Cospedal era hasta hoy vocal de libre designación en el Comité Ejecutivo./ EP
Cospedal deja el Comité Ejecutivo del PP, pero mantiene su escaño
El PP pide a la ministra Dolores Delgado que haga como Cospedal y dimita
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05/11/2018 15:36
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Actualizado: 06/11/2018 09:31
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La exsecretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha renunciado hoy a su puesto como vocal en el Comité Ejecutivo Nacional del partido a raíz de sus conversaciones con el excomisario José Manuel Villarejo, en prisión preventiva por el caso Tándem. Mantiene, sin embargo, su escaño en el Congreso.
Cospedal ha justificado su decisión en que quiere evitar que «los múltiples ataques» que dice haber recibido estos días por esas conversaciones se hagan extensivos al PP y a su actual presidente, Pablo Casado.
La exministra de Defensa ha reiterado que nunca ha mentido acerca de su conocimiento del excomisario Villarejo y de que había mantenido algunas reuniones con él.
«Siempre lo hice pensando y sigo pensando que era mi obligación como secretaria general para tener toda la información posible acerca de los hechos que pudieran perjudicar a mi formación y en ese sentido actué, porque mi lucha contra la corrupción que pudiera afectar a mi partido ha sido siempre una prioridad en mi función como secretaria general», ha explicado.
Ha afirmado que «las manipulaciones que se están haciendo de las cintas publicadas tratan de ofrecer una imagen distorsionada de la realidad, son extractos editados que solo tratan de perjudicar y dañar» su imagen personal, lo que no quiere que se extienda al PP.
Después, el secretario general del PP, Teodoro García Egea, ha explicado que Cospedal ha conversado esta mañana con el presidente del partido, Pablo Casado, y que de mutuo acuerdo han decidido que dejara su puesto en la dirección nacional ‘popular’.
Ha dicho que es un gesto que «honra» a Cospedal y que demuestra que pone los intereses del partido por delante de los suyos propios.
Preguntado sobre si el partido ha pedido a Cospedal que renuncie también a su acta de diputada, ha dicho que ese cargo es personal y el PP no tiene «potestad».
Por otra parte, García Egea ha pedido a la ministra de Justicia, Dolores Delgado, que haga como Cospedal y deje su puesto en el Consejo de Ministros por sus conversaciones con Villarejo.
Y ha destacado que hay una diferencia entre Delgado y Cospedal, y es que la ministra «mintió» sobre su relación con Villarejo.
Además, ha exigido al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y al secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, que «no se atrevan a hablar» del asunto de Cospedal mientas Delgado no dimita.
Espera que no tengan «la osadía y el atrevimiento de dar una sola indicación».
«Ahora a quien le toca mover ficha es al Partido Socialista y al señor Sánchez. Es lo que toca», ha manifestado el número dos del PP, y ha reclamado que se aplique a todos «el mismo rasero».
La ministra de Justicia ya dijo el pasado a mediados de octubre que no piensa dimitir y remarcó que siempre ha tenido el apoyo del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Además, afirmó que ha “pasado página” sobre este asunto y que no teme que salgan nuevas conversaciones con el excomisario.
Cabe recordar que en los audios filtrados, la ministra contó que en un viaje de trabajo a Cartagena de Indias, en Colombia, había visto a jueces y fiscales estar con menores de edad, se refirió al titular de Interior, Fernando Grande Marlaska calificándolo de “maricón”, y dijo que ella prefiere “tribunales de tíos” a los de “tías”.
Por su relación con el excomisario, el Congreso exigió el 9 de octubre su dimisión de Delgado, una petición que respaldaron PP y Ciudadanos y que salió adelante con la abstención de Podemos. Con 166 votos a favor y 91 en contra.
EL CONTENIDO DE LAS CONVERSACIONES DE COSPEDAL Y SU MARIDO CON VILLAREJO
El pasado lunes, Moncloa.com desveló unas conversaciones entre el marido de Cospedal, Ignacio López del Hierro, y Villarejo, en las que tratan, según la citada web, de movimientos en la investigación del caso Gürtel.
Dichas conversaciones tuvieron lugar entre junio y noviembre de 2009, pocos meses después de las primeras detenciones por la Gürtel.
Según Moncloa.com y Elconfidencial, el empresario Ignacio López del Hierro utilizó presuntamente al comisario Villarejo para conseguir información privilegiada de investigaciones contra la corrupción que afectaban al PP y evitar que otras causas prosperaran.
Cospedal reconoció esos encuentros y subrayó que las conversaciones entre su partido y Villarejo sobre investigaciones de casos de corrupción vinculados al PP “no cambiaron nada” el devenir de dichos casos.
Al día siguiente, salió a la luz que la exsecretaria general del PP se reunió en secreto con Villarejo en su despacho de Génova el 21 de julio de 2009, en plena instrucción del caso Gürtel, según informó Moncloa.com. El País publicó que en esa reunión, en la que también estaba López del Hierro, Cospedal preguntó al policía por algunos de los implicados en la trama, como el entonces tesorero del PP, Luis Bárcenas, o algunos dirigentes de la Comunidad de Madrid.
En declaraciones aquel día en los pasillos del Congreso, la ‘popular’ señaló que ella siempre dijo la verdad en cuanto al excomisario a diferencia, indicó, de la ministra de Justicia, que en un primer momento negó conocerle.
“No he mentido nunca. Esto no tiene más trascendencia que unas conversaciones privadas que han salido a la luz, unos han mentido y otro no”, recalcó.
El miércoles, nuevos audios sobre la reunión que mantuvieron Cospedal y su marido con el comisario en la sede del PP revelaron que Cospedal y su marido propusieron a Villarejo «trabajos puntuales» y que el policía jubilado se mostró dispuesto a hacerlos a cambio del “pago de los gastos”.
El viernes, Moncloa.com publicó que López del Hierro encargó a Villarejo investigar a Javier Arenas, entonces portavoz del PP en el Senado, que dicho encargo fue de Cospedal y que en concreto éste consistía en investigar el paso de Arenas por la Fundación de Estudios Europeos, que mantenía con el extesorero del PP Luis Barcenas y el exeurodiputado ‘popular’ Gerardo Galeote y que aparecía en los primeros compases de la investigación judicial de Gürtel.
“Como secretaria general de un partido (…) tenía la obligación de conocer todo aquello que pudiera afectar a mi organización. Tener conversaciones con alguien que puede dar información no me tiene por qué dejar en un lugar comprometido. Más bien, al contrario. Yo estaba cumpliendo con mi obligación”, manifestó.
Hoy, el citado digital ha informado que el marido de Cospedal encargó al excomisario que espiara al hermano del entonces ministro de Interior Alfredo Pérez Rubalcaba, al que achacan la iniciativa política de la operación Gürtel.
Según los últimos audios publicados, el excomisario señala a Alejandro Pérez Rubalcaba como «el punto débil» que podía utilizar el PP contra el dirigente socialista en medio de la operación contra la trama Gürtel.
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