact Center en CCOO ha explicado a Confilegal que las informaciones que han ido apareciendo a lo largo de los días son confusas. “Se pecó un poco de la inmediatez y se trasladó una información que no era del todo cierta. Se basaba en suposiciones, rumores, y en la indignación de que una compañera había muerto en su puesto de trabajo”.
Eso sí, ha negado tajantemente que los superiores obligasen al resto de los empleados a seguir trabajando. “Quien permaneció en el puesto fue porque no se enteró de lo que había pasado” ya que la sala “es muy amplia” y está dividida por separadores similares a unos cubículos, por lo que “no se ven”. Otros, según Domínguez, estaban en el office descansando.
Además ha explicado que las compañeras del turno de tarde teletrabajaron ese día y las de mañana ahora desempeñan sus labores también desde casa para no tener que acudir al sitio en el que ocurrió todo.
La responsable de Contact Center de CCOO ha destacado que el sindicato ha preguntado al resto de compañeros de Inmaculada sobre lo sucedido y «ninguno nos ha dicho que fuese cierto que tuviesen que quedarse obligados».
Es más, ha hecho hincapié en que la familia está muy afectada y que hoy, en una reunión que han mantenido con la empresa para solicitar la construcción de un protocolo de actuación, les han puesto un audio en el que decían que «parasen el circo ya».
La empresa ha reconocido el infarto como accidente de trabajo
Desde CCOO han explicado que los teleoperadores están sometidos a mucha presión. «No sabemos si Inma falleció a causa de alguna llamada complicada o alguna presión que tenía en ese momento, aunque, por ahora, las informaciones que se han dado es que fue un infarto, estamos investigando».
Aunque la Konecta BTO calificó el fallecimiento como accidente laboral tras las exigencias de los sindicatos. «La empresa se puso en contacto con la familia para estar a su disposición, más no podemos pedir».
Por otro lado, en su opinión, Laura Domínguez cree que los empleados trabajaron como buenamente pudieron porque no existe un protocolo para actuar en este tipo de situaciones que determine qué hay que hacer en el caso de que una persona fallezca en su puesto de trabajo.
Si las acusaciones fuesen ciertas, Konecta BTO habría vulnerado la normativa de prevención de riesgos
Confilegal ha preguntado a Andrés Robles, abogado experto en derecho laboral de Cdlegal, qué pasaría si las acusaciones sobre si les obligaron a trabajar con su compañera fuesen ciertas.
«Más allá de los posibles ilícitos que se hayan podido cometer a nivel penal respecto al honor de la persona fallecida», laboralmente hablando también puede acarrear consecuencias.
A él le preocupa la vulneración del derecho de las personas trabajadoras si se demuestra que lo que se dice es cierto. Al fin y al cabo estuvieron allí compartiendo espacio con la persona fallecida, por lo que, para él, se habría vulnerado la normativa en materia de prevención de riesgos laborales al producirse daños morales muy graves que supondría una sanción.
Y es que haber presenciado la escena les puede crear estrés, problemas psicológicos o traumas que van a recordar cada día que acudan al puesto de trabajo, ha concluido.
Este periódico ha llamado 4 veces a Konecta BTO para que diesen su versión de los hechos. De esas llamadas, 3 han sido colgadas y una atendida. La persona que se ha puesto al teléfono no ha querido facilitarle a este medio el contacto del área de prensa al decir que no estaba autorizada para ello a pesar de que ese departamento está para atender a los medios de comunicación.
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