La ministra impuso al magistrado Ramírez Sunyer, a título póstumo, la Cruz de Honor de San Raimundo de Peñafort
El magistrado Juan Antonio Ramírez Sunyer, fallecido el 4 de noviembre del año pasado, fue el artífice de las investigaciones que han llevado a los impulsores del movimiento separatista catalán a responder ante la justicia; su trabajo ha sido reconocido por el Ministerio de Justicia, y por el Gobierno, con la Cruz de Honor de San Raimundo de Peñafort, a título póstumo, que entregó la titular de la cartera, Dolores Delgado, a su familia.

La ministra impuso al magistrado Ramírez Sunyer, a título póstumo, la Cruz de Honor de San Raimundo de Peñafort

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06/10/2019 02:00
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Actualizado: 06/10/2019 16:55
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Fue en un acto que se celebró en el Palacio de Parcent, una de las tres sedes del Ministerio de Justicia, en Madrid, poco después del último Consejo de Ministros, al que asistió la ministra de Justicia, Dolores Delgado, que fue la que lo concedió.

Lo recogió la esposa del magistrado fallecido, Juan Antonio Ramírez Sunyer, quien, desde el Juzgado de Instrucción número 13 de Barcelona, llevó a cabo las investigaciones sobre la organización y celebración del referéndum ilegal del 1 de octubre que supusieron la base para el procesamiento y enjuiciamiento de los nueve miembros del gobierno autonómico que presidió el prófugo Carles Puigdemont, la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, y los líderes de ANC y Ómnium Cultural, Jordi Sánchez y Jordi Cuixart, por el Tribunal Supremo.

Fue Ramírez Sunyer el que ordenó, los días 20 y 21 de septiembre de 2017, el registro de 40 oficinas, viviendas y locales, entre ellas las Consejería de Economía, Presidencia, Gobernación, Trabajo, Exteriores y el Centro de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información (CTTI).

En uno de esos registros, en concreto en la casa de Josep María Jové, mano derecha del entonces vicepresidente de la Generalitat, Oriol Junqueras, hoy en prisión preventiva, se encontró el documento que era la ruta secreta para conseguir ilegalmente la independencia. El «Enfocats». 

También se incautó la agenda Moleskine, que contenía las reuniones de todos los conjurados en esta conspiración.

Pruebas que han resultado de gran importancia en el juicio del Tribunal Supremo, cuya sentencia está a punto de conocerse.

Su instrucción también es la base del juicio contra los miembros de la mesa del Parlament, que serán juzgados por la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJCat).

Y de un tercer juicio contra el mayor de los «Mossos d’Esquadra», Josep Lluis Trapero, los exjefes políticos de la policía autonómica catalana Pere Soler y César Puig y la intendente Teresa Laplana, que comenzará en la Audiencia Nacional a partir del 20 de enero de 2020.

La concesión de la Cruz de Honor de San Raimundo de Peñafort reconoce los méritos relevantes de la persona.

RECONOCIMIENTO DE LAS CARRERAS JUDICIAL Y FISCAL Y DEL GOBIERNO

La petición para la concesión de este honor a Ramírez Sunyer a título póstumo se produjo a propuesta de los jueces de lo Penal de Barcelona y de la Sala de Gobierno del TSJCat, que destacaron la «independencia, imparcialidad e integridad» de Ramírez Sunyer así como «su labor callada y constante en el cumplimiento de sus deberes judiciales».

Según los proponentes, especial consideración merece «la labor desarrollada durante la última etapa de su vida pues no dejó de trabajar en ningún momento pese a la dura enfermedad y la exigencia que la complejidad de las causas que instruía le demandaba, entre ellas la referida del 1-0, seguida por delitos de malversación, prevaricación, desobediencia y revelación de secretos».

Una propuesta que también apoyó la carrera fiscal.

La Comisión Permanente del Consejo General del Poder Judicial, refrendó dicha propuesta por un acuerdo unánime. El órgano de gobierno de los jueces reconoció el gran trabajo realizado por Ramírez Sunyer y su servicio a España y al Estado democrático. 

Y el Ministerio de Justicia, en nombre del Gobierno, ha subrayado ese reconocimiento hacia el trabajo de una persona que, de no haber existido, habría puesto las cosas mucho más difíciles para que la justicia actuara. 

Ramírez Sunyer falleció el 4 de noviembre del año pasado, a los 71 años, tras sufrir un cáncer.

En el mismo acto se entregó, también a título póstumo, una condecoración idéntica a los familiares del magistrado Luis Fernando Martínez Zapatero, que murió el año pasado igualmente.

33 PERSONAS GALARDONADAS

Además de Ramírez Sunyer, les fue reconocida su entrega y contribución a la justicia a 33 personas, entre ellas al exfiscal general del Estado, Julián Sánchez Melgar, que recibió la Gran Cruz de San Raimundo de Peñafort, la más alta distinción de esta orden.

Sobre estas líneas, Julián Sánchez Melgar, exfiscal general del Estado y magistrado del Tribunal Supremo, con su sucesora al frente de la Fiscalía General del Estado, María José Segarra, y el fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Jesús Alonso, que recibió la Cruz de Honor. Foto: MJ.

Además de Jesús Alonso, fiscal jefe de la Audiencia Nacional, también fueron reconocidos con ese honor Encarnación Roca, vicepresidenta del Tribunal Constitucional, Jesús José Tirado, fiscal del máximo tribunal de garantías, María Ángeles Montes, fiscal del Tribunal Supremo, Teresa Gisbert, fiscal superior de la Comunidad Valenciana, Jorge Rabasa, fiscal jefe de Alicante y Concepción Sabadell, fiscal anticorrupción, entre otros.

La ministra Delgado con la fiscal anticorrupción Concepción Sabadell. Foto: MJ.

La fiscal superior de la Comunidad Valenciana, Teresa Gisbert, también fue reconocida con la Cruz de Honor. Foto: MJ.

Plano general de los asistentes; sentados los galardonados, entre los que también había letrados de la Administración de Justicia, como Sebastián Lastra, y funcionarios. Foto: MJ.

Foto de familia con todos los galardonados. Foto: MJ.

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