Agosto, mes inhábil pero no tanto: para los abogados autónomos la desconexión digital es imposible
Confilegal ha contactado con cinco letrados autónomos para conocer cuál ha sido su experiencia este verano.

Agosto, mes inhábil pero no tanto: para los abogados autónomos la desconexión digital es imposible

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31/8/2023 00:30
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Actualizado: 01/9/2023 09:31
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Agosto es un mes inhábil, sin embargo, cuando los abogados son autónomos no dejan de trabajar porque deben atender a clientes cuya frase favorita es: «¿cómo va lo mío?» Esta situación puede afectar a la salud mental de los trabajadores.

Confilegal ha contactado con cinco letrados autónomos para conocer cuál ha sido su experiencia este verano.

Daniel Sánchez Bernal

Daniel Sánchez Bernal.

Daniel Sánchez Bernal es el abogado que lleva años luchando contra los señalamientos tardíos. Para él, la desconexión digital es un mito porque no pueden estar 24 horas al día pendientes de si les van a llamar clientes con algún asunto urgente.

Y todo ello sin mencionar al turno del oficio. Para él sus compañeros son verdaderos ángeles de la guarda. “Y si los que no estamos en él no desconectamos, ellos menos. Tengo compañeros que en agosto tienen que interrumpir sus vacaciones para atender al turno de oficio, son unos héroes”, explica. 

Considera que esta falta de desconexión afecta a la salud mental, por lo que debe ser «real y efectiva». Es más, Sánchez Bernal cuenta que una de las profesiones con mayores tasas de suicidios es la jurídica y, más concretamente, la que representa al ejercicio de la abogacía.

Los abogados del turno de oficio son unos héroes

Gracias a sus compañeros, él no ha tenido que anular planes estas vacaciones. Sin embargo, en sus últimos viajes, que han sido a Perú y Jordania, ha realizado comparecencias judiciales a través de su portátil.

En este mes inhábil ha recibido un sinfín de llamadas tanto de clientes como de juzgados o administraciones públicas porque para muchas actuaciones judiciales el ritmo no ha parado. «La Justicia se encuentra semidormida pero no dormida”. 

En agosto ha estado 15 días de “vacaciones” -tal y como entrecomilla él- en una playa gaditana y ha tenido que conciliar sus vacaciones con sus obligaciones como profesional del derecho atendiendo clientes, redactando papeletas de conciliación, demandas de despido o solicitudes de diligencias preliminares. “Es un continuo sinvivir y, al final, termina por pasarnos factura y, más aún, a los justiciables”.

Rosana Pérez Gurrea

Rosana-Pérez-Gurrea
Rosana Pérez Gurrea.

Para Rosana Pérez Gurrea, los abogados que llevan causas con presos o temas relativos a la violencia de género urgentes, como es su caso, saben de antemano que no van a poder desconectar del todo porque este tipo de situaciones, según el artículo 183 de la Ley Orgánica del Poder Judicial sí han de atenderse.

Este mes ha tenido que cancelar algunos de sus planes para ejercer la profesión. Le llamó la madre de un cliente porque su hijo había sido detenido e iban a ejecutar una orden de expulsión. “En estos casos el margen de tiempo que tenemos los abogados para actuar es muy breve, en 24 horas les ponen un vuelo con destino a su país”, cuenta.

Hay veces que hay poco margen de tiempo y hay que actuar muy rápido

Reconoce que hizo bien en meter en la maleta el ordenador y todo lo necesario para poder trabajar pero, aunque comunicó a sus clientes los días en los que iba a estar de vacaciones, ha recibido muchas llamadas. Por ejemplo, una de ellas, con una orden de protección por violencia de género, la llamó por el presunto quebrantamiento de la medida cautelar por parte de su expareja. 

En cuanto a la salud mental, cree que para aquellos que no logren desconectar del trabajo sí puede afectarles, pero, en su caso, intenta siempre sacar tiempo para cargar pilas. “Sería conveniente que se impulsaran medidas legislativas para garantizar la desconexión digital de los profesionales y posibilitar la conciliación entre la vida familiar y laboral”, manifiesta Pérez Gurrea.

Su familia está acostumbrada a que, a veces, tenga que ponerse a trabajar en tiempo libre, no obstante, siempre deja una parcela de tiempo para compartir con ellos. 

Silvia Campaña Piquer

Silvia Campaña Piquer.

Silvia Campaña Piquer también lleva siempre el portátil en la maleta por si le notifican algo. Para ella, la desconexión total es imposible porque es su propia jefa y eso tiene ventajas e inconvenientes. “No tienes la seguridad de una nómina a final de mes pero tienes libertad también para adaptar tus horarios. Hay meses que no ingresas nada y meses que facturas mucho”, aunque reconoce que no lo cambia por nada. 

Y aunque no ha tenido que anular ninguno de sus planes este agosto, sí ha tenido que adaptar horarios porque ha tenido reuniones con clientes por las zonas en las que ha estado de vacaciones al tener asuntos por toda España. “Ya que estoy, aprovecho”.

Los autónomos no tenemos una seguridad de una nómina a final de mes

De hecho ya ha habido más de un cliente que aún sabiendo que estaba de vacaciones le han escrito por whatsap diciendo: “perdona, se que estás de vacaciones pero necesito hacerte una consulta”. 

En su opinión, los abogados no están valorados. “Mi médico está de vacaciones y a mi no se me ocurre molestarle o escribirle, de hecho no tengo ni su móvil, y en nuestra profesión no se respetan horarios ni festivos”.

Este mes de agosto ha adelantado temas, hecho demandas y escritos de trámite que le notificaron el 31 de julio para presentar el 1 de septiembre, finaliza Campaña Piquer.

José Antonio Sires García

José Antonio Sires García.

El compañero de viaje de José Antonio Sires en sus días de su periodo estival son tanto su portátil como su móvil. “Casi todas las jurisdicciones mantienen el mes de agosto como plazo hábil para algunas actuaciones”, cuenta. Ello le llevó a planificar sus vacaciones y estar unas 4 o 5 horas al día conectado de forma remota a su despacho.

Al igual que sus compañeros, para él la desconexión digital es una entelequia. Al ser penalista no conoce ese descanso porque en tal jurisdicción el mes de agosto está completamente habilitado para recibir autos, presentar recursos o impugnar alegaciones de las contrapartes.

«Los juzgados no esperan»

Este año sus vacaciones iban a comenzar el 16 de agosto, todo estaba planificado para salir de viaje y dos días antes, desde un juzgado en el que se estaba investigando un presunto asesinato machista “le colocaron» una declaración para ese mismo día y el siguiente. Su familia se tuvo que ir sin él.

“Los juzgados no esperan, te lo notifican en plenas vacaciones y ya tienes tú el riesgo y responsabilidad de que se te pase algún plazo”, explica Sires García.

Su bufete no cierra en verano y siempre hay algún compañero al otro lado del teléfono, pero ha recibido llamadas de clientes que querían consultarle a él personalmente un asunto con el que se ha tenido que comunicar a través de videollamadas.

Su familia está acostumbrada a ello porque saben que su profesión es vocacional y que trabaja día y noche, pero sus hijos, al ser pequeños, no entienden el motivo por el cual su padre está en la playa o en la piscina con el teléfono. 

Marta Campaña Piquer

Marta Campaña Piquer.

Marta Campaña Piquer no se lleva su ordenador en vacaciones. «Si fuera así no tendríamos una vida normal y más partiendo de la base que, en esta profesión, pocos clientes respetan horarios, fines de semana y festivos. Los médicos tampoco van por la calle con sus estetoscopios y se asume como normal», apunta.

Alguna vez ha anulado sus planes pero con el tiempo y la experiencia ha aprendido a valorar su tiempo libre y a conciliar su trabajo y vida personal sin tener que sacrificar nada. Y aunque intenta que la situación no afecte a su salud mental, «es bastante difícil y es frecuente tener ansiedad, estrés y vivir con ello normalizándolo».

«El autónomo descansará el día que no nos cueste la vida ser autónomos»

«Siempre está el cliente que quiere su solución para ayer hasta que pides el pago de tus honorarios para mañana, entonces ya las prisas se relajan».

Este mes ha recibido llamadas para asumir nuevos trabajos pero ya de cara a septiembre excepto las propias derivadas de una guardia que ha tenido. También ha tenido que preparar alegaciones para asuntos de extranjería.

Sin embargo, explica que hay clientes que suelen llamar o escribir por costumbre como si a parte de su letrada, fuera su psicóloga o su coach. Por lo que cree que el autónomo descansará el día que no les cueste la vida ser autónomos.

«Mientras las cuotas sean equiparables a las de una hipoteca no podremos descansar ni desconectar del trabajo como quien lo hace por cuenta ajena», concluye la abogada.

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