Los exjugadores del Betis Xabi Torres (izquierda) y Jordi Figueras (en el centro), a su llegada al Palacio de Justicia de Pamplona, donde se celebra el juicio por supuestos amaños de partidos en la temporada 2013-2014. Foto: EP
Los exjugadores del Betis niegan haber recibido pagos del Osasuna
Antonio Amaya reconoce que "se habló de un incentivo por ganar al Valladolid, cosa que no se cumplió"
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23/1/2020 13:35
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Actualizado: 23/1/2020 13:35
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Los exjugadores del Betis Antonio Amaya, Jordi Figueras y Xabier Torres han negado hoy haber recibido dinero por parte del Osasuna para ganar, empatar o perder algún partido en la temporada 2013/14.
Los tres están siendo juzgados por la Audiencia Provincial de Navarra junto a seis exdirectivos del Osasuna, y dos agentes inmobiliarios por el supuesto amaño de dos partidos.
El primero en declarar ha sido Antonio Amaya, que ha contestado únicamente a su abogado, y ha negado recibir dinero para ganar o dejarse perder.
«Jamás, no existe dinero para comprar la dignidad», ha manifestado. Sin embargo, ha reconocido que «se habló de un incentivo por ganar al Valladolid, cosa que no se cumplió».
Amaya ha asegurado que el exgerente del Osasuna Ángel Vizcay «jamás» le ha dado un euro.
Ha dicho que sólo lo ha visto una vez, en el hotel Los Galgos, junto a Jesús Peralta, exdirectivo del club, «en la que se habló de un incentivo por ganar al Valladolid, cosa que no se cumplió».
Sobre las salidas de dinero del Osasuna, Amaya ha destacado que «todos los exdirigentes dicen que Vizcay saca dinero de las arcas de Osasuna». «Sólo le queda intentar repartir la basura, pero está claro que el dinero se lo ha quedado él», ha afirmado.
Por otra parte, Amaya ha explicado que en 2014 se compró un vehículo porque es «un caprichoso de los coches» y «cambiaba de coche cada cinco o seis meses».
Ha afirmado que vendió su vehículo a su cuñado a mediados de mayo por el que recibió 23.000 euros en efectivo. «Pactamos que me pagaría los otros 13.000 euros cuando vendiera su coche», ha apuntado.
Cantidad que, a los dos o tres días, ingresó en su cuenta. «Se puede ver que el seguro lo di de baja y hay un papel de compraventa de la tienda», ha añadido Amaya.
Ha explicado que esos 13.000 euros por la venta del coche se lo quedó en su casa puesto que le gusta tener dinero en efectivo.
Ha asegurado que de esos 13.000 euros salieron 900 euros que pagó como una señal para un piso en junio, y que por esas fechas se compró una moto por 4.000 euros que pagó en tres veces.
«Me tocaron mil y pico euros en el Casino y al día siguiente me permití el capricho de dar esa señal para la moto», ha señalado.
Finalmente, ha justificado que en diciembre de 2014 sacara 10.000 euros en efectivo y a los pocos días otros 4.000, diciendo que le gusta más «tener el dinero en casa que en el banco», porque se acostumbró a vivir con dinero en efectivo.
El siguiente en declarar ha sido Jordi Figueras, quien también ha contestado sólo a las preguntas de su abogado.
Figueres ha negado conocer a Ángel Vizcay o algún otro directivo del Osasuna. Ha dicho que «jamás» se ha reunido con ellos y ha asegurado desconocer si hubo reuniones en un hotel de Madrid con estos exmandatarios.
También ha dicho que desconocía que La Liga había contratado un detective para seguirle; algo que descubrió cuando se levantó el secreto de sumario.
Al respecto, ha indicado que el informe de este detective «dice que a las siete de la tarde llego a mi casa y no vuelvo a salir de ahí».
Ha explicado que no pudo jugar el partido Betis-Valladolid por estar sancionado y ha negado recibir ninguna cantidad de dinero aparte de su club de entonces. «Sólo cobraba del Betis», ha insistido.
También se ha referido a «dos operaciones anómalas» incluidas en el informe patrimonial sobre sus cuentas realizado por parte de la Agencia Tributaria.
La primera de ellas, del 30 de mayo de 2014, es un ingreso de 11.125 euros por parte de su entonces compañero del Betis, Antonio Adán, como regalo de bodas, que tuvo lugar el 7 de junio. Al respecto, ha atribuido a un error de Adán este ingreso ya que «no se había dado cuenta y había metido un cero de más».
«Le hice una transferencia de devolución porque me quería regalar 1.125 euros», ha afirmado.
El segundo ingreso, de 3.670 euros, se produjo el 11 de junio y Figueras lo ha atribuido a dinero en efectivo regalado por los invitados el día de su boda. Una cantidad que, posteriormente, ingresó en la cuenta de la que es titular junto con su pareja e hijo.
Xabier Torres, que al igual que el resto sólo a las preguntas de su abogado, también ha negado conocer a Vizcay, Peralta, Maquírrian, y a los exdirectivos del Osasuna acusados, y ha afirmado que «jamás» ha recibido dinero extra de algún club por ganar, empatar o perder un partido.
Ha negado reunirse o mantener contactos con directivos del Osasuna para tratar estas cuestiones, y ha asegurado desconocer si se produjeron estas reuniones.
Preguntado que por qué Vizcay y otros acusados le han identificado como la persona que asistió la reunión en la que se pactaron los presuntos pagos, Torres ha contestado que no tiene «ni la menor idea» y ha dicho que «es algo que habría que preguntarle a ellos».
Ha explicado que en la temporada 2013/14 tuvo una lesión muy importante, rotura completa del tendón de aquiles, que le tuvo de baja entre seis y siete meses, razón por la que en su club le quitaron la ficha federativa «para poder fichar a otro jugador».
Torres ha subrayado que durante el final de la temporada 2013/14 «no había ninguna posibilidad» de jugar un partido de fútbol «porque no tenía ficha».
También ha explicado que en el primer semestre de 2014 viajó «bastantes veces a Madrid» porque iba mucho a una clínica para arreglarse la boca, para visitar a su antiguo médico del Getafe y por una operación de su pareja.
Preguntado por la compra de una barca en un salón náutico de Valencia, el exjugador del Betis ha indicado que viene de una familia de pescadores y que decidió comprar una barca «para volver a revivir esos recuerdos de infancia».
Ha afirmado que disponía del dinero para su compra porque el verano anterior, como estuvo «a punto de comprar en varias ocasiones», lo retiró, al igual que su padre.
Un dinero que sacaba de su cuenta y de los ahorros que ha obtenido en su actuación futbolística, según ha apuntado.
Ha justificado la realización de diferentes reintegros en que en momentos oportunos que estaban a punto de hacerse con esa barca y que finalmente realizó un ingreso de 20.000 euros al club náutico para contratar el amarre.
El pasado martes, el exgerente del Osasuna Ángel Vizcay afirmó que el club decidió en la parte final de la temporada 2012-2013 pagar al Getafe para que se dejara ganar contra Osasuna y pagar, asimismo, a Valladolid y a Betis para que ganaran a Deportivo de la Coruña y Celta de Vigo, rivales directos del Osasuna por la salvación en Primera División.
Tras él declaró Miguel Archanco, presidente del Osasuna entre 2012 y 2014, y manifestó que el club «no ha amañado partidos, ni ha pagado cantidades a jugadores de otros clubes» con ese fin y que «la única vez» que ha pagado el Osasuna ha sido porque un tercero ganara un partido.
En concreto, para que el Betis le ganara al Valladolid en 2014, dado que favorecía los intereses para que el Osasuna pudiera permanecer en Primera División.
El juez instructor cifró el dinero extraído de las cuentas del club con fines delictivos o cuyo destino no ha sido justificado por los directivos responsables de la gestión del club en al menos 2,2 millones de euros.
Sobre la supuesta compra de partidos, el magistrado estimó que había indicios de que exmandatarios del Osasuna pagaron a tres jugadores del Betis -Antonio Amaya, Jordi Figueras y Xavier Torres- 650.000 euros en metálico: 400.000 para que ganaran al Valladolid y 250.000 para que perdieran con el club rojillo en los dos últimos partidos de la temporada 2013-14.
Las penas más altas solicitadas por la fiscal Ana Marcotegui Barber son 14 años para Vizcay, 12 años para Archanco y Peralta; mientras que las más bajas son dos años para los exfutbolistas del Betis.
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